El mes de septiembre de 2022 marcará un hito para la ciencia en la Región de Murcia, en la península ibérica y a nivel mundial. En ello coinciden los investigadores, liderados por Ignacio Martín Lerma, profesor de Prehistoria de la Universidad de Murcia (UMU), y Didac Román, de la Universitat Jaume I de Castellón, los cuales trabajan en el yacimiento arqueológico de la Cueva del Arco, en el Cañón de Almadenes de Cieza.

Con la emoción contenida desde hace meses y «agarrada a la garganta», reconoció Martín Lerma, este viernes hicieron público en la Filmoteca Regional de Murcia el excepcional hallazgo: «Una enorme cavidad, una de las cinco más grandes de la región; y solo hemos accedido adonde nos ha llevado la cueva», explicaba el presidente del Grupo de Espeleología Ciezano Atalaya (Geca), Pedro Ríos, que colabora en la exploración de la nueva cavidad; «una cueva de volúmenes nada habituales, con grandes salas de casi 20 metros de altura y hasta 8 metros de diámetro», describía Ríos.

Foto: El arqueólogo Martín Lerma abriéndose paso en las entrañas de la Cueva del Arco.

«Un gran descubrimiento que mantiene a salvo secretos biológicos, geológicos, paleontológicos, paleoclimáticos y antropológicos singulares y excepcionales», explicó Didac Román. Una cápsula del tiempo prehistórica sellada desde hace decenas de miles de años y que apareció bajo los sedimentos paleolíticos de una de las cavidades -la D- del conjunto arqueológico de la Cueva del Arco, que el equipo de investigadores cribaba, estudiaba y analizaba desde 2015.

«Aparecieron unos bloques de roca desprendidos», cuenta Ignacio Martín Lerma, y cuando eso sucedió, en 2018, confiaban en que bajo ellos podía aparecer una nueva cavidad en la que seguir ampliando el conocimiento de este sitio, que además de arte rupestre paleolítico -una de las pocas manifestaciones de esta época del Levante peninsular y la única pintura mural de la región-, ha permitido hallar desde la primera campaña herramientas que documentan el periodo de transición de los neandertales a los humanos modernos.

Una corriente de aire les confirmaba su presencia -«el aire siempre viene bien, porque es vida», contaba aliviado Martín Lerma-, pero, por seguridad, debieron esperar, pandemia de por medio, hasta enero de 2022 para que el conjunto arqueológico del Arco estuviera protegido.

La espera mereció la pena. «La desobstrucción se realizó y se accedió por primera vez en septiembre pasado, un fin de semana inolvidable, y lo que encontramos superó con creces todas nuestras expectativas. Ante nosotros se abrió una nueva e inmensa cavidad con un recorrido de más de un kilómetro, con decenas de salas con unas bóvedas enormes», detalla el investigador de la UMU, que reconoce que el monumental hallazgo «nos ha abierto una nueva puerta a la Prehistoria, cerrada miles de años, una cavidad intacta», insiste.

José María Calaforra, catedrático de Geodinámica Externa de la Universidad de Almería, incorporado al equipo de investigación del yacimiento de la Cueva del Arco, define el nuevo descubrimiento como «de crucial importancia científica». De hecho, explica que, en un primer vistazo, ha permitido identificar zarpazos de osos cavernarios en multitud de paredes que hacen de esta cavidad «un gran ejemplo de morada de estos grandes mamíferos al sur de Europa, algo realmente único», apuntan Didac Román y Martín Lerma. Y señalan que hasta ahora se daba por seguro que estos osos no habían pasado de la mitad norte de la Península. Y confían en que, entre otros hallazgos paleontológicos, «el oso cavernario esté dentro».

Además, detalla Calaforra, en esta primera fase del estudio se han podido descubrir minerales poco habituales y, posiblemente, alguno de ellos nuevo para la ciencia. Además de impresionantes espeleotemas como 'fistulosas' -estalactita hueca con forma de tubos y de diámetro pequeño- de hasta tres metros de longitud, algo poco habitual, y 'gours' -diques desarrollados sobre una pendiente por la que circula un flujo de agua activo- que se deben, aclaran, «a la estabilidad de las condiciones en que se ha desarrollado la cueva durante milenios».

Este hallazgo, de importancia crucial, abre una ventana a la Prehistoria, ya que hace miles, quizá decenas o cientos de miles de años que ningún homínido accede a su interior, por lo que las oportunidades científicas, tanto geológicas, como paleontológicas, antropológicas, biológicas y paleoclimáticas que se presentan resultan inmensas. «Qué suerte tiene Murcia y los murcianos por este increíble descubrimiento: una especie de laboratorio para investigar que está intacto», afirmó Calaforra. A nivel paleontológico, con la constatación de la presencia de osos cavernarios más al sur de Europa conocida hasta la fecha, «la Cueva del Arco ya ha hecho historia».

También citó las inmensas posibilidades a nivel geoespeleológico por los espeleotemas desarrollados en el interior sin alteración durante miles de años; en bioespeleología, el aislamiento de estas grutas subterráneas «permite que se haya creado una filogenia de especies nuevas para la ciencia y endémicas». Además, abunda Calaforra, la presencia de murcielaguina en el interior y no de murciélagos es una muestra de que la cavidad estuvo abierta durante determinados periodos.

Y también destacó la importancia trascendental que puede tener el hallazgo para la investigación climática, ya que «permitirá reconstruir el paleoambiente en un espacio que no ha sufrido interacciones del exterior, lo que nos ayudará a entender qué pasó aquí hace miles de años».

Zarpazos de oso en la Cueva del Arco en Cieza. / FRAN RAMÍREZ.

Aunque, insisten, acaban de concluir la fase preliminar de exploración de la impresionante gruta, Didac Román admitió que ya «hemos encontrado indicios de actividad humana en la cueva».

Precisamente el potencial de esta cápsula del tiempo intacta desde hace miles, quizás decenas o centenas de miles de años, impele a los investigadores a trabajar con las máximas precauciones para evitar contaminar el 'laboratorio' que se abre a la ciencia. Así, todos ellos insistieron en pedir a los responsables políticos presentes que ahora se abre «una primera fase de protección absoluta» para preservar este tesoro natural y los secretos sobre el pasado remoto que encierra, y de investigación, para la que reclamaron de las autoridades autonómicas, locales y universitarias las inversiones suficientes para que se empiece a conocer desde el punto de vista científico. De hecho, explicaron que la exploración de la cavidad se ha realizado balizando el itinerario para alterarlo lo mínimo posible en estrecha colaboración con el grupo de espeleología ciezano La Atalaya Geca.

En la presentación oficial del sorprendente descubrimiento, estuvieron presentes, además del equipo investigador, la vicerrectora de Estudios de la Universidad de Murcia, Sonia Madrid, que destacó la importancia de apoyar la investigación desde las instituciones: «La Universidad de Murcia apoya incondicionalmente a sus investigadores, como Martín Lerma, que generan conocimiento con sus trabajos, alimentando el espacio científico y conectando con la sociedad a través de la pieza esencial del conocimiento: la divulgación».

La vicerrectora de Estudios de la Universidad de Murcia, Sonia Madrid, y el profesor Ignacio Martín Lerma (2d), junto al resto de investigadores que han participado en el hallazgo de la cavidad 'D'. UMU

También asistió el alcalde de Cieza, Pascual Lucas, que llamó la atención sobre «el potencial del hallazgo para poner en valor el tesoro natural, histórico y patrimonial del Cañón de Almadenes y la Región de Murcia en su conjunto. Cieza es territorio neandertal y de su estudio no solo se beneficiará la arqueología regional, también la humanidad al completo».

Y tampoco faltaron representantes del Gobierno regional, como la portavoz del PP, Miriam Guardiola, el director general de Patrimonio Cultural, Pablo Braquehais, y el consejero de Presidencia, Turismo, Cultura y Deportes, Marcos Ortuño, que abrió el acto incidiendo en que  «este descubrimiento vuelve a situar a la Región de Murcia en el mapa más actualizado de la Prehistoria» y que se * comprometió ante la insistencia de asistentes a la presentación a apoyar económicamente la investigación en este enclave de relevancia internacional y trascendencia global.

Fuentes: laverdad.es | elespanol.com | 4 de febrero de 2023

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