Red social de Arqueologos e Historiadores
Siluetas de manos en la cueva de El Castillo, de al menos 48.000 años de antigüedad, podrían ser obra de los neandertales.
Fuente: Nature | Tim Apenzeller| 15 de mayo de 2013 (Traducción de G.C.C. para Terrae Antiqvae)
En una cueva húmeda española, Alistair Pike (izquierda) aplica un pequeño torno a las pinturas conocidas más antiguas del mundo. Cada pocos minutos, el sonido del 'torno de dentista' se detiene, y Pike, un arqueólogo de la Universidad de Southampton, en el Reino Unido, se coloca a un lado para que un grupo de turistas pueda admirar las simples obras artísticas -confusos discos rojos, huellas de manos estarcidas, los contornos de un bisonte, etc.- que embadurnan las decenas de paredes de la cueva desde hace miles de años. Él espera que los visitantes no se den cuenta de las pequeñas marcas de desgaste que ha dejado.
De hecho, el torno de Pike -y el bisturí que esgrime para raspar pequeñas muestras- no está haciendo ningún daño a las pinturas y está trabajando con la plena aprobación de las autoridades españolas. Posteriormente, Pike desincrusta la calcita que se ha acumulado a lo largo de los milenios debido al agua subterránea que gotea por la pared. Las manchas blancas que él desaloja tienen una pizca de átomos de uranio, cuya descomposición actúa como un reloj radiactivo. Un reloj que ha estado marcando el tiempo desde que la calcita se formó en la parte superior de la obra artística.
Los resultados de las muestras, en un análisis anterior, en la cueva de El Castillo, publicados en junio del año pasado, mostraron que la más antigua de las pinturas, un simple punto rojo, databa de hace al menos 40.800 años, más o menos cuando los primeros humanos modernos llegaron a Europa occidental. Pike y sus colegas piensan que cuando analicen las últimas muestras, las pinturas pueden llegar a ser aún más antiguas, tal vez por miles de años, y, en consecuencia, demasiado alejadas en el tiempo como para haber sido realizadas por los humanos modernos. Si es así, los artistas pueden haber sido los musculosos y arcaicos neandertales, los cuales ya vivían en Europa desde mucho antes.
La respuesta no se conocerá por lo menos hasta dentro de un año, pero si es favorable a los neandertales, ello que podría inclinar -si es que no lo resuelve- un debate que ha retumbado durante décadas: ¿tenían los neandertales, caricaturizados en ocasiones como brutos hombres de las cavernas, una mente como la nuestra, capaz de pensamiento abstracto, de simbolizar e incluso producir obras artísticas? Es una de las preguntas más inquietantes acerca de unos individuos que alguna vez compartieron el continente con nosotros para luego desaparecer misteriosamente.
Una datación temprana de las pinturas también sería una reivindicación para el hombre delgado, y de pelo oscuro, que está mirando como Pike trabaja: João Zilhão (izquierda), quien se ha erigido en el principal defensor de los neandertales, apoyando sin descanso la idea de que estos europeos de la Edad del Hielo eran cognitivamente iguales a nosotros.
Zilhão, un arqueólogo de la Institución Catalana de Investigación y Estudios Avanzados de la Universidad de Barcelona, en España, cree que otros signos de la sofisticada cultura neandertal ya han demostrado su punto de vista. Pero él está dispuesto a debatir con sus oponentes sobre sus términos. "En mi opinión, no es necesario la evidencia de pinturas", dice. "Pero creo que para muchos de mis colegas ello sería el 'arma humeante'".
La línea del frente en la guerra del neandertal se ejecuta también a través de otra cueva: la Grotte du Renne, a 1.000 kilómetros del centro de Francia. Ya en la década de 1950 las excavaciones realizadas en el lugar desenterraron una colección de objetos desconcertantes. Entre ellos se encontraban punzones de hueso, cuchillas líticas características y adornos paleolíticos como dientes de animales, tales como zorros o marmotas, estriados o perforados para poder ser usados como colgantes (derecha). Los mismos estaban enterrados debajo de objetos típicos de los primeros humanos modernos, lo que sugiere que dichos objetos eran de mayor antigüedad. Una posibilidad llamativa se cernía sobre ello: que los artefactos de este estilo, conocido como industria Chatelperroniense, fueron hechos por los neandertales.
Los parientes cercanos de los humanos modernos, los neandertales, evolucionaron en el oeste de Eurasia y Europa durante más de 200.000 años, soportando varias glaciaciones. A pesar de sus habilidades de supervivencia y grandes cerebros -comparables a los nuestros- nunca se les ha vinculado con sofisticadas herramientas y adornos.
Sin embargo, en 1980, los arqueólogos informaron del hallazgo de un esqueleto de neandertal entre las herramientas Chatelperroniense en otro lugar en Francia. Y en 1996, el paleontólogo francés Jean-Jacques Hublin (izquierda), y sus colegas, informaron que un fragmento de cráneo, hallado en la capa donde se encntraron los adornos de la Grotte du Renne, era inequívocamente neandertal.
Desde entonces, la Grotte du Renne ha sido considerada como un caso en el que los neandertales, al igual que nosotros, traficaban con símbolos y usaban ornamentos como insignias de identidad de individuos o grupos.
Sin embargo, el mismo Hublin no llegó tan lejos. Sugirió que los neandertales habían caído bajo el influjo de nuevos vecinos extraños: los humanos modernos, los cuales se cree que habían llegado a Europa en la época de la industria Chatelperroniense. Los neandertales podrían haber adquirido los adornos de los humanos modernos, o hecho los propios colgantes bajo la influencia de los recién llegados.
Esta conclusión enfureció a Zilhão, convirtiéndolo en el apasionado defensor de los neandertales que es hoy. Puso en duda la evidencia de que los humanos modernos ya estaban en el lugar, al tiempo que detectaba un sesgo en contra de nuestros parientes extintos. "¿Por qué igualmente no ha de ser considerada legítima la hipótesis, si es que no es más precisa, de que fueron los propios neandertales los autores de estas cosas y las hicieron para su propio uso?", pregunta Zilhão.
En una visita a los enclaves de arte rupestre en Portugal, él habló sobre el trabajo de investigación con Francesco d'Errico (derecha), un arqueólogo que trabaja en la Universidad de Burdeos, en Francia. D'Errico tuvo la misma reacción, recuerda Zilhão. "Él dijo: 'OK, vamos a hacer algo al respecto'". Desde entonces, la pareja ha peleado una guerra en dos frentes: proporcionando pruebas de las capacidades de los neandertales y oponiéndose a los estudios que reservan la capacidad de simbolismo y pensamiento abstracto a los humanos modernos.
Artistas desconocidos
Más de 15 años después la Grotte du Renne continúa siendo un campo de batalla. Desde 2010, tres trabajos de investigación han dado interpretaciones opuestas de los artefactos que los estratos soportan. En el primero, un grupo liderado por el experto en dataciones Thomas Higham, de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, empleó nuevas dataciones de radiocarbono para argumentar que las capas o estratos estaban revueltos, mezclados los restos antiguos con los más jóvenes. Si eso fuera correcto, dice el equipo de Higham, las reliquias adyacentes al fragmento del cráneo podrían no haber pertenecido a los neandertales, después de todo.
En cuestión de meses, Zilhão, d'Errico y sus colegas, dispararon con un contra-análisis sobre cómo los artefactos de diferentes tipos estaban distribuidos en la Grotte du Renne, llegando a la conclusión de que las capas estaban, en realidad, en orden y que se podía confiar en su vínculo con los neandertales. Un grupo liderado por Hublin (ahora en el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Leipzig, Alemania) presentó sus propias dataciones el pasado año, respaldando las afirmaciones de Zilhão. Pero Hublin sigue negando dar crédito completo a los neandertales. Los neandertales hicieron los objetos, datados ahora entre 45.000 y 40.000 años atrás, dijo, pero sólo después de haberse encontrado con los humanos modernos. Y esta vez él tiene evidencias nuevas para apoyarlo.
Dataciones de radiocarbono medidas por Higham, y otros, en cuevas de Italia, Gran Bretaña y Alemania, sugieren que los humanos modernos comenzaron a expandirse hacia Europa tan pronto como hace 45.000 años, varios miles de años antes de lo que se pensaba (véase también Nature 485, 2012). Zilhão rechaza enérgicamente estas afirmaciones, dudando de si las conchas o huesos de animales utilizados para las dataciones reflejan verdaderamente la edad de los fósiles humanos en los yacimientos, o si los restos humanos son modernos. "Las evidencias que muestran una presencia temprana de los humanos modernos en Europa es peor hoy en día de lo que era hace 20 años", declara.
Hublin, sin embargo, no tiene ninguna duda de que nuestros ancestros ya habían entrado en escena cuando los neandertales en Francia comenzaban a hacer punzones de hueso y colgantes de dientes de animales. Asumir que los neandertales inventaron estas tecnologías por sí mismos es aceptar "una coincidencia increíble", dice. "Tal como si los humanos modernos llegaran con estas cosas en el bolsillo: ¡bingo!"
Mentes parecidas
A pesar de esta situación de estancamiento, Zilhão dice que el registro de evidencias sobre el comportamiento neandertal a lo largo de decenas de miles de años, y antes de que los humanos modernos llegaran a Europa, demuestra su punto de vista. Se cree que los neandertales enterraban a sus muertos, lo que sugiere que tenían algún tipo de espiritualidad. Hacían pegamento para fijar sus puntas de lanza calentando savia de abedul, mientras lo protegían del aire, una hazaña que incluso los arqueólogos experimentales modernos tienen problemas para replicarlo. Muchos yacimientos neandertales incluyenrestos de pigmentos -ocre rojo y negro de manganeso- que a veces parecen estar desgastados como si fueran lápices de la Edad de Piedra. Zilhão y otros piensan que los neandertales se pintaban así mismos, creando patrones sorprendentes en su pálida piel del norte, donde cada elemento era tan simbólico como los objetos artísticos y adornos de los humanos modernos.
"No es necesario tener cuentas de conchas, usted no necesita tener objetos con representaciones gráficas para tener un comportamiento que se pueda definir arqueológicamente como simbólico", dice. "Enterrar a sus muertos es un comportamiento simbólico. Hacer compuestos químicos sofisticados con el fin de empuñar herramientas de piedra implica una capacidad de pensar de manera abstracta, una capacidad de planificar el futuro, y en eso son básicamente similares a nosotros".
Cuando Zilhão ve un patrón claro, los escépticos ven incertidumbres. Harold Dibble, un antropólogo de la Universidad de Pennsylvania, en Filadelfia, esta volviendo a examinar lo que se supone son enterramientos neandertales. En uno, en la cueva francesa de Roc de Marsal, dice que lo que parecía ser una fosa excavada deliberadamente es en realidad un pozo natural. En otro, en La Ferrassie, ve evidencias de que los sedimentos arrastrados dentro de la cueva por el agua -no por parientes dolientes- podrían haber enterrado los restos de un neandertal.
En cuanto a los 'lápices' de ocre, Dibble es despectivo. "Uno ve algo de desgaste en un pedazo de ocre y, de pronto, crees que tienes pintura corporal de los neandertales", dice. "Lo cual supone un montón de saltos lógicos". Él y otros piensan que el pigmento tiene muchos usos posibles: como repelente de insectos, como conservante de alimentos o de pieles de animales, o un ingrediente para el pegamento.
Incluso Wil Roebroeks (derecha) de la Universidad de Leiden en los Países Bajos, que halló evidencias del uso del ocre ya desde hace 250.000 años, en un yacimiento neandertal holandés, dice que "Zilhão salta demasiado rápido de la presencia de ocre a la decoración del cuerpo".
Al preguntar a Dibble, Hublin, y otros escépticos, qué los persuadiría de que los neandertales tenían mentes como las nuestras, la respuesta es simple: un patrón de arte u otra expresión simbólica sofisticada en un tiempo en el que los humanos modernos no hubieran estado posiblemente alrededor. "Pero yo no creo que esa posibilidad exista", dice Hublin.
Sin embargo, Zilhão apunta a un singular hallazgo, en un yacimiento neandertal, en el sur de España, del cual informó hace ya tres años: tres conchas de berberechos cada una con un agujero cerca del borde, como si hubieran sido usadas como adornos (izquierda). Una contiene un trazo de pigmento rojo, y una cuarta concha está manchada con una mezcla de colores, como si hubiera sido utilizado como un recipiente de pintura (abajo a la derecha).
Las conchas, dice Zilhão, implican pensamiento simbólico totalmente equivalente al de los humanos modernos que salieron de África del Sur, hace 75.000 años, con un tesoro de adornos. Con unos 50.000 años de antigüedad, dice, las conchas de España datan de un tiempo que es anterior a la llegada de los humanos modernos a la región.
Pero los críticos no están satisfechos. Las perforaciones son naturales, como el propio Zilhão observó, lo que sugiere para Hublin y Dibble que, en lugar de unos ornamentos, sistemáticamente modelados, los neandertales podrían haber cogido algunas conchas raras a título de capricho. "Cuando tienes a casos aislados, singulares, eso no va a convencer a la mayoría de nosotros", dijo Dibble.
Las pinturas de El Castillo podrían ayudar a establecer un patrón. El grupo de investigación fue conservador con la antigüedad que se informó el pasado junio, al poner la primera calcita en casi 41.000 años. Nerviosos por dañar el pigmento, el equipo dejó varios milímetros de la capa intacta en cada punto del muestreo. Capas más profundas, de mayor antigüedad, podrían retrasar la edad mínima de las pinturas en varios miles de años.
Esta perspectiva llevó al equipo de vuelta a la cueva de El Castillo en octubre pasado. Puliendo y raspando a través de un largo día, los investigadores se concentran en los discos rojos y en las plantillas de manos que habían proporcionado las primeras dataciones la última vez. El objetivo, dice Zilhão, es "datar pigmentos en estas pinturas con una antigüedad que sea clara y satisfactoria para todos, que esté más allá del alcance de los humanos modernos cuando llegaron a Europa".
Sin embargo, una fecha temprana podría no resolver este conflicto de larga duración. Hublin pone el listón alto. "Si Zilhão encuentra una datación anterior a hace 50.000 años yo estaré convencido", dice. Cualquier influencia humana más joven y moderna seguiría siendo una posibilidad, dice, al señalar indicios recientes de que nuestros antepasados ya habían avanzado hacia Turquía o, incluso Europa central, hace 50.000 años. Y un ejemplo de pintura elemental -Dibble lo llama un "garabato neandertal" - podría no ser suficiente para ganarse a los escépticos. El pretendido "golpe de noqueo" de Zilhão simplemente puede conducir a más enfrentamientos.
No obstante, están surgiendo señales de un término medio. Chris Stringer (izquierda), paleontólogo del Museo de Historia Natural de Londres, dice que hace 20 años él creía que si los neandertales habían hecho los adornos Chatelperronienses, es porque estaban imitando ciegamente a los humanos modernos. "Nuestra interpretación suponñia que ellos copiaban, pero no tenían la capacidad intelectual para darles un valor pleno a los objetos". Él no diría lo mismo ahora. Dos décadas de descubrimientos de sofisticadas herramientas y armas neandertales le han hecho pensar que "el abismo no era tan grande": la diferencia entre los neandertales y nosotros mismos es más una cuestión de cultura que de capacidad.
"Se puede ver que los neandertales fueron frenados por varios factores que no estaban su cerebro", agrega. El clima de la Edad del Hielo en Europa mantuvo el tamaño de su población en una condición "terriblemente pequeña", dice. En ocasiones sólo hubo unos pocos miles de ellos a través de todo el continente, y la mayoría moriría a la edad de 30 años. ¿Cómo es posible que un pueblo tan disperso y atribulado podía haber desarrollado y mantener una cultura sofisticada?
Eso no es tan diferente de lo que d'Errico, compañero de armas de Zilhão durante casi 20 años, dice ahora. Él todavía cree que los neandertales probablemente inventaron los artefactos Chatelperronienses antes de que los humanos modernos entraran en escena. Pero él está abierto a la idea de que aspectos de la cultura humana moderna precedieron a su llegada generalizada a Europa. "Es posible que alguna influencia sí se extendió", dice d'Errico. "Estoy menos militante de João". Pero eso no quita nada a los neandertales, añade. "El hecho de que los neandertales pudieran haber absorbido influencias, que pudieran volver a elaborarlas, y que fueran capaces de hacerlas parte de su propia cultura, es un comportamiento muy moderno".
Pero hay un último tramo de tierra en el que ninguna de las partes cederá. ¿Eran los neandertales realmente lo mismo que nosotros, cognitivamente hablando? No, dice Stringer. El genoma neandertal decodificado en 2010 difiere del de los humanos modernos en algunas regiones vinculadas a funciones del cerebro, señala. Y este año, él sugirió que, en comparación con los humanos modernos, los grandes volúmenes de los cerebros neandertales estaban dedicados más a la visión y al control de sus cuerpos más pesados. Eso podría haberlos dejado con menor capacidad para la interacción y la conciencia social. "Si usted se imagina a un neandertal en la sociedad moderna, todavía habría diferencias", dijo Stringer.
Zilhão rechaza cualquier distinción. Al salir de la cueva en una tarde lluviosa, él reflexiona que si se empuja hacia atrás la antigüedad de las pinturas de la cueva de El Castillo, sus críticos pueden argumentar que simplemente ha demostrado que hubo una presencia temprana de los humanos modernos en Europa. "A lo cual, yo diré: por supuesto, los neandertales también fueron seres humanos modernos'".
Posts de Terrae Antiqvae relacionados:
* Humanos modernos y neandertales alcanzaron idéntico desarrollo cu... (12/01/2010)
* Una investigación pone en duda la capacidad simbólica de los neande... (27/10/2010)
* Los neandertales fueron los primeros en diseñar herramientas con hu... (17/12/2010)
* Los "sapiens" llegaron a Europa occidental hace 45.000 años (02/11/2011)
* Los neandertales usaban ocre rojo hace 250.000 años, antes de lo ... (24/01/2012)
* Sudáfrica: las raíces culturales de la evolución humana (19/02/2012)
* ¿Pintaron los neandertales Altamira? (14/06/2012)
* Los neandertales aprendieron a hacer nuevas armas y adornos al imit... (30/10/2012)
* El arqueólogo que descubrió el primer arte 'sapiens', Nicholas Cona... (27/02/2013)
Bienvenido a
Arqueologia, Historia Antigua y Medieval - Terrae Antiqvae
Terrae Antiqvae es una Red Social sin ánimo de lucro. Necesitamos tu apoyo para el mantenimiento del sitio. Apadrina esta Comunidad
Derechos de Autor:
Terrae Antiqvae® is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Información legal: Terrae Antiqvae® es Marca registrada por José Luis Santos Fernández. Marca nº 2.679.154 - Clase 41, Madrid, España. Reservados todos los Derechos. En Internet desde Julio de 2001.
Normas de la Comunidad (Aviso Legal): Netiqueta - Términos de servicio
© 2024 Creado por José Luis Santos Fernández. Tecnología de
¡Necesitas ser un miembro de Arqueologia, Historia Antigua y Medieval - Terrae Antiqvae para añadir comentarios!
Participar en Arqueologia, Historia Antigua y Medieval - Terrae Antiqvae