Red social de Arqueologos e Historiadores
Fuente: noticanarias.com | 30 de junio de 2015
Una película de muy bajo coste (apenas supera los 10.000 €), encargada por el Ayuntamiento de Fuencaliente de La Palma a la Asociación Isla Futuro para el Desarrollo Comunitario, presenta un asombroso resultado de su propia investigación histórica: una nueva teoría de quienes eran los Guanches, cuándo llegaron y cómo lo hicieron, con aparentemente sólidas pruebas científicas que han sido enviadas a la Universidad de La Laguna para su refutación.
Si ya el Halogrupo de AND U6b1, mutación genética característica de los aborígenes Guanches, situaba la posible antigüedad de los pobladores canarios hasta los 8.000 años, la teoría Climent demuestra la existencia de una puerta histórica-Geológica aún más antigua, a finales del Pleistoceno entre los 11.500 y 12.500 años de antigüedad.
Esta nueva teoría formulada por el investigador y creativo palmero D. Martín Climent, el cual colabora con la asociación realizadora de la mencionada película, afirma que los Guanches, como se denominan genéricamente a los aborígenes Canarios, eran gentes del neolítico pertenecientes a la cultura Capsiense y que estos no descienden de los Amazight o Bereberes sino que es al contrario, que llegaron procedentes del Creciente Fértil (Levante Mediterráneo, Mesopotamia y Persia), la cuna del Neolítico, y varios miles de años mas tarde de las primeras civilizaciones Mediterráneas. Está demostrado que los Capsienses de cultura neolítica, procedentes del Creciente Fértil se establecieron en el Noroeste Africano, especialmente en el Sahara Occidental con dataciones superiores a 10.000 años y por lo tanto anteriores y antepasados de los Bereberes o Amazights.
La cultura Guanche era neolítica, una cultura de hace 12.000 años, al igual que los Capsienses, y, lo que es más, su ganado -cabras, ovejas y cerdos-, así como sus semillas -trigo, cebada y habas-, también son del mismo origen, del Creciente Fértil, al igual que la domesticación canina. Solo esta cultura Capsiense, de las más avanzadas de la época, se encontraba con posibilidades de aprovechar el momento histórico propicio para la conquista de Canarias. Pero al igual que los Guanches, los Capsienses del Neolítico no conocían el arte de la navegación.
Sabemos que Las Islas Canarias son de origen volcánico y que emergieron desde la llanura Atlántica, por lo que nunca han estado unidas al continente africano, esto es lo que ha suscitado la mayor incógnita de Canarias, ¿cómo fue posible la colonización de Canarias por gentes que no conocían la navegación? Este misterio parece por fin haber sido resuelto.
La teoría Climent, además de afirmar que eran personas del Neolítico pertenecientes a la cultura Capsiense y provenientes del Levante Mediterráneo, afirma que llegaron y colonizaron toda Canarias por sí solos, sin ayuda de ninguna otra cultura, por haber encontrado una puerta temporal que lo posibilitó.
Hace 12.000 años, el Sahara no era un desierto como lo conocemos hoy, era un territorio lleno de vida, llanuras verdes donde habitaban jirafas, elefantes, leones, tigres, cebras, etc., todos los animales que hoy habitan en el África meridional más algunos ya extintos, aunque había empezado ya una pertinaz sequía.
Este habitat rico en fauna salvaje y muchos depredadores, era también rico en culturas nómadas cazadoras y recolectoras pertenecientes a grupos tribales aún en el paleolítico. Este habitat no era favorable para una cultura neolítica que tenia rebaños y sembraba la tierra, pues frecuentemente tenían que luchar contra depredadores, humanos o manadas de animales que pisoteaban sus sembrados.
Geológicamente hablando, la última era glacial terminó hace unos 13.000 años, en ese momento el mar tenía unos 120 metros menos de nivel con respecto a la actualidad, los polos llegaban casi hasta el norte de España, y tanto Europa como América del Norte estaban cubiertas por un manto de hielo que pudo superar los dos kilómetros de espesor.
Hace 13.000 años termina la última glaciación con el inicio de un período de fuerte calentamiento, todo ese hielo comenzó a derretirse creando inmensas inundaciones. Unos 500 años más tarde, por el fuerte deshielo y la presión ejercida por la subida del mar, inmensos y numerosísimos icebergs se desprendieron del Ártico y se desplazaron hacia el sur bloqueando la corriente del golfo. Este hecho trastocó el clima de tal forma que se generó un corto pero potentísimo enfriamiento climático que se conoce con el nombre de Jounger Dryas o Dryas Reciente, un periodo de algo más de mil años con veranos relativamente frescos e inviernos extremadamente fríos, entre hace 12.500 y 11.500 años aproximadamente, el cual tuvo efectos cruciales en la historia de la humanidad.
A Canarias hoy en día le afecta una corriente termoalina submarina rica en plancton que efluye entre Canarias y el Sáhara, y que es la responsable de la existencia del Banco Canario Sahariano de Pesca. Esta corriente se forma por el parcial hundimiento de la corriente cálida y salina del Golfo de México en su dirección al Norte de Europa. Lo que ocurrió hace 12.500 años es que, al bloquearse la corriente del Golfo precipitadamente por la existencia de numerosísimos icebergs, aumentó la corriente termoalina submarina que afecta a Canarias, la cual pasó de afectar a la franja entre Canarias y el Sáhara como lo hace hoy en día a abarcar a toda Canarias, por lo que en esa época tuvo que ser inmensamente rica en fauna marina.
Esa corriente submarina era muy fría. En superficie circulaba y circula otra corriente que va de norte a sur, con la diferencia de que, al estar bloqueada la corriente del golfo, esta no comenzaba en el norte de Portugal como lo hace hoy día, sino mucho más al norte, desde la zona glacial; de hecho, existen evidencias del paso de icebergs por las costas de Portugal, por lo tanto el agua era muy fría. Esta corriente de superficie, que además era poco salina, a su paso por Canarias se encontraba con la corriente submarina también muy fría pero muy salina, lo que producía un efecto de disolución entre sus capas límite de carácter endotérmico, o sea, se enfriaba aún más.
Por otro lado influían los vientos alisios que se desplazan desde el noreste, y que también eran muy fríos, gélidos; en invierno era tan baja su temperatura y tan alta su actividad que existen evidencias científicas de su gran influencia, la cual afectó incluso al sur del Caribe.
En consecuencia a lo expuesto, Canarias tenía un clima fresco en verano y un invierno muy frio, gélido, la acción de las corrientes y los alisios hacían que el mar, que además era poco salino y por lo tanto más proclive, se congelase varios meses al año.
Enfrente, en el Sahara, en ese momento se encontraban los Capsienses, un pueblo del neolítico que luchaba contra depredadores, tribus hostiles y la sequía. Un día, quizás por la simple visualización desde la costa africana por estar más cerca que hoy, dado el menor nivel del mar o quizás por la acción de algún volcán que sirvió de señalización, uno o varios individuos Capcienses cruzaron hasta las islas y descubrieron que no existían ni depredadores ni tribus hostiles, y que además eran tierras ricas en pastos y agua para sus animales, con gran existencia de acogedoras cuevas donde vivir; la noticia se transmitió, no sabemos hasta dónde, quizás hasta el mismo Creciente Fértil, y durante siglos fueron cruzando con todo su ganado y pertenencias a Canarias, primero a Fuerteventura y Lanzarote luego a Gran Canaria; cada isla que colonizaban les dejaba ver otra a un día de camino, así hasta el Hierro y La Palma.
No sabemos si la colonización duró los más de los 1000 años que abarcó el periodo Jounger Dryas, o si solo fue parte de este período glacial; si fue por la mejor defensa de su cultura o por la acción del inicio de la sequía en el Sahara. Lo que sí sabemos es que la colonización de Canarias no fue un hecho de una década sino de siglos, siglos en los que cada invierno se podía ir y venir caminando desde el continente Africano, a cazar, realizar trueques, visitar familias, casarse, etc. La voz se corrió lo suficiente como para lograr hacer confluir la suficiente población para colonizar toda Canarias. Se piensa que entre 50.000 y 80.000 personas, lo que para la época era una densidad humana extraordinaria.
Un año, la corriente del golfo se restableció, la corriente termoalina disminuyo, la corriente de superficie se calentó y los Capsienses quedaron aislados por milenios en el paraíso, de ahí sus marcadas diferencias culturales y lingüísticas entre islas producidas por miles de años de aislamiento.
¿Es Canarias la famosa tierra prometida de la antigüedad?
Existen muchas historias antiguas que han llegado hasta nuestros días, mucho más antiguas que los primeros textos, quizás algunas fueron producidas por influencia del periodo Jounger Dryas, el cual sin duda marcó un punto transcendental y evolutivo en la humanidad.
Quizás, aunque el arca de Noé nunca existió, si existió una gran inundación en el Mediterráneo producida por la rotura de un tapón de hielo en el estrecho de Gibraltar, a finales de la era del Jounger Dryas, (“por dónde pudieron cruzar los parientes vascos, posiblemente también capsienses hacia la Península Ibérica”), o el aumento del nivel del mar por el deshielo, etc. Este hecho pudo ser tan dramático y traumático para aquellas gentes que se trasmitió verbalmente por generaciones y generaciones, añadiendo cada una un poco de su imaginación, creándose la historia del arca de Noé tal como la conocemos.
Quizás esa tierra prometida de la que todo el mundo antiguo habló y deseó, pero que nadie pudo luego encontrar (no hablo de Cannaán ni del pueblo semita que es historia muy posterior, ya que los “capsienses eran de esa misma zona y habían estado allí miles de años antes”; se habla en términos de “lugar perfecto para establecerse”), fue esa tierra que encontraron los capsienses y que desapareció con la crecida de las aguas y la retirada de los hielos, Las Islas Canarias.
Climent que en términos mitológicos o de conjetura utiliza siempre la palabra “quizás”, pero a la vez admitiendo que existen evidencias que parecen indicar que existió un éxodo masivo de esta cultura desde el Creciente Fertil (lo que hoy es Turquía, Palestina, Siria, Israel, etc.) hacia el Sáhara Occidental, cubriendo todo el norte africano, pero casualmente no por la costa -que le alejaría del supuesto destino final “el Sahara”-, sino por el sur del la cordillera, la ruta más cercana. De cualquier forma, zonas separadas por una distancia de 6.000 kilómetros, y a año y medio, o más, de camino moviéndose con la familia, el ganado, y conociendo la dirección correcta.
Lo que sí sabemos es que los capsienses, tienen como punto de mayor concentración final el Sáhara occidental. Los capsienses en general dejaron vestigios de su presencia y confluencia en el Sáhara, ¿Por qué? ¿Qué había en el Sáhara para que se reunieran de una forma tan importante y desde tan lejos? Se sabe que el periodo Jounger Dryas, además de ser un período muy frio, también lo fue muy seco. ¿Se habría corrido la voz de la existencia de un lugar maravilloso donde no existían alimañas ni humanos hostiles, donde había agua en abundancia, pesca, pastos y un clima benigno, y muchísimas cuevas donde vivir? ¿Se habría convertido Canarias en el lugar de referencia donde establecerse, el sitio deseado, la tierra prometida con hasta mil años de tránsito? Cuando la mitología Guanche habla de los primeros que llegaron y los que llegaron después, para justificar sus castas, ¿habla de acoger a más humanos una vez el territorio fue tomado por los primeros en establecerse? Quizás nunca lo sabremos. Lo que si podemos afirmar es que, dadas las circunstancias, de la época y el nivel de autosuficiencia que tenían los Capsienses, con ganado y agricultura, vivir en un territorio como las Islas Canarias era lo más parecido a vivir en el paraíso, y pudo perfectamente, una vez desaparecidas las circunstancias climáticas que permitieron acceder a ellas, convertirse en una historia que se transmitió por generaciones y derivó en mitos que después de milenios de historias habladas, y enriquecidas con partes iguales de imaginación e interés, han formado parte de numerosas culturas derivadas. Los que tuvieron la suerte de encontrarlas, vivieron aquí 12.000 felices años, sin guerras, sin plagas, sin imperios... Eso sí, casi no evolucionaron, pero ni falta que les hacía, la evolución es la respuesta a una necesidad de la que ellos carecían.
En resumen:
La teoría Climent establece: que teniendo la lógica como base de trabajo y realizado un encaje entre la antropología del norte africano y los últimos descubrimientos geológicos y climáticos del planeta se establece que: los Guanches eran de cultura Capsiense, que vinieron desde el Creciente Fértil, que llegaron a Canarias con todo su ganado y semillas durante el período Jounger Dryas (entre 11.500 y 12.500 años, si varia la datación del Jounger Dryas, también lo hará la llegada de los aborígenes porque esta fue la única puerta viable para ellos), y que cruzaron desde el Sáhara y conquistaron todas las Islas Canarias por sí mismos de la única forma posible que un pueblo del Neolítico podía hacerlo: Caminando.
ASOCIACION ISLA FUTURO PARA EL DESARROLLO COMUNITARIO
Esta Asociación hace público este sorprendente descubrimiento con el fin de facilitar su conocimiento general y con ello generar a su vez un nuevo camino de investigación que clarifique aún más nuestra singular y poco conocida prehistoria. En esta Asociación que es de carácter innovador, nos encontramos satisfechos y animados por haber podido aportar la solución a un misterio de más de 500 años, aportando pruebas y viabilidad histórico-científica como para ser catalogada como más que una teoría.
Agradecemos a su vez al Ayuntamiento de Fuencaliente de La Palma el haberlo patrocinado y a D. Martín Climent el sacrificio y calidad de su investigación. (Nos gustaría en la medida de lo posible que este agradecimiento fuese público ya que coincidiremos, la magnitud de la aportación cultural al total del pueblo Canario lo amerita) Gracias.
Ricardo Miguel Pérez
Secretario
Etiquetas:
Bienvenido a
Arqueologia, Historia Antigua y Medieval - Terrae Antiqvae
Terrae Antiqvae es una Red Social sin ánimo de lucro. Necesitamos tu apoyo para el mantenimiento del sitio. Apadrina esta Comunidad
Derechos de Autor:
Terrae Antiqvae® is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Información legal: Terrae Antiqvae® es Marca registrada por José Luis Santos Fernández. Marca nº 2.679.154 - Clase 41, Madrid, España. Reservados todos los Derechos. En Internet desde Julio de 2001.
Normas de la Comunidad (Aviso Legal): Netiqueta - Términos de servicio
© 2024 Creado por José Luis Santos Fernández. Tecnología de