La monumental fachada plateresca de la universidad más antigua que existe en España es sin lugar a dudas uno de los lugares más visitados por los turistas que llegan a Salamanca.Fuente:
Alfred López, Cuaderno de Historias | Noticias Yahoo.es, 4 de octubre de 2011
Muchos de ellos lo hacen para contemplar el exquisito arte con el que se decoró dicha fachada en el
siglo XVI (aunque la universidad en si data de tres siglos antes), aunque otros muchos se acercan arrastrados por la curiosidad de encontrar uno de los símbolos más característicos que hay escondido entre todas las piezas que la decoran.
Un sinfín de leyendas han corrido de boca en boca fomentando el reclamo turístico; todo un misterio alrededor de una extraña rana que posa sobre una calavera. Según cuentan lugareños y guías turísticos, aquel símbolo escondido
tenía que ser encontrado por aquellos estudiantes que querían aprobar sus exámenes; de no hallar la rana, no podrían doctorarse.Curiosamente, el afán por buscarla pasó de los universitarios a los viajeros que llegaban a Salamanca con ánimo de hacer turismo y, como si de una fuente donde se echa una moneda se tratase, buscaban la rana para tener suerte en la vida.
Después de quinientos años de incertidumbre, alrededor del simbolismo que escondía dicha rana, el catedrático
Benjamín García-Hernández ha dado con la solución al enigma escondido.
Bajo el curioso título de
'El desafío de la Rana de Salamanca: cuando la rana críe pelos', el profesor García-Hernández ha presentado un estudio en el que descifra los diferentes elementos que se encuentran en la fachada, entre ellos
tres calaveras que representan a los hijos de los Reyes Católicos fallecidos antes de la construcción de la misma (Isabel, María y Juan).
El cráneo con la rana posada sobre el cuero cabelludo pertenecería al
príncipe Juan, muerto en 1497. Según el autor del estudio,
"el conjunto de la rana y la calavera sobre la que se posa pretende mandar un mensaje iconográfico para burlar de esta manera a la inquisición".
La rana es conocida como
Parrita en honor al doctor Parra, que fue el médico que trató la enfermedad del vástago de los Reyes Católicos. El animal está ahí para mandar un mensaje al mundo que quiere comunicar que, a pesar de que el conjunto escultórico de la fachada pretende resucitar a los notables de la época, esto no es posible. Pese a los esfuerzos de la medicina, el príncipe Juan no volverá de entre los muertos.
Dicho mensaje fue una idea que provenía de un viejo
proverbio sefardí que, no se sabe por qué, no fue tallado e incluido bajo dicho elemento, causando así los diferentes puntos de vista respecto al verdadero significado del animal posando sobre tan insigne calavera, y convirtiéndola en uno de los principales lugares de destino y reclamo turístico del planeta.
Fuentes de consulta: elmundo / salmantinos