Amit Re'em, el arqueólogo encargado de la dirección de las excavaciones, ha señalado que "el descubrimiento de este baño, en un contexto sin edificios, atestigua la existencia de una industria agrícola de hace 2.000 años, posiblemente destinada a producir aceite o vino".
"Las leyes judías de purificación obligaban a estos trabajadores a lavarse", ha añadido. También puede ser la explicación del antiguo nombre del sitio: gat shemanim, que en hebreo significa "prensa de aceite".
El franciscano Francesco Patton y el arqueólogo amit Re'em sobre los restos de la iglesia bizantina.
El franciscano Francesco Patton, el custodio de Tierra Santa, ha señalado que "estas últimas excavaciones desarrolladas confirman la antigüedad de la memoria y la tradición cristianas conectadas con el lugar".
Otros hallazgos incluyen los restos de una desconocida iglesia bizantina del siglo VI, delicadamente ornamentada, sobre la que en época de las cruzadas se construyó un edificio más grande que sirvió como monasterio o como hospicio para los peregrinos cristianos. Esta construcción tenía numerosas estancias y sofisticados sistemas de canalización del agua.
Los arqueólogos han descubierto evidencias de la destrucción del sitio en el siglo XII, probablemente durante la conquista ayyubí en 1187, cuando Saladino tomó Jerusalén del reino cruzado y ordenó la destrucción de todas las iglesias de la ciudad. El sultán utilizó las piedras de estos templos para reforzar las murallas de la ciudad.
"Las excavaciones en Getsemaní son un excelente ejemplo de la investigación de Jerusalén en su máxima expresión, en la que varias tradiciones y creencias se combinan con arqueología y evidencia histórica", ha destacado el arqueólogo Amit Re'em. "Los restos arqueológicos recientemente descubiertos se incorporarán al centro de visitantes que se está construyendo en el sitio y se exhibirán a los turistas y peregrinos".
Fuentes: elespañol.es | diariovasco.com | 22 de diciembre de 2020