La mina de silex de Treviño (Burgos) tiene, al menos, 6.000 años de antigüedad

Andoni Tarriño, en el yacimiento arqueológico de Pozarrate, en la sierra Araico-Cucho. / FOTOS: SERGIO CARRACEDO

La excavación arqueológica de Pozarrate, en Treviño (Burgos), que se enmarca en el complejo minero de Araico-Cucho, sigue aportando datos de gran interés sobre el pasado más remoto de la zona. Los encargados de la excavación, con el geoarqueólogo Andoni Tarriño a la cabeza, han hallado en la escombrera de la explotación minera un cuerno de ciervo, empleado para picar en la cantera, y varios carbones, resultado del fuego que los hombres del neolítico utilizaron para ‘ablandar’ la roca y extraer los nódulos de sílex con mayor facilidad.

Los análisis de Carbono-14 a los que han sido sometidos estos restos han arrojado datos que permiten conocer la antigüedad de esta cantera que aportó sílex a los humanos que habitaron en un amplio arco que va, al menos, desde Asturias hasta Aquitania, en Francia. «Igual hasta Galicia, no hemos mirado», explica este experto que asegura que el sílex de esta zona es único porque se generó en un área pantanosa o de lagos, por lo que «tiene algas o caracolillos fosilizados. No hay otro sílex parecido en todo el Cantábrico».

La movilidad de este mineral se explica por sus «intercambios comerciales» en una época en la que «el sílex era sinónimo de subsistencia, fundamental para tener buenas armas y, por lo tanto, para comer».

El asta de ciervo, según los datos del análisis, data de hace 5.700 años y los carbones de hace 6.000, lo que certifica la antigüedad de la más baja de las canteras, ya que hay otras siete, a mayor cota, que son más antiguas y una gran zanja también explotada. A pesar de ello, el sílex de la zona se conocía con anterioridad al Neolítico. «Los hombres cazadores del Paleolítico no lo explotaron en cantera, pero sí recogían el que aparecía en superficie para hacer sus herramientas», aclara Tarriño (izquierda). Con la llegada del Neolítico «generan una economía de stock, de ganado y cereales, y con las piedras hacen lo mismo, se dotan de una explotación de buen sílex para hacer sus herramientas».

En esta excavación arqueológica de Pozarrate, que se encuentra entre los municipios de Treviño (Burgos) y Berantevilla (Álava), ha trabajado durante el mes de julio un equipo de 30 investigadores, procedentes de diversas universidades españolas, dirigido desde el Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (Cenieh) por Andoni Tarriño. En ella han procesado unas 50 toneladas de escombros mineros y han recuperado unos doce mil fragmentos de sílex entre residuos y herramientas, producto de la actividad extractiva minera.

Entre los hallazgos cabe destacar dos mazas de ofita –material volcánico de gran dureza– de 9 y 4,5 kilos de peso, respectivamente; así como diversos percutores de sílex. Y no descartan que puedan salir nuevos hallazgos, «hasta restos humanos». También aparece sílex de no muy buena calidad, ya que «los buenos se los llevaron» para trabajarlos y afilarlos en los poblados de la zona, explica el responsable de la excavación. Con ellos construían puntas de flecha, hachas y otras herramientas.
Un nódulo de sílex junto a otro que se comenzó a afilar (arriba), el asta de ciervo hallada en la cantera prehistórica y parte del equipo de investigación, en el proceso de triple cribado del material. / S. CARRACEDO.

Con el objetivo de dar a conocer las estrategias de explotación y abastecimiento del sílex como recurso mineral en la prehistoria, hasta finales de julio, han perseguido el reto de estudiar «al máximo» la explotación minera. Hasta la última piedra. De hecho, han medido con meticulosidad cada una, la han pesado y dejan constancia de su orientación y grados de inclinación para determinar cómo está construida la cantera, «ya que cuando creas una avalancha, las piedras se orientan, así podemos sacar el máximo de información».

La materia de la Prehistoria

Los integrantes de la excavación han rebajado el suelo del yacimiento 1,5 metros, a un ritmo de 25 centímetros cada día. Junto con el volumen analizado en campañas anteriores, se ha alcanzado en esta campaña una superficie total excavada de 116 m2. Asimismo, se ha continuado delimitado el frente de explotación, que en su parte más profunda tendrá un relleno de unos 5-6 metros, y se ha profundizado en otros 41 m2. «El mayor problema son las toneladas de escombros antes de llegar a las estructuras de la cantera. Y esos restos también hay que analizarlos despacio, lo que ralentiza mucho toda la labor», comentó el director de la excavación, que tiene previsto seguir excavando el próximo año «hasta llegar a la roca base de la cantera, al menos en una zanja de 3 metros de anchura y 20 metros de longitud, para descubrir una de las mayores estructuras realizadas por las poblaciones neolíticas en la Península Ibérica».

Pozarrate no es un yacimiento más. «Es muy especial», subraya Tarriño. Se trata de una de las dos minas prehistóricas de sílex de la Península Ibérica y la tercera cantera más antigua de Europa. También se considera la más extensa.

La piedra ha sido el principal y más importante recurso mineral utilizado por los humanos. De entre todas las variedades de materiales líticos, las rocas silíceas de origen sedimentario han sido por sus cualidades para la talla y su abundancia las que han constituido, señala Tarriño, «la materia prima básica de la Prehistoria». Este geoarqueólogo vitoriano es responsable del Grupo de Materias Primas y Materiales Antrópicos y Arqueológicos del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) con sede en Burgos, y lleva años estudiando las cualidades de los pedernales de esta excavación, unas veces en solitario y otras en colaboración con la Universidad del País Vasco y el Instituto Alavés de Arqueología. Por ello, asegura que este sílex era utilizado por comunidades de hombres prehistóricos tan alejadas de la zona como las cuevas asturianas, las cántabras de Altamira o Brassempouy, en Francia.

Parte del equipo, en pleno trabajo. / S. CARRACEDO

Proyecto nacional

Esta campaña forma parte del segundo año de un proyecto de investigación financiado por el MEIC bajo el título 'El complejo minero prehistórico de sílex de Araico-Cucho (Cuenca Vasco-Cantábrica). Los sílex, sus labores extractivas y su difusión en el Pleistoceno superior y Holoceno', dotado con 59.290 euros.

Este año ha contado con financiación del Servicio de Planificación y Estudios de la Consejería de Cultura y Turismo de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León, del Departamento de Euskera, Cultura y Deporte de la Diputación Foral de Álava y del Ayuntamiento de Treviño.

Fuente: elcorreo.com | 15 de agosto de 2017

 
 
style="display:block"
data-ad-client="ca-pub-8510012412669983"
data-ad-slot="3426785577"
data-ad-format="auto">

Visitas: 894

Respuestas a esta discusión

La X Campaña de excavación de Treviño confirma el hallazgo de la cantera más antigua de la península ibérica

Finalizó la X Campaña de Excavación de Treviño, dirigida por Andoni Tarriño, geólogo del Centro Nacional de investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), que confirma el descubrimiento de la cantera más antigua de la península ibérica, Pozarrate, de unos 6.000 años, y en la que cabe destacar la recuperación de una escápula de herbívoro y tres astas de ciervo.

En los trabajos iniciados el pasado 1 de julio en esta cantera neolítica de sílex de Pozarrate, situada en la Sierra de Araico del condado de Treviño (Burgos), se han extraído unos 20 metros cúbicos de escombros mineros y se han recuperado varios miles de fragmentos de sílex como residuos de la explotación y herramientas producto de la actividad extractiva minera, así como siete mazas de ofita y varios percutores de sílex.

“Pero las herramientas mineras más destacadas que hemos hallado son una escápula de herbívoro y tres astas de ciervo, que junto a las nueve recuperadas en campañas anteriores, nos permiten constatar que este yacimiento posee el mayor conjunto de astas asociado a la minería neolítica de sílex en la península” afirma Andoni Tarriño.

Además en esta campaña se ha logrado definir la pared y la base de la cantera, y se ha liberado de escombros el frente rocoso de explotación, que de momento tiene una longitud de 5 metros y 2,5 metros de altura bajo una brecha calcárea de origen antrópico de 1 metro de espesor.

También se ha liberado el plano inclinado rocoso que constituye la base de la cantera en una superficie de 30 m2 que posee una inclinación de 21º (40%). Dicho sustrato rocoso conserva las improntas de los nódulos de sílex extraídos, algunos de más de 40 cm de longitud.

Financiación esatatal, regional y local

La Campaña 2019 forma parte del “Proyecto Araico”, financiado por el MICINN (antiguo MINECO) con 59.290 euros, un proyecto de investigación cuyo objetivo es dar a conocer las estrategias de explotación y abastecimiento del sílex como recurso mineral en el Pleistoceno superior y Holoceno.

Como en años anteriores, la Campaña también ha contado con financiación del Servicio de Planificación y Estudiosde la Consejería de Cultura y Turismo de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León, del Departamento de Euskera, Cultura y Deporte de la Diputación Foral de Álava y del Ayuntamiento de Treviño.

Fuente: cenieh.es | 1 de agosto de 2019

RSS

TRANSLATE BY GOOGLE

Busca en Terrae Antiqvae

Recibe en tu correo los últimos artículos publicados en Terrae Antiqvae -Boletín Gratuito-

Enter your email:

Courtesy of FeedBurner

 

Donaciones

Terrae Antiqvae es una Red Social sin ánimo de lucro. Necesitamos tu apoyo para el mantenimiento del sitio. Apadrina esta Comunidad 

¡Gracias por tu ayuda!

Contacto con el editor:

Publicidad by Google

 

Lo más visto

Patrocinador: SMO Sistemas

Nuestro Canal de Vídeos en YouTube. ¡Suscríbete!

Síguenos en Redes Sociales: Facebook y Twitter

¡Gracias por visitarnos! ¡Bienvenid@!

Estadísticas desde 12 de noviembre de 2014.

Derechos de Autor:
Licencia de Creative Commons
Terrae Antiqvae® is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.

Información legal: Terrae Antiqvae® es Marca registrada por José Luis Santos Fernández. Marca nº 2.679.154 - Clase 41, Madrid, España. Reservados todos los Derechos. En Internet desde Julio de 2001.

Normas de la Comunidad (Aviso Legal):  Netiqueta - Términos de servicio

© 2024   Creado por José Luis Santos Fernández.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio

Usamos cookies propias y de terceros que entre otras cosas recogen datos sobre sus hábitos de navegación para mostrarle publicidad personalizada y realizar análisis de uso de nuestro sitio. Si continúa navegando consideramos que acepta su uso. OK Más información | Y más