Comentario por Guillermo Caso de los Cobos el marzo 21, 2015 a las 1:17am

La dirección del World Padel Tour renuncia al anfiteatro de Mérida

Vista del anfiteatro de Mérida, objeto de la polémica zanjada ayer. / JOSÉ FUSTE

Fuente: EL PAIS.com | 20 de marzo de 2015

Los organizadores del World Padel Tour ni siquiera han esperado a que fuera definitivo el informe de valoración técnica que había de autorizar o prohibir la celebración de su torneo en el anfiteatro romano de Mérida, como tenían previsto. Ayer por la tarde, la organización publicó en su web un comunicado en el que notificaba que suspendía el torneo, previsto del 4 al 10 de mayo, y anunció que de aquí a unos días comunicaría la nueva ubicación del evento. Los directivos del World Padel Tour buscan ya otra sede, que quieren sea igual de simbólica que el anfiteatro romano.

El Ayuntamiento emeritense, gobernado por el Partido Popular, informó ayer que el problema ha venido por parte de los patrocinadores. Estos han decidido finalmente retirarse del apoyo al torneo para no verse involucrados en la polémica, generada por el uso de estas ruinas romanas del año 8 a. C. Las denuncias de Izquierda Unida de Extremadura hace más de una semana, unidas al posterior aluvión de críticas desde diversos estamentos culturales, había calentado el affaire anfiteatro. Álvaro Vázquez, concejal de IU de Mérida, se alegra de que su denuncia y la movilización ciudadana hayan servido para que no se perjudique el patrimonio de la ciudad. Se han conseguido más de 195.000 firmas en la plataforma change.org. en contra de la celebración del evento deportivo en el anfiteatro, que tiene la categoría de Bien de Interés Cultural (BIC). Dicha categoría implica el mayor nivel de protección posible de un bien inmueble.

El Ayuntamiento de Mérida lamentó la decisión y defendió que el proyecto era módelico, que cumplía todos los requisitos, tanto técnicos como arqueológicos y que sería escrupulosamente vigilado por el Consorcio de la Ciudad Monumental, organismo formado por la Junta de Extremadura, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, y el Ayuntamiento, que gestiona los edificios Patrimonio de la Humanidad de la ciudad de Mérida, con más de 2.000 años de antigüedad.

La corporación emeritense señala que el informe todavía no había pasado la comisión ejecutiva, pero que el preliminar era positivo, y subraya que la celebración del torneo no habría afectado a la conservación del monumento: “El desmontaje se resalizaría el mismo día que acabara el torneo, la pista deportiva se situaría en la arena, sin ningún anclaje, las gradas se adaptarían a la forma del monumento. Se cumplían las máximas garantías de seguridad y de señalización”. El Ayuntamiento esperaba recaudar más de un millón de euros, que era lo que recaudó Cáceres el año pasado cuando se celebró el mismo torneo en la Plaza Mayor.

El alcalde de Mérida, el popular Pedro Acedo, acusa a los partidos de la oposición, IU y PSOE, de “destrozar la proyección internacional que el World Padel Tour suponía para la ciudad. Se ha perjudicado seriamente a Mérida”. Acedo cree que el impedimento de la celebración se debe solo a presiones políticas. La Consejera de Cultura de Extremadura, Trinidad Nogales, declaró que se había generado “una alarma injustificada” respecto al uso del Anfiteatro Romano.

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Hay que congratularse por este final feliz. Todos mis parabienes para los patrocinadores de este evento, que han sabido enjuiciar a tiempo y con certeza el alcance de la protesta que se había llevado a cabo contra este desatino. 

Y desde luego, tanto el alcalde del Ayuntamiento como el Consorcio de la Ciudad ni que decir tiene que se han lucido de forma nada edificante. Ellos, que deberían ser los primeros en defender el patrimonio de la ciudad, resulta que no les importaba nada tan deplorable y peligroso montaje. La queja por la posible pérdida del millón del euros que dicen iban recaudar (y que no es tal pérdida, puesto que se piensa celebrar el certamen en otro lugar) no sé por qué, pero me suena a lo de siempre: mientras haya pasta gansa de por medio ¡quítame allá ese patrimonio arqueológico, que molesta un montón!

En fin, esperemos que hayan aprendido la lección por vuelven a tener una ocurrencia parecida.

 

Comentario por Alicia M. Canto el marzo 21, 2015 a las 9:50am

Aleluya. Es muy llamativo que la sensibilidad ante el disgusto social y la presión contraria a la sede arqueológica elegida haya llegado de los patrocinadores económicos del evento, pero así ha sido: la segunda campaña de firmas en Change.org: "No celebréis el World Padel Tour en el anfiteatro de Mérida", también convocada por J. Paredes, tuvo un éxito aún mayor que la primera, con casi 200.000 firmas en muy pocos días, y desde ayer muchos comentarios de satisfacción.

Agradecemos, pues, a Estrella Damm, Volvo, Adeslas y Philips, que esta imagen de debajo, u otra parecida, no se convirtiera en realidad, pues han sabido escuchar a los ciudadanos y han renunciado espontáneamente a celebrar allí el evento, que bien puede hacerse todavía en otras instalaciones deportivas emeritenses, que las hay.

Algunas veces es verdad que "l'union fait la force", pero tiene que haber oídos que escuchen y comprendan. Y si son los oídos públicos, mucho mejor.

Pero las declaraciones del Sr. alcalde Acedo, apelando al dinero supuestamente perdido, y a que "cree que el impedimento de la celebración se debe sólo a presiones políticas", acusando a su oposición, demuestran que no está muy a la altura de su cargo, y que ni siquiera se ha interesado por las campañas de firmas ni las redes sociales. Se le podían haber ocurrido otras opciones, por ejemplo una preocupación real de muchos ciudadanos y profesionales, no necesariamente de allí, por posibles daños imprevistos en el monumento.

Aunque sólo fuera porque Mérida hoy cuenta con unos 58.000 habitantes censados, y hemos firmado casi 200.000...

Comentario por Alicia M. Canto el marzo 21, 2015 a las 11:55am

Desde la óptica irónica está muy bien este artículo de hoy en el blog del periodista Aníbal Malvar en Público. Si llega a acertar con la foto, es de 10: 

UN DÍA TRISTE PARA LA CULTURA EN MÉRIDA

Ayer fue un día triste para la cultura. Para nuestra cultura. Para la cultura en Mérida. Para la cultura española. Los organizadores del muy patriótico World Padel Tour han suspendido los partidos de pádel que se iban a jugar, entre el 4 y el 10 de mayo, en el anfiteatro romano de Mérida. El anfiteatro de Mérida fue construido, como todos los historiadores y arquitectos saben, para que 22 siglos después se jugaran sobre sus ruinas partidos de pádel. Y ahora la incultura general nos obliga a rescindir aquel bello y lejano sueño de los picapedreros de la Augusta Emerita.

El alcalde de Mérida, por supuesto del PP, como deberían de ser todos los alcaldes, ha lamentado muy profundamente la decisión del World Padel Tour de no jugar al pádel en el ruinoso anfiteatro de Mérida, a causa de unas veleidosas protestas populares. Con las ganas que tenían los turistas de ver jugar al pádel a unos muchachos en el anfiteatro de Mérida.

Los batasunos y los yihadistas, todo hay que decirlo, reunieron 195.000 firmas en change.org para boicotear este evento de pádel que hubiera congregado multitudes y rejuvenecido una vieja ruina lusitana que no vale para nada a los emeritenses. Duele al español la blandeza de nuestras empresas ante el violento. Que una institución tan patriótica y de tradición tan arraigada en el españolismo como el World Padel Tour abandone sus ideales por presiones espurias, ha de hacernos meditar sobre si somos buenos españoles, sobre si somos buen world, sobre si jugamos bien al pádel, y sobre si corremos bien los tours, cualidades que son la santísima trinidad de nuestra cultura nacional, y por eso suman cuatro.

Si el anfiteatro de Mérida no sirve ni siquiera para celebrar un campeonato de pádel, es que no sirve para nada. Vaya ruina. Un campeonato de pádel es algo único, y sin embargo anfiteatros romanos como el de Mérida hay un montón. Personalmente, yo estoy con el alcalde del PP, Pedro Acedo, que acusa a la oposición de “destrozar la proyección internacional que el World Padel Tour suponía para la ciudad. Se ha perjudicado seriamente a Mérida”.

Desde que Aznar empezó a jugar al pádel con Pedro J., o sea, algo así como una conversación agórica entre Sócrates y Platón pero con pelota, el Worl Padel Tour se ha convertido en uno de los acontecimientos culturales más relevantes del globo, solo por detrás de Gran Hermano XIII. Y que Mérida renuncie a albergarlo por domésticas cuitas políticas de la izquierda les parece un despropósito a este columnista y a este periódico y a la ciudadanía en general.

Esos mismos que denuncian que el IVA cultural sea del 21% mientras el porno paga el 4%, hoy niegan a Mérida el orgullo de modernizar su vetusto y descuidado anfiteatro con un fulgente partido de pádel, ingresando, además, un millón de euros. ¿Qué alcalde decente no vendería por un millón el anfiteatro de Mérida, donde ni siquiera te permiten construir?

Oclusos en la sinrazón de la memoria, los emeritenses han dejado perderse en el viento ese soplo de futuro español llamado World Padel Tour, y quizá perder el vagón de ese futuro nos acabe abocando a excavar las cunetas de la historia. Quiera Dios que España no se porte como Mérida, y que los españoles de bien acepten celebrar en sus monumentos, en sus cementerios y sobre sus reliquias miles de World Padel Tour, pues este evento es uno de los pilares más fashion de nuestra cultura y nuestra memoria. Viva España.

(He dejado sus negritas).

Comentario por Roberto el marzo 22, 2015 a las 4:06pm

Encima se alegaba que la celebración del World Padel Tour era un acontecimiento de resonancia internacional, cuando prácticamente todas las sede son en España y todos los jugadores son españoles y algún argentino. 

Comentario por Alicia M. Canto el marzo 25, 2015 a las 10:07pm

Algunas cosas se van aclarando (u oscureciendo...): Los arqueólogos del Consorcio de Mérida niegan por escrito haber hecho los informes técnicos favorables al torneo que aseguraban la Junta y el alcalde:

Técnicos del Consorcio afirman que no han emitido ningún informe sobre el pádel y que los han utilizado

Fuente: eldiarioex, 24/03/2015 - 20:52h

Una rectificación en toda regla de los trabajadores del Consorcio Ciudad Monumental de Mérida al director del ente público, Miguel Alba; la consejera de Cultura Trinidad Nogales; el alcalde de Mérida Pedro Acedo; y los máximos responsables de la Junta.

Unos responsables que han reiterado ‘machaconamente’, hasta la saciedad, que la celebración del macro torneo de pádel contaba con el aval técnico del Consorcio.

Hasta ahora los técnicos habían guardado un escrupuloso silencio. Pero lo han roto:

“Ni los arqueólogos, ni los historiadores, ni la restauradora del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida han tenido conocimiento del Proyecto de Uso del World Padel Tour en el Anfiteatro Romano de Mérida”, afirman.

El grupo de técnicos del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida se ha congratulado de la suspensión del World Padel Tour en el Anfiteatro Romano, prueba de la que dicen no se les ha informado ni mucho menos consultado y, en consecuencia, no han emitido "ningún tipo de informe técnico" al respecto.

Los técnicos Rocío Ayerbe, Teresa Barrientos, Ana Mª Bejarano, Bruno Franco, Fabián Lavado, Juana Márquez, Raquel Nodar, Félix Palma y M. Paz Pérez firman el escrito que desmiente las declaraciones de la Junta de Extremadura. Además los técnicos consideran que se ha utilizado su nombre para justificar la viabilidad de este proyecto por parte de la responsable de la Consejería de Cultura.

Lo que han conocido, según se indica, ha sido lo "publicitado en los distintos medios de comunicación", pues no se les ha informado "ni mucho menos consultado" y, por tanto, no han emitido "ningún tipo de informe técnico al respecto". 

La Junta ataca a los críticos del pádel

Pocas horas antes de este tajante desmentido de los técnicos del Consorcio, la vicepresidenta de la Junta, Cristina Teniente, seguía insistiendo en que había luz verde de los técnicos para la celebración del pádel en las ruinas romanas y acusaba a los críticos de tener fines ‘electoralistas’

Cristina Teniente ha dicho que el torneo cumplía “todos los requisitos, y algunos se empeñaron en convertirla en un arma arrojadiza con fines electorales”.

“Los que se han empeñado en cargarse este evento, después de tres años preparando esta prueba, estudiando para que fuera la mejor opción, son los que tienen que rendir cuenta ante las empresas y los ciudadanos”, según Teniente, que señala que el evento habría tenido una dimensión, no solo nacional, sino internacional.

Ha argumentado que no se ha escuchado a los técnicos del Consorcio Ciudad Monumental, y que en Mérida no hay pabellones con capacidad para acoger a 2.000 espectadores.

..........

Bueno, pues ahora sí que hemos escuchado a los técnicos del Consorcio... Y, si todo esto es como parece, el precedente es grave.

Hasta hay ahora otra campaña de firmas a favor del torneo, que sigue insistiendo en los falsos informes. Claro que no van a alcanzar las casi 200.000 firmas en contra que consiguieron en dos días "los radicales" (según ellos).

Comentario por Guillermo Caso de los Cobos el marzo 25, 2015 a las 10:37pm

Es realmente indignante que los responsables políticos adujeran continuamente que contaban con la anuencia de los técnicos del Consorcio para la celebración del desdichado evento y que esta circunstancia resulta que era un absoluta mentira. Es increíble tal desfachatez, aunque de los políticos se puede esperar cualquier cosa, sobre todo, mentiras y más mentiras.

No obstante, aunque es de alabar que los técnicos hayan desenmascarado las argumentaciones de la clase política, cuando decían que contaban con su apoyo, también hay que decir que su posicionamiento al respecto podían haberlo manifestado un poco antes. ¿Por qué callaron mientras tanto? ¿Por qué ahora es cuando dicen que a ellos nadie les consultó? ¿Por qué han esperado a que el clamor popular echara abajo tan desgraciado invento?

En fin, si primero lo hubieran dicho/denunciado a lo mejor la polémica habría durando apenas nada. 

Comentario por Percha el marzo 25, 2015 a las 11:16pm

Completamente de acuerdo con Guillermo. Es indignante pero deberían haberlo dicho antes, si no, ¿para qué sirven?

De los políticos, qué decir, deberían estar todos los implicados en la calle pero ya. Pero esto es España, aquí nunca pasa nada. Igual había que iniciar otra campaña "radical" para pedir su dimisión. Claro que estos si que tienen la cara de hormigón armado, a prueba de daños.

Comentario por Alicia M. Canto el marzo 26, 2015 a las 10:51am

Para tratar de ser justos he buceado un poco más en por qué dirían los políticos lo de la aprobación por el Consorcio. Sobre todo me extrañaba una mentira así en Trinidad Nogales, la Consejera de Cultura, a la que conozco y aprecio de muchos años, siendo además ella arqueóloga de profesión. Y algo he encontrado, de forma que podría decirse que ambos sectores tienen "su verdad":

Ella cita, en estos dos vídeos de comparecencia en la Asamblea de Extremadura (uno y dos), "un acuerdo de la Comisión ejecutiva del Consorcio del 11 de febrero". Eso entonces sería verdad, pero no incluiría la opinión de los técnicos arqueólogos en general (ni ella lo dijo), por lo que sigue:

El Consorcio de Mérida en principio es un organismo no técnico: "El Consorcio de la Ciudad Monumental, Histórico-Artística y Arqueológica de Mérida es una entidad de derecho público, integrada por la Junta de Extremadura, el Ministerio de Educación, la Excma. Diputación Provincial de Badajoz, la Excma. Diputación Provincial de Cáceres, la Asamblea de Extremadura y el Excmo. Ayuntamiento de Mérida."

Y si ahora vemos la composición de dicha Comisión Ejecutiva, la forman:

Presidente: Ilma. Sra. Dª. María Pilar Merino Muñoz. Directora General de Patrimonio Cultural de la Junta de Extremadura

Vicepresidente Primero: Excmo. Sr. D. Pedro Acedo Penco. Alcalde de Mérida.

Vicepresidentes Segundos:

- Excmo. Sr. D. Valentín Cortés Cabanillas. Presidente de la Diputación Provincial de Badajoz
- Excmo. Sr. D. Eduardo Villaverde Torrecilla. Presidente de la Diputación de Cáceres
- Excma. Sra Dª. Consuelo Rodríguez Píriz. Vicepresidente Primera del Parlamento de Extremadura

Vocales:

- Dos de los representantes del Gobierno de Extremadura
- Uno de los representantes del Ministerio de Cultura en el Consejo Rector
- Uno de los representantes del Ayuntamiento de Mérida en el Consejo Rector
- El Director Científico, con voz y sin voto

Secretario/a: El Director Gerente, que asistirá con voz y sin voto.

(Tienen algunos asesores, pero no sabemos si en esta ocasión los utilizaron).

....

Saco como conclusión, por tanto, que el organismo que decidió que el torneo se hiciera en el anfiteatro era "el Consorcio", en efecto, pero dentro de él lo hizo el órgano formado mayoritariamente por los políticos, con el apoyo técnico posible, pero exclusivo, del director científico (pues es el único arqueólogo que forma parte de la Comisión, aunque sin voto).

Por tanto, la decisión en realidad no tuvo en cuenta a los técnicos arqueólogos del Consorcio en general. De hecho, esto parece deducirse también de esta otra noticia de ayer día 25 por la tarde, que es clara respuesta al escrito negativo de varios de los técnicos del Consorcio:

"La Comisión Ejecutiva del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida aprobó por unanimidad en su reunión del 11 de febrero de 2015 "emitir informe favorable condicionado" a la celebración del World Pádel Tour 2015 en el Anfiteatro Romano de Mérida (se adjunta documento). Según el acuerdo del Consorcio, la autorización definitiva debía concederla la Comisión Ejecutiva del propio Consorcio...  El Gobierno de Extremadura respeta la opinión particular de alguno de los 22 técnicos del Consorcio, y demuestra con documentos que sí ha existido en todo momento el seguimiento técnico que requiere un evento de estas características..."

El problema fue dar a entender que "el Consorcio" al aprobar el torneo daba un veredicto "técnico", cuando era sobre todo político, y el dictamen estaba apoyado en sólo algunas opiniones, pero no en todas, pues obviamente, como se ve ahora, las había contrarias, aunque, al no pedírseles una opinión colectiva, o un dictamen profesional, realmente no los dieron.

Pero, claro, quizá todo eso era hilar muy fino para la prensa. Queden al menos aquí estas constancias.

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