Comentario por Balbo el noviembre 9, 2009 a las 9:37am

El amigo Rufión nunca pudo ser prefecto de Egipto, simplemente por que este país aún no había sido conquistado por Augusto y Cleopatra era muy suya. Pero, el hecho de ser un hombre de confianza de Cesar, de extracción no noble, al que se deja a cargo de las tropas romanas en esa región, ha hecho que algunos lo consideren predecesor de ese puesto, basándose en esa única cita del dudoso Suetonio.


De todas formas, la condición de liberto y mucho menos la de hijo de liberto no excluía a nadie de nada en época imperial. El cargo de prefecto de Egipto en particular estaba abierto a cualquiera que fuese ciudadano romano y tuviera el rango de caballero… y la confianza del Cesar. Los senadores estaban específicamente excluidos, no se les fueran a ocurrir ideas raras estando al mando de un territorio tan rico y tan aficionado a adorar a sus gobernantes.


Esto abarcaba a personas de lo más variopinto, griegos y judíos alejandrinos ocuparon el puesto, y por supuesto, también libertos imperiales pudieron hacerlo.


Los libertos imperiales constituyeron la base de la administración durante toda la época del principado, y en algunos casos, como el del famoso Narciso durante el reinado de Claudio, detentaron el verdadero poder sobre el imperio.


Tácito, uno de mis historiadores favoritos y mucho mas fiable que Suetonio, nos cuenta la siguiente anécdota; Durante el reinado de Nerón; muchos antiguos amos se quejaban de que sus libertos les habían perdido el respeto, se negaban a obedecerles y, en general, olvidaban sus deberes morales para con sus antiguos amos. Por ello, pedían al emperador que redactase una ley que permitiera devolver a la esclavitud a aquellos libertos que se comportasen de forma tan insolente. Este se negó porque “este grupo social (el de los libertos) era muy amplio, de él procedían en su mayor parte las tribus, las decurias, los ayudantes de los magistrados y sacerdotes y hasta las cohortes (militares) adscritas a la ciudad; incluso muchísimos caballeros y la mayor parte de los senadores no tenían otra procedencia.” C. Tácito, Anales, Libro XII, 27.


Este Rufión ni siquiera era un liberto, si no hijo de un liberto, por lo que nada le hubiera impedido acceder a altos puestos de la administración.


Por supuesto, se puede alegar que en época de Cesar esto no era así, que la sociedad era más cerrada y que Cesar nunca se hubiera atrevido a nombrar realmente para un alto cargo al hijo de un liberto. La verdad es que la sociedad de esa época evolucionaba a un ritmo solo comparable al actual, y mi “Nick” Lucio Cornelio Balbo y su sobrino son solo un ejemplo entre muchos. En cuanto a lo que Cesar se hubiera atrevido…basta con leer el párrafo de Suetonio inmediatamente anterior al de Rufión “…Puso al frente de la Casa de la Moneda y de las rentas públicas a esclavos suyos” Ni siquiera a libertos, directamente a esclavos, nombro senadores de origen galo…no se cortó un pelo (así le fue).

Comentario por CNEO POMPEYO el noviembre 10, 2009 a las 12:04am

SALUDOS SOY NUEVO EN TERRAE ANTIQVAE Y TAN SOLO AFICIONADO A LA HISTORIA, NO TENGO NI POR ASOMO VUESTROS CONOCIMIENTOS, DE LOS QUE ESPERO APRENDER BASTANTE.

Pero me gustaria hacer un comentario sobre Caesar. CAESAR era el Cognomen (era un segundo apellido familiar, e indicaba la familia directa a la que se pertenecia dentro de la gens ) y significaba " PELUDO ", teniendo en cuenta que uno de los complejos mayores de Gaius Julius Caesar era su calvicie.

Comentario por Andrés el diciembre 18, 2009 a las 9:29pm

Existe relación entre Rufio y el apellido moderno Rubio? alguien sabe?

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