He dedicado en mi sitio público un par de entradas a un asunto arqueológico medieval que me llamó mucho la atención cuando lo conocí este invierno.
Se trata de la enorme colección de cortezas de abedul de entre el s. XI y el XV con escritura (y dibujos) que los arqueólogos soviéticos de los años 50 descubrieron en distintos yacimientos de lo que fue la Rusia originaria: Novgorod, Smolensk, Moscú... y de otras regiones (Bielorrusia) que fueron pobladas desde fecha histórica temprana por los comerciantes escandinavos y los eslavos que dieron origen a la población rusa actual.
El asunto es interesante porque constituye una de las fuentes más importantes para el conocimiento de la antigua historia de estas regiones, de su lengua y de sus relaciones sociales y economía. Al parecer, la corteza de abedul era un material barato y reponible que se utilizó extensivamente para distintos tipos de comunicación escrita: documentación comercial, comunicación personal, aprendizaje o asuntos judiciales. El origen y desarrollo de la escritura cirílica pueden ser rastreados usando esta ingente documentación, así como el estado antiguo de otras lenguas (Eslavo de Iglesia antiguo, antiguo Noruego...) que se usan o usaron en la región.
Aunque en mis posts me centré en las cortezas que contenían
los dibujines de un niño de el Novgorod del s. XIII que en las tablillas se identifica como Onfim, y hasta me atreví
a corregir la interpretación "oficial" de uno de sus monigotes más elaborados, la verdad es que me quedé con ganas de saber más sobre el tema, teniendo en cuenta que mucha de la documentación sobre él estaba en ruso o en alemán, lenguas que no conozco, y que las traducciones automáticas del internet no ayudan a entender.
Por eso posteo este artículo, para ver si entre todos los miembros del grupo logramos dar a conocer a otros miembros de Terrae Antiquae este interesante tema de arqueología medieval.
Mi esperanza es que haya alguien entre los contertulios que pueda aportar el punto de vista de los rusos sobre el tema, pues tengo constancia de que no es un tema marginal en la enseñanza de la Historia de aquel maravilloso país.
¡Gracias!