Vía: Science | Michael Balte | 18 de octubre de 2010 (Traducción: G.C.C para Terrae Antiqvae)

A los neandertales les están mirando de un modo muy marcado estos días. Muchos investigadores han acreditado hasta ahora que nuestros primos evolutivos, anteriormente considerados como brutos y estúpidos, tenían un "comportamiento moderno", fabricaban herramientas sofisticadas y configuraban ornamentos como un signo de expresión simbólica.

Pero nuevas dataciones mediante radiocarbono (carbono-14) en un yacimiento de Francia podrían afectar a este punto de vista halagador. El estudio concluye que las capas arqueológicas en tal yacimiento están tan mezcladas que adornos y herramientas, hasta ahora atribuidas a los neandertales, en realidad podrían ser fruto del trabajo de los humanos modernos, los cuales vivieron en la misma cueva en una fecha posterior.


Un prominente investigador sostiene incluso que este célebre yacimiento, la Grotte du Renne (literalmente "Cueva de los Renos"), en Arcy-sur-Cure, centro de Francia, debería ahora ser eliminado de su consideración científica. "Este yacimiento clave debe ser descalificado del debate sobre el simbolismo (neandertal)", ha dicho Randall White (izquierda), arqueólogo de la Universidad de Nueva York.



Pero Joao Zilhao (derecha), un arqueólogo de la Universidad de Bristol, en el Reino Unido, que a menudo se peleó con White y otros investigadores sobre la evidencia de la Grotte du Renne, sostiene que el nuevo estudio "prueba exactamente lo contrario de lo que sus autores pretenden".


La Grotte du Renne fue excavada entre 1949 y 1963 por el fallecido prehistoriador francés André Leroi-Gourhan, quien encontró 15 niveles de ocupación de homínidos con un intervalo aproximado de entre 45.000 a 28.000 años. Este período incluye la coincidencia de la ocupación de Europa por los neandertales, quienes aparecen hace unos 130.000 años y desaparecen, a más tardar, hace 30.000 años, y los humanos modernos, que llegaron a Europa hace entre 45.000 y 40.000 años y se quedaron para siempre.

Leroi-Gourhan atribuía los artefactos de los niveles más bajos a los neandertales y los artefactos de los niveles superiores a los humanos modernos, basándose, en gran medida, en los tipos de herramientas que ellos habían hecho. Sin embargo, las capas medias del yacimiento incluyen instrumentos de hueso, adornos de marfil, y otros artefactos sofisticados, que Leroi-Gourhan atribuía a la cultura llamada Chatelperroniense. Aunque los artefactos del Chatelperroniense se parecen bastante a los realizados por los humanos modernos, muchos investigadores los han atribuido a los neandertales, ya que a veces se han encontrado asociados con fósiles de neandertal. De hecho, en la Grotte du Renne, Leroi-Gourhan se encontró alrededor de 30 dientes de neandertal en los niveles del Chatelperroniense, los cuales se pueden distinguir de los dientes humanos modernos en función del tamaño y forma de sus cúspides, así como otras características.

La mayoría de los debates sobre el Chatelperroniense, el cual comienza hace unos 40.000 años, han girado en torno a si los neandertales lo inventaron o simplemente lo copiaron del comportamiento de los humanos modernos. De este modo, recientemente algunos investigadores han empezado a cuestionar si los neandertales hicieron el Chatelperroniense completamente.

En el nuevo estudio, publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), un equipo dirigido por Thomas Higham (izquierda), de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, informa de 31 nuevas dataciones por radiocarbono de la Grotte du Renne, utilizando nuevos métodos de filtración para purificar las muestras de radiocarbono y eliminar la contaminación por fuentes de carbono moderno, las cuales hace tiempo han disvirtuado las dataciones precisas.

Las fechas, obtenidas en materiales tales como instrumentos de hueso y adornos de dientes de animales, pintaron un panorama inquietante: mientras que las capas superiores se atribuyen a los humanos modernos, en un registro que no va más allá de 35.000 años, los artefactos de los niveles Chatelperroniense se registran desde hace 21.000 años, cuando los neandertales ya estaban extintos, hasta hace 49.000 años, antes de que el Chatelperroniense comenzara realmente a existir. De hecho, Higham y sus colegas encontraron que al menos un tercio de las fechas del Chatelperroniense se encontraban fuera del período de tiempo conocido para esta cultura.

El equipo concluye que los niveles arqueológicos pudieron haberse mezclado a lo largo de miles de años y que los artefactos más jóvenes, realizados por el hombre moderno, pudieron haberse movido hacia abajo, hacia los niveles que durante mucho tiempo se creyó asociados con los neandertales. "La evidencia de la Grotte du Renne debe ser vista con extrema precaución", escriben los autores.

Los mismos no especulan sobre si las capas se mezclaron a través de procesos de sedimentación natural o errores de excavación, lo que provocó que algunos artefactos se asignaran a niveles de ocupación equivocados.

White dice que los resultados no deben sorprender, porque las excavaciones de Leroi-Gourhan tuvieron lugar "en un momento en que las técnicas de excavación, en general, eran rudimentarias". Añade que sólo en otro yacimiento Chatelperroniense se han producido ornamentos de uso personal, en un número mucho más pequeño, lo que significa que la pretensión de que los neandertales eran capaces de una expresión simbólica semejante (a los humanos modernos), pierde fuerza ante la evidencia de la Grotte du Renne. No obstante, Zilhao contrapone que dos tercios de las dataciones son consistentes con el hecho de que los neandertales hicieron el Chatelperroniense. El resto, es decir, las dataciones extremas, podrían ser resultado de la contaminación, en lugar de la mezcla de objetos entre capas, argumenta.

Sin embargo, Higham, quien ha estado datando en Europa alrededor de otros 20 yacimientos de neandertales y humanos modernos, dice que la Grotte du Renne es única en producir semejante variación de dataciones. "Creo que esto nos está diciendo algo", responde Higham. "Este sitio tiene algunos problemas".

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Bueno, como podemos ver, los datos que se aportan son bastantes explícitos sobre este debatido yacimiento en relación con la capacidad simbólica de los neandertales.

Es evidente que los resultados de las dataciones no favorecen nada a los neandertales en este sentido, al ser la Grotte du Renne uno de los yacimientos emblemáticos sobre dicha capacidad. La verdad es que todo yacimiento que muestre artefactos u ornamentos de posibles neandertales que estén muy cerca del horizonte temporal en que aparecieron los Homo sapiens en Europa corre el riesgo de que cómo mínimo se aduzca que pueden ser fruto de la imitación de aquéllos por éstos.

No obstante, hay que decir que, a diferencia de lo que se expone en el texto del post, sí existen algunos otros yacimientos (más de uno) neandertales que sirven para sostener que pudieron ostentar tal capacidad. Me refiero, sobre todo, al reciente hallazgo de las conchas marinas perforadas y pintadas, usadas como elementos de collar, y preparaciones cosméticas a base de pigmentos amarillos, rojos y negros, halladas en la Cueva de los Aviones (Murcia), y del que nos hicimos eco en este post. Tras dicho hallazgo, sus investigadores aseguraban lo siguiente:

"... el estudio aporta datos seguros de que hace alrededor de 50.000 años, el comportamiento y la cognición de los neandertales eran tan avanzados como el de las poblaciones modernas que entonces evolucionaban paralelamente en África".

Y todo ello con independencia de las salvedades que ha apuntado el profesor Joao Zilhao, sobre el cual puede leerse, dentro de este contexto polémico, el siguiente trabajo:

* "MODERNOS Y NEANDERTALES EN LA TRANSICIÓN DEL PALEOLÍTICO MEDIO AL SUPERIOR EN EUROPA"


* También es muy oportuno y completo el post "Viejas joyas. Simbolismos y adornos personales entre los `homínido..., en el blog de Millán Mozota "El neandertal tonto, ¡qué timo!"

* Y como complemento, del mismo Millán Mozota, "Los colgantes y punzones de la "Grotte du Renne (Arcy-sur-Cure)"