Juan Carlos Campos con los primeros petroglifos que localizó. Un equipo de la Universidad hizo calco. efe / campos

 

Vía: Diario de León.es | Verónica Viñas| 12 de junio de 2011

 

Los petroglifos son uno de los enigmas más ancestrales. Nadie, de momento, ha conseguido descifrar su significado. Dos años después de que Juan Carlos Campos, un astorgano aficionado a la arqueología, descubriera centenares de ellos en La Maragatería, la Universidad de León y, en concreto, el equipo que dirige el catedrático de Prehistoria Federico Bernaldo de Quirós, sigue sin desvelar el resultado de sus investigaciones. Los petroglifos son cazoletas o marcas grabadas en las rocas.

 

Campos tuvo claro desde un principio que no eran simples agujeros, pero pasaron meses hasta que la Junta decidió tomarle en serio y encargar un estudio científico. Después, los expertos aseguraron que su antigüedad se remontaba a la Edad del Bronce (unos 6.000 años). Ahora interesa averiguar por qué hay tantos en esta comarca y cuál es su significado. La pregunta que durante mucho tiempo han tratado de resolver los científicos es si los petroglifos son simples elementos decorativos o si estamos ante las primeras manifestaciones de la escritura.

Campos ha decidido continuar las pesquisas por su cuenta. En su blogspot, el descubridor de los petroglifos maragatos confiesa: «Hace mucho tiempo que comprendí que seguramente la ciencia nunca podrá resolver el misterio; entre otras cosas, porque las cazoletas que pueblan las rocas de todo el mundo tienen -tuvieron- significados muy diferentes entre sí. Sería como reunir las esvásticas de los petroglifos gallegos, las representadas en los estandartes romanos y las de simbología nazi, y decir que significan lo mismo».

El laberinto más antiguo.

 

Lo cierto es que Campos descubrió hace tres años, a los pies del mítico monte Teleno, dos grandes losas de piedra en las que están grabados los que parecen ser, junto con los gallegos, los laberintos más antiguos localizados hasta la fecha (del Calcolítico). Serían 1.500 años anteriores a los cretenses. Un hallazgo que parece haber pasado completamente desapercibido, como lamenta Campos, «quizá porque apareció en León y no en otra parte, donde este descubrimiento habría tenido, sin duda, mayor repercusión». Antonio de la Peña, experto en la materia y arqueólogo del Museo de Pontevedra, ha seguido muy de cerca todas los hallazgos de Campos y le ha animado a seguir. «Es de los pocos expertos a los que no les molestan los aficionados; todo lo contrario».

Campos, que no deja de encontrar cazoletas en pueblos de La Maragatería y Cepeda, también ha hecho otras averiguaciones. A la espera de que la Universidad presente sus conclusiones, ha intentado seguir la pista de los petroglifos, retrocediendo en el tiempo todo lo posible, para intentar encontrar "el precedente" y saber en qué momento el ser humano empezó a grabar cazoletas en las rocas.

En la búsqueda de datos que arrojen algo de luz al enigma de los petroglifos, se ha topado con casos fascinantes, que convierten estas "marcas"  -”con apariencia de círculos grabados aleatoriamente en rocas dispersas”-  en un tema aún más apasionante si cabe.

Viaje en el túnel del tiempo. Retrocediendo 11.500 años, aparecen cazoletas en Göbleki Tepe (Turquía), considerados los templos rituales más antiguos del mundo. Remontándose aún más atrás en el tiempo, es posible establecer coincidencias entre los petroglifos y las cazoletas pintadas en cuevas rupestres del Paleolítico Superior. Aquí se pierde el rastro de las cazoletas realizadas por el Homo Sapiens. Sin embargo, Campos se ha adentrado más allá en el túnel del tiempo. En la localidad francesa de Perigord apareció a principios del siglo XX un refugio natural conocido como La Ferrassie, que resultó ser un yacimiento neanderthal, donde se localizaron ocho esqueletos. Uno de ellos era el de un niño de 3 años, enterrado bajo una losa de piedra caliza. Lo sorprendente es que esta "piedra funeraria" está decorada con 18 cazoletas, agrupadas en parejas, y todas en la cara inferior de la losa, en contacto con el cadáver; lo que certifica que, al menos, es de la misma época que los enterramientos. La losa, que está depositada en el Museo de Prehistoria de Les Eyzies, tiene una antigüedad de 70.000 años. De hecho, las 18 cazoletas de esta piedra están consideradas como el petroglifo más antiguo conocido en el continente europeo.

 

Foto: Losa con 18 cazoletas agrupadas en parejas. Yacimiento de La Ferrassie

 


Foto: Cazoletas en una pared de la cueva de Daraki-Chattan

 

No termina aquí el periplo de Campos en su busca del petroglifo más antiguo del mundo. En el corazón de la India se encuentra la cueva de cuarcita Daraki-Chattan, en cuyas paredes hay 500 cazoletas que fueron hechas en el Paleolítico Inferior, hace más de 150.000 años. La Sociedad de Arte Rupestre de la India ha realizado sucesivas excavaciones para probar la veracidad de la datación. Fruto de estos sondeos fue el descubrimiento, en el 2002, de estratos inferiores más antiguos. Aparecieron lascas de cuarcita desprendidas de la pared superior, con 18 cazoletas idénticas a las conservadas en las paredes de la cueva.

 

 

Foto: Cazoleta y petroglifo en forma de meandro. Cueva del Auditorio. Bhimbetka, Madhaya Pradesh, India. Yacimiento achelense (700.000-290.000 BCE)

 

 

A no mucha distancia se encuentra la llama Cueva del Auditorio. En el estrato más antiguo, de hace medio millón de años, también apareció una cazoleta y un pequeño surco grabados en la roca. Ambas cuevas son ya Patrimonio de la Humanidad. Lo realmente sorprendente es que quien los talló, teniendo en cuenta la época, fue un Homo Erectus.

«Al menos tres especies distintas: el neanderthal, el homo erectus y el homo sapiens incluyeron las cazoletas en su universo particular», concluye Campos. Resulta escalofriante...

-------------------------------------------------------------------------------------------

Post relacionado:

 

Homo erectus hizo cazoletas (en el blog de Juan Carlos Campos "Tierra de los Amacos")

Visitas: 1527

Respuestas a esta discusión

Espero que os parezca al menos interesante. Dudaba si subirlo aquí o no, pero gracias al Diario de León lo ha visto Guillermo. Gracias también para él.

EL tema es apasionante, y los nuevos descubrimientos en la India retrasan tanto las fechas que casi da vértigo imaginarlo. La próxima semana estaré de viaje, y siento no participar más en el foro. En todo caso reconozco que como aficionado que soy poco más puedo decir.

Un saludo a todos

 

De nada, Juan Carlos, la gracias, en realidad, hay que dártelas a tí por tu trabajo.

 

Personalmente, desconocía esas referencias de la India, las cuales, qué duda cabe, son interesantísimas, dadas las amplias implicaciones que tienen.

 

Un saludo, igualmente.

Sencillamente ¡expectacular! Es curioso el tema de las caras superiores de los pilares. Algunos expertos, se afanan en considerar esas cúpulas simples marcas de cantería. En el caso de una ordenación o de marcas repetitivas o únicas, parece obvio, pero el grabado aleatorio tiene que significar otra cosa. Recordemos que esto es común en diferentes culturas y épocas (léase la romana). Sin echar a volar la imaginación en exceso y fuera de significados cultuales o astronómicos y bajo un punto de vista meramente arquitectónico, en el caso de las cazoletas de los pilares ¿no podrían haberse utilizado para un mejor asentamiento de una falsa cúpula?

RSS

TRANSLATE BY GOOGLE

Busca en Terrae Antiqvae

Recibe en tu correo los últimos artículos publicados en Terrae Antiqvae -Boletín Gratuito-

Enter your email:

Courtesy of FeedBurner

 

Donaciones

Terrae Antiqvae es una Red Social sin ánimo de lucro. Necesitamos tu apoyo para el mantenimiento del sitio. Apadrina esta Comunidad 

¡Gracias por tu ayuda!

Contacto con el editor:

Publicidad by Google

 

Lo más visto

Patrocinador: SMO Sistemas

Nuestro Canal de Vídeos en YouTube. ¡Suscríbete!

Síguenos en Redes Sociales: Facebook y Twitter

¡Gracias por visitarnos! ¡Bienvenid@!

Estadísticas desde 12 de noviembre de 2014.

Derechos de Autor:
Licencia de Creative Commons
Terrae Antiqvae® is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.

Información legal: Terrae Antiqvae® es Marca registrada por José Luis Santos Fernández. Marca nº 2.679.154 - Clase 41, Madrid, España. Reservados todos los Derechos. En Internet desde Julio de 2001.

Normas de la Comunidad (Aviso Legal):  Netiqueta - Términos de servicio

© 2024   Creado por José Luis Santos Fernández.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio

Usamos cookies propias y de terceros que entre otras cosas recogen datos sobre sus hábitos de navegación para mostrarle publicidad personalizada y realizar análisis de uso de nuestro sitio. Si continúa navegando consideramos que acepta su uso. OK Más información | Y más