Mondeuse blanche, la vid del viñedo de Saboya . Wikimedia Commons
Algunas uvas que se cultivan hoy en Francia están relacionadas genéticamente con ciertas variedades de la vid de época medieval o incluso romana. Según el artículo publicado en
Nature Plants, los científicos lo descubrieron cuando analizaron el ADN de semillas de uva encontradas en asentamientos antiguos y medievales. En particular, resultó que una variedad romana que se cultivó en el siglo I d.C. era casi similar genéticamente a la vid moderna llamada
Savagnin, que se utiliza ahora para producir vino blanco. Significa que esa uva ha existido en su forma moderna durante al menos 900 años.
Se cree que
las uvas fueron domesticadas hace seis u ocho mil años en el territorio de países modernos como Georgia, Irán o Turquía. Desde allí el cultivo fue trasladado a Oriente Medio, y luego las uvas se extendieron en Egipto y Grecia.
En la península de los Apeninos, la elaboración del vino comenzó a desarrollarse en los siglos IX-VII a.C., y en la colonia griega Massalia, hoy la ciudad de Marsella en el sur de Francia, en el siglo VI a.C.
Sin embargo, solo en el umbral de nuestra época, la producción de vino en el sur de Francia llegó a adquirir proporciones considerables. En aquel tiempo, los romanos trajeron allí sus nuevas tecnologías, comenzaron a usar la propagación vegetativa y cultivar las uvas. Aunque los investigadores no puedan comparar las antiguas variedades de la vid con las modernas, algunos
opinan que las romanas todavía se cultivan en Europa. Después de la caída del Imperio Romano, la vinificación en Francia no desapareció, y en la Edad Media en las fuentes escritas surgieron nombres nuevos de vides. Sin embargo, hasta la fecha no se sabía si los enólogos franceses cultivaban las mismas uvas desde hace varios siglos o las nuevas variedades simplemente recibieron los nombres antiguos.
Las relaciones genéticos entre las uvas antiguas, medievales y modernas cultivadas en Francia. Las variedades romanas son de color naranja, las medievales de azul, y las modernas de blanco.
J.Ramos-Madrigal et al. / Nature Plants, 2019
Comparando el genoma de las uvas
Investigadores de ocho países, liderados por
Nathan Wales de la Universidad de York, Reino Unido, analizaron el genoma de la uva
Vitis vinifera. Se tomaron 28 semillas encontradas en diferentes partes de Francia, las cuales datan del año 510 a.C. hasta los 1200 d.C. En cuanto a los genomas de referencia, los autores utilizaron 783 variedades de la vid que se utiliza en la producción del vino (
Vitis vinifera), 112 especies de la vid silvestre (
Vitis vinifera sylvestris) y 11 tipos más.
Resultó que todas las variedades de uva, incluso las más antiguas, pertenecen a la variedad Vitis vinifera. Al mismo tiempo, el genoma de las vides medievales era casi idéntico al de las modernas. Por ejemplo, el genoma de un hueso que se data 1100 d.C. es similar al genoma de la variedad moderna Savagnin. Este tipo de uva ahora se cultiva en Francia y Alemania y se utiliza para producir el vino blanco.
Esto significa que el Savagnin se ha cultivado en su forma actual por lo menos 900 años. El genoma de otra vid moderna, Mondeuse Blanche, era casi similar al genoma del hueso, encontrado en el este de Francia, en el pueblo medieval. Esta semilla probablemente tenga más de 1000 años de edad.