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David L. Redd, autor del estudio, delante de la exposición "La Florida del noroeste: navegación y vida salvaje" en el Museo de Historia Natural de Florida. La ropa holgada usada por los nativos americanos, y que se muestra en la exposición, es similar a las vestimentas con piojos que habrían usado los humanos modernos hace unos 170.000 años. (Foto por Jeff Gage, Florida Museum of Natural History)
Vía: University of Florida News| 6 de enero de 2011 (Traducción de G.C.C. para Terrae Antiqvae )
Un nuevo estudio de la "University of Florida" sobre la evolución de los piojos muestra que los humanos modernos comenzaron a usar ropa hace unos 170.000 años, una tecnología que les permitió migrar con éxito fuera de África.
El investigador principal, David L. Redd, conservador asociado al estudio de los mamíferos en el "Florida Museum of Natural History", correspondiente al campus de la "University of Florida", ha estudiado los piojos en los humanos modernos para comprender mejor la evolución humana y sus patrones de migración. En su último estudio de cinco años utilizó la secuenciación del ADN para calcular cuándo los piojos de la ropa comenzaron a divergir genéticamente de los piojos de la cabeza humana.
Financiado por la "National Science Foundation", el estudio está disponible en línea y aparece en la edición impresa de este mes de "Molecular Biology and Evolutión".
"Queríamos encontrar otro método para establecer claramente cuándo los seres humanos pudieron comenzar a usar ropa por primera vez", dijo Reed. "Debido a que están tan bien adaptados a la ropa, sabemos que los piojos del cuerpo o de la ropa casi seguro no existían hasta que la misma no fue elaborada por los seres humanos".
Los datos muestran que los humanos modernos comenzaron a usar ropa hace unos 70.000 años, antes de emigrar a climas más fríos y latitudes más altas, lo cual se inició hace aproximadamente 100.000 años. Esta fecha era prácticamente imposible de determinar a partir de los datos arqueológicos, dado que las primeras ropas usadas no sobreviven en los yacimientos arqueológicos.
El estudio también muestra que los seres humanos comenzaron a usar ropa después de haber perdido el pelo del cuerpo hace un millón de años, según señala la investigación genética de la coloración de la piel, lo que significa que los seres humanos estuvieron una considerable cantidad de tiempo sin pelo en el cuerpo y sin ropa, dijo Reed.
El investigador David L. Redd en el laboratorio (Foto de vídeo).
"Es interesante pensar que los seres humanos fueron capaces de sobrevivir en África cientos de miles de años sin vestimentas y sin pelo en el cuerpo, y no fue hasta que ellos tuvieron vestimentas cuando entonces pudieron plantearse salir fuera de África e ir a otras partes del mundo", subrayó Reed.
Los piojos son estudiados porque, a diferencia de la mayoría de otros parásitos, están atrapados en linajes hospedados durante largos períodos de tiempo evolutivo. La relación permite a los científicos saber acerca de los cambios evolutivos en el huésped basándose en los cambios del parásito.
La aplicación única de conjuntos de datos provenientes de los piojos de la evolución humana sólo se ha desarrollado en los últimos 20 años, y proporciona información que puede ser utilizada en la medicina, la biología evolutiva, la ecología o en cualquier número de campos, precisó Reed.
"Proporciona la oportunidad de estudiar cómo ocurre el cambio de hospedaje e invasión de nuevos huéspedes, es decir, observar el comportamiento de enfermedades infecciosas emergentes que afectan a los seres humanos", dijo Reed.
Un estudio de los piojos de la ropa del año 2003, dirigido por Mark Stoneking (izquierda), un genetista del Max Planck Institute, en Leipzig, Alemania, calcula que los primeros seres humanos comenzaron a usar ropa de hace unos 107.000 años. Pero la investigación de la University of Florida incluye nuevos datos y métodos de cálculo más adecuados para responder a esta cuestión.
"El nuevo resultado de este estudio sobre los piojos proporciona, inesperadamente, una fecha muy temprana para la ropa, mucho mayor que las primeras evidencias sólidas arqueológicas, pero ello tiene sentido", dijo Ian Gilligan (derecha), profesor de la School of Archaeology and Anthropology de la Australian National University". "Esto significa que los humanos modernos probablemente comenzaron a usar ropa de forma regular, con el fin de mantener el calor, cuando estuvieron expuestos por primera vez a la era glacial".
La última glaciación ocurrió hace unos 120.000 años, pero la fecha del estudio sugiere que los humanos comenzaron a llevar ropa en la glaciación anterior, hace 180.000 años, según los estudios sobre la temperatura estimada en núcleos del hielo, argumentó Gilligan. Los seres humanos modernos aparecieron por primera vez hace aproximadamente 200.000 años.
Debido a que los homínidos arcaicos no dejaron descendientes de los piojos de la ropa para el muestreo, el estudio no explora la posibilidad de que los homínidos arcaicos de fuera de África estuvieran vestidos de alguna manera hace 800.000 años. Pero mientras que los humanos arcaicos fueron capaces de sobrevivir durante una gran cantidad de generaciones fuera de áfrica, sólo los humanos modernos continuaron hasta el presente.
"Las cosas que pudieron habernos dado mucho más éxito en tal esfuerzo, cientos de miles de años más tarde, fueron las tecnologías como el uso controlado del fuego, la capacidad de utilizar la ropa, las nuevas estrategias de caza y las nuevas herramientas de piedra", finaliza Reed.
Coautores del estudio han sido Melissa Toups, de la Indiana University, y Andrew Kitchen, de The Pennsylvania State University, ambos de la University of Florida. La coautora Jessica Light, de la Texas A & M University, fue anteriormente compañera post-doctoral en el Florida Museum. Los investigadores completaron el proyecto con la ayuda del Reed’s NSF Faculty Early Career Development Award, que concede a los investigadores que ejemplifican el papel del profesor-investigador.
Jamundi ,enero 29 de 2011
FELICITACIONES,POR ESTA EXTRAORDINARIA E IMPORTANTE INVESTIGACION.
QUISIERA SABER:¿SI,ESTA DE ALGUNA MANERA, DETERMINADO HIPOTETICAMENTE AL MENOS SI DICHO USO DE VESTIMENTA,PUDO DARSE EN AFRICA O CHINA;EN RAZON QUE EL PRIMERO ES EL CONTINENTE DEL ORIGEN DEL HOMBRE Y EL SEGUNDO EL DE LOS INVENTOS?
Sr. Quintana:
No quedan restos de ropa que hayan usado los homínidos arcaicos en África, así que sólo cabe plantear el supuesto de que así fue. En cualquier caso, por inferencia del estudio en cuestión, podemos plantear la posibilidad de que es muy probable que la usaran paralelamente a las dataciones que se ofrecen.
Fuente: Live Science | Wynne Parry | 7 de noviembre de 2013
Foto: Huevo de un piojo de la cabeza
Las claves de la evolución humana generalmente provienen de los fósiles de nuestros ancestros y del rastro molecular codificado en el genoma humano, ya que se ha ido perfilando a través de generaciones. Sin embargo, algunos investigadores están buscando otra fuentes, tal como el piojo que chupa sangre.
Los piojos han estado estrechamente asociados a los seres humanos durante miles de años; a pesar de los intentos humanos para deshacerse de los parásitos, su persistencia les ha hecho ser un potencial depósito de información para aquellos que quieran saber más acerca de la evolución humana y de la historia, dijo David Reed, conservador de la sección de mamíferos en el Museo de Historia Natural de Florida, el pasado domingo (3 de noviembre) en una conferencia patrocinada por la Asociación Nacional de Escritores Científicos.
"Cuando fuimos pasando a través de nuestra historia evolutiva, no lo hicimos solos, nos llevamos con nosotros un montón de pasajeros", dijo Reed.
Los rastros de estos "autoestopistas" chupadores de sangre, por ejemplo, sugieren que los humanos modernos se entremezclaron con los neandertales (una teoría apoyada también por otras investigaciones genéticas) y que los seres humanos pudieron haberse puesto vestimentas antes de salir de África.
Pasajeros parásitos con una historia
Como miembros de la familia en un mismo viaje, estos pasajeros -también conocidos como parásitos, incluyendo a los piojos- pueden ofrecer diferentes versiones de la aventura y llenar los vacíos que otros relatos proporcionan, dijo Reed. Él y sus colegas han estado buscando los genomas de los piojos para obtener precisamente eso.
Los piojos, los cuales infectan a muchos animales, son excelentes rastreadores de la evolución de sus anfitriones. Pasan toda su vida en su huésped, perecen después de un período relativamente corto de tiempo si se caen, e infestan a una sola especie anfitriona, dijo Reed.
Los humanos son inusuales entre los piojos huéspedes; no obstante, ellos proporcionan un hogar a más de una especie de piojos. El piojo púbico es bastante diferente a sus homólogos del cabello y la ropa. A través del análisis genético, Reed y sus colegas determinaron que hace más de 3 millones de años, el piojo púbico humano era originario de los piojos de los gorilas, donde se adaptó para agarrarse al pelo largo y poder propagarse más lejos. Este hallazgo significa que los seres humanos y los gorilas debieron haber vivido muy próximos durante este período de tiempo. La información es importante, porque fósiles de gorilas de este momento son prácticamente inexistentes, afirma Reed.
Reed y sus colegas también han estudiado la separación entre los piojos de la cabeza y los de la ropa en busca de pistas acerca de cuándo los humanos comenzaron a usar vestimentas. Encontraron que los piojos de la ropa divergieron de los piojos de la cabeza hace entre 170.000 y 80.000 años, más probablemente al final antes de este rango.
Esto significa que los seres humanos estuvieron probablemente practicando con el uso de la ropa antes de salir de África, dijo Reed.
¿Un registro de antepasados desaparecidos hace tiempo?
Los genomas de los piojos también pueden revelar información acerca de las interacciones entre nuestros antepasados desaparecidos hace tiempo y los humanos modernos.
Los investigadores han identificado tres linajes principales, denominados clados A, B y C, dentro del ADN de la mitocondria -centro de producción de energía de las células- de piojos recogidos en diversos sitios de todo el mundo. Al emplear variaciones en el ADN para mirar hacia atrás en el tiempo, los investigadores observaron que estos grupos o clados tuvieron un ancestro común hace unos 2 millones de años. El clado C se separó entonces del grupo, y mucho más tarde, hace entre 1.000.000 y 700.000 años, el clado B se separó del clado A.
El calendario de estas divisiones y la moderna distribución geográfica de estos clados han llevado a los investigadores a sugerir que el clado C evolucionó en el Homo erectus cuando este homínido surgió, y que el clado B evolucionó en los neandertales .
Pero estos tres linajes del piojo no se quedaron al margen. Alguna interacción, tal como cazar juntos, provocó que los antiguos seres humanos, al estar suficientemente cerca de otros ancestros infestados de piojos, captaran los tres linajes y fueran transportados por ellos, sugieren Reed y sus colegas.
Los investigadores continúan trabajando para comprender mejor las historias codificadas en el ADN de los piojos. Con la advertencia de que el trabajo aún no ha sido examinado en el proceso de revisión por pares, Reed dijo que las simulaciones por ordenador de la evolución genética de los piojos apoyan esta historia. Mientras tanto, las secuencias del genoma completo del piojo en clados A y B indican que los dos se cruzaron, hibridaron. (El clado C es mucho más raro, y las muestras de los investigadores resultan ser demasiado degradadas en la secuencia).
El laboratorio de Reed también aplica la genómica del piojo a estudiar cómo los seres humanos llegaron a las Américas.
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