Michelangelo Merisi, más conocido como Caravaggio (1571-1610) ha s... Al parecer el retrato debió de ser un encargo del marqués
Vincenzo Giustiniani (1564-1637), coleccionista de arte e intelectual italiano. La obra está inventariada y descrita en su colección, pero se le pierde la pista en el siglo XIX. Según los expertos, esta pintura del genio precursor del barroco hay que datarla antes de 1600. Corresponde a la fase de transición de Caravaggio a su etapa de temática más religiosa. Tanto la autoría como su procedencia parecen seguras.
El cuadro, cuyo paradero se desconocía, apareció en mayo de 2010 entre las obras de un coleccionista español. Sobre este nuevo cuadro de Caravaggio se ha discutido mucho en la prensa italiana por la falta de acuerdo que hubo en un principio sobre la autoría y la época entre críticos e historiadores del arte. Desde el 17 junio el retrato de san Agustín se puede admirar, junto con otros once originales del pintor milanés, en una exposición temporal de la National Gallery de Ottawa (Canadá).
Caravaggio Michelangelo Merisi, más conocido como Caravaggio (1571-1610) ha sido uno de los pintores más influyentes de la historia. Actualmente es uno de los que más aceptación tienen entre el gran público. Las exposiciones que se han organizado con sus obras durante los últimos años, así como los lugares donde se encuentran habitualmente sus pinturas –especialmente en Roma-, atraen una gran cantidad de visitantes. Su vida fue corta, y su producción pictórica ronda las 70 piezas. Aún hay varias de sus obras en paradero desconocido.
Salvo en sus principios, Caravaggio produjo mayoritariamente pinturas religiosas. Sin embargo, a menudo escandalizaba y sus lienzos eran rechazados por sus clientes. Dos de los reproches habituales eran el realismo de sus figuras religiosas rozando el naturalismo, así como la elección de sus modelos entre gente de baja condición. En lugar de buscar bellas figuras etéreas para representar los actos y personajes de la Biblia, Caravaggio prefería escoger a sus modelos de entre el pueblo: prostitutas, chicos de la calle o mendigos posaron a menudo para los personajes de sus cuadros.