Fuente: The Siberian Times | 10 de junio de 2014 (Traducción de G.C.C. para Terrae Antiqvae)

Premio Paleolítico único para los científicos: una mandíbula de un Homo sapiens que se alimentaba de mamut lanudo, pero que pudo haber sido canibalizado.

Incrustada en una ladera de la montaña Afontova, en las afueras de Krasnoyarsk, donde ha permanecido durante unos 14.000 años, la mandíbula de un sujeto adulto fue encontrada junto a huesos de animales y herramientas antiguas.

Foto: Vista general de la montaña de Afontova.

El análisis detallado de su ADN, que probablemente se realizará en Alemania, indicará a los expertos la edad, sexo, raza (caucásica, mongoloide o una mezcla), e incluso posibles enfermedades de tiempos antiguos.

Los científicos examinarán la mandíbula, lo que incluye los dientes, ante la posible evidencia de canibalismo, una sospecha inicial que no pueden confirmar por ahora, pero también por la posibilidad de que la carne de mamut constituía parte de su dieta.

Estos restos humanos no han sido hallados en una tumba, sino al lado de restos de animales que fueron descuartizados, dijo el investigador Ivan Stasyuk. "¿Por qué la idea del canibalismo? Pues debido a que esta mandíbula se encontró junto a herramientas y huesos astillados de grandes ungulados", dijo, lo que lleva a la conjetura de que este individuo pudo ser también sacrificado y comido.

Foto: Otra perspectiva de la mandíbula hallada.

"Yo no apresuraría la conclusión del canibalismo", replicó su colega Leonid Galuhin, también investigador de la compañía Krasnoyarsk Geoarheologiya, y jefe adjunto de la excavación. "Por ahora, la mandíbula ha sido llevada a un laboratorio de Novosibirsk para realizarle todos los análisis, incluyendo el análisis traceológico, lo cual nos permitirá decir con seguridad si hubo acto de canibalismo o no".

La mandíbula es probable que sea enviada, a su vez, al laboratorio de fama mundial del Instituto Max Plank, en Alemania, para un análisis a gran escala de su ADN.

"Los hallazgos de huesos del hombre paleolítico son muy raros", dijo Galuhin. "No se producen muchos en el mundo. Para nosotros, estos descubrimientos son extremadamente poco habituales. Esta mandíbula es realmente única, ya que está perfectamente conservada. Podemos obtener de ella un montón de datos: edad, sexo, raza, incluso información de algunas de las enfermedades que esta persona podría haber sufrido.

Puede también permitirnos investigar la colonización temprana de Siberia por los antiguos seres humanos, así como las conexiones de los habitantes de Siberia con otras regiones. Además, cuanto más material antropológico de este momento encontremos en todo el mundo, más información obtendremos de los pueblos antiguos. Anteriormente, en Siberia y el Lejano Oriente, se hicieron algunos hallazgos, y el mejor material procede de enterramientos en los yacimientos llamados Malta y Buret.

Hasta ahora, solo teníamos las mandíbulas de dos niños. Ahora tenemos una tercera y en las mejores condiciones, con sus dientes bien conservados, los cuales son importantes para extraer ADN.

Este lugar, un campamento antiguo, ha sido investigado desde finales del siglo XIX y nos ha proporcionado una gran cantidad de material, no sólo restos líticos parciales, sino miles de herramientas completas de piedra y hueso. Durante las excavaciones actuales no esperamos encontrar la misma cantidad, pero sí muy cerca a lo anterior. Aparte de las herramientas de piedra y hueso, hemos hallado un conjunto de cuentas de piedra y algunas piezas artísticas, incluyendo una placa triangular hecha de colmillo de mamut con trazos de puntos. Probablemente era un colgante".

El yacimiento es, de hecho, un complejo de campamentos antiguos. La montaña de Afontova tiene dos partes. Una de ellas es un área donde se han encontrado cadáveres de animales descuartizados, junto con herramientas para diseccionar la carne.

"Así que aquí vemos como fue dejado todo por los pueblos antiguos. La otra parte de este antiguo campamento es una pendiente, la cual se formó por deslizamientos de tierra. Es difícil ver cualquier estructura en ella, y es muy complicada de trabajar. Debemos consultar constantemente con geólogos y pensar la forma de trabajar de la mejor manera posible. Esta mandíbula fue hallada aquí. Nos hemos arreglado para datarla utilizando otros hallazgos cercanos. Creo que después de un análisis completo sabremos su datación con certeza.

El pasado mes de marzo encontramos dientes de mamut en esta área. Se trata de un hallazgo bastante común para este periodo. Es necesario comprender esta época. La gente vivía a lo largo de los límites de los glaciares, y, en nuestro caso, esta frontera estaba en la línea de la ciudad de Turukhansk", a unos 1.475 kilometros al norte de la actual Krasnoyarsk, en la confluencia de los ríos Yenisei y Nizhnyaya Tunguska.

"La zona de la moderna Krasnoyarsk era semejante a la tundra ártica", dijo el señor Galuhin. "Había un montón de animales cerca del límite del glaciar, y el hombre antiguo perseguía a los animales a lo largo de sus rutas de migración, explorando nuevos territorios. Entre estos animales estaban también los mamuts, así que no hace falta decir que las gentes los cazaban. La carne de mamut era parte de la dieta de estos siberianos", afirma. "El clima era bastante severo aquí, similar al de la moderna ciudad de Taymyr, por ejemplo".

Foto: Los arqueólogos desentierran un colmillo de mamut.

La excavación actual, que cubre unos 10.000 metros cuadrados, se lleva a cabo debido a la construcción de un nuevo puente -el cuarto- a través del río Yenisei, en Kransoyarsk. El contratista principal es el Instituto de Arqueología y Etnografía, de la rama siberiana de la Academia de Ciencias de Rusia. La compañía Krasnoyarsk Geoarheologiya Limited trabaja junto a ellos.

Foto: Vista de la construcción del cuarto puente sobre el río Yenisei.

Esta "excavación de rescate" -se espera que proporciones una gran cantidad de nuevos hallazgos- puede conducir a la creación de un museo especial dedicado a este enclave, un sueño de larga duración entre los arqueólogos.

El lugar se encuentra en la margen derecha del río, y durante muchos años herramientas de hueso y asta, así como artículos de adorno personal, han sido recuperados. Restos de fauna incluyen mamuts, renos, ovejas, caballos, uros/bisontes, cabras montesas, el antílope saiga, ciervos rojos, liebres, zorros árticos y lobos.