Excavación en la cueva de la Cabililla, en Benzú.
Fuente: Ideal.es | 28 de septiembre de 2012
Investigadores de la Universidad de Cádiz han encontrado en una cueva situada junto a la frontera que separa Ceuta de Marruecos nuevos datos que confirman las relaciones que en la Prehistoria había entre las dos orillas del Estrecho de Gibraltar.
El hallazgo se ha producido en la cueva de "La Cabililla" de Benzú, donde se ha constatado la presencia de sociedades cazadoras-recolectoras paleolíticas y tribales neolíticas con una antigüedad de unos 300.000 años.
La aparición de nuevas piezas en el interior del yacimiento, así como el análisis de la flora y la fauna, han posibilitado a los expertos concretar la conexión entre las dos orillas del Estrecho durante la época prehistórica.
El director de las excavaciones, el catedrático gaditano
José Ramos Muñoz (izquierda) ha asegurado a Efe que los hallazgos
"vienen a transformar los esquemas tradicionales del conocimiento de las sociedades de la Prehistoria, dado que potencia explicaciones desde el sur para comprender las ocupaciones humanas prehistóricas de Europa y las posibles relaciones entre las dos orillas del Estrecho".
El catedrático, que ha sido profesor en las universidades de Colonia, Rennes y París, entre otras, ha explicado que el Estrecho se puede considerar como "zona de paso y lugar de relaciones y contactos de las sociedades prehistóricas".
José Ramos ha indicado que cada vez existen "más evidencias" de que el Hombre de Neandertal cruzó a Europa por el Estrecho y no por Asia.
Después de diez años de excavaciones en la cueva se han localizados restos de sociedades tribales neolíticas y modos de vida asociados a prácticas agropecuarias neolíticas, así como la explotación de recursos marinos por parte de estas sociedades.
Esta investigación se está concretando en una memoria científica que incluirá un balance de los datos geológicos, estratigráficos, cronológicos, ecológicos y de los recursos utilizados por las sociedades prehistóricas.
José Ramos ha añadido que la importancia de la secuencia del yacimiento empieza a ser "conocida y valorada" a nivel nacional e internacional, de ahí la intención de declarar la cueva como Bien de Interés Cultural. EFE