La intervención en esta zona de La Alcudia se retomará en verano para presentar al visitante una estructura de fácil comprensión.
La Fundación Arqueológica La Alcudia va a retomar las excavaciones de las termas orientales romanas que cuentan con una de las estructuras más visibles y comprensibles para los visitantes del yacimiento donde apareció la Dama de Elche. El proyecto se abandonó en 2003 para dar prioridad a la excavación de la muralla situada ante el centro de interpretación de próxima apertura.

Vía: Diario de Información, 18 de mayo de 2008

Los trabajos realizados hasta 2003 sacaron a la luz diversas estancias de estas termas: la entrada al edificio, las letrinas, un vestíbulo con mosaico, el vestuario, una piscina y espacios relacionadas con las zonas fría, caliente y templada.

El equipo de excavaciones del yacimiento (formado por Rafael Ramos y Lorenzo Abad como directores científicos, y Alejandro Ramos y Mercedes Tendero como directores técnicos) va aprovechar la excavación docente que se realizará como cada verano con estudiantes de la Universidad de Alicante para relanzar el proyecto.

Paralelamente al inicio de esta actuación que se adelanta a la segunda quincena de agosto como consecuencia del inicio del nuevo curso académico, los directores técnicos llevarán a cabo la recogida de muestras para el estudio de la arquitectura y los materiales construcción (tipo de pavimentos, piedra, identificación de la cantera, etcétera) y la elaboración de planimetrías.

Con esta información, se redactará un proyecto inicial que debería servir para obtener apoyos, entiéndase financiación, para elaborar el definitivo que incluirá la finalización de la excavación de las termas mediante la contratación de personal y la conservación y consolidación de los restos, tarea esta última para la que se requiere la intervención de un arquitecto.

Los arqueólogos quieren ser optimistas y esperan que el trabajo, sus resultados y el apoyo de la fundación, la Administración autonómica y la patrocinadores privados permitan acometer el proyecto definitivo el próximo año.

El hallazgo de las termas orientales supuso la aparición de una estructura completa, la piscina, que hace muy comprensible al visitante el resto del conjunto, algo de lo que en ocasiones adolece el yacimiento debido al expolio de piedra que ha sufrido a lo largo de los siglos.

La excavación del conjunto debe ayudar a delimitar el recinto por el norte, verificar si el acceso es directo desde la calle o hay una sala intermedia, sacar a la luz el horno y clarificar las diferentes zonas.

Los arqueólogos consideran no menos importante encontrar información que ayude a conocer la evolución del edificio. Las termas son del siglo I, pero "en época tardía pensamos que pierden su función como espacio público termal", explica Mercedes tendero. Los arqueólogos no descartan incluso que esta nueva función estuviera relacionada con la basílica paleocristiana del siglo IV.

La existencia de un obispo da cuenta de la importancia de la ciudad en esa época. Más allá de esta hipótesis de trabajo, el proyecto demanda de la participación de un arquitecto que defina el alcance de la intervención en las estructuras y los materiales adecuados a la época para llevar a cabo esta actuación.

Los arqueólogos entienden que también se debe definir cómo se protegen algunos elementos, como los ladrillos cocidos del pavimento que ahora están cubiertos con plástico debido a que son fácilmente erosionables, y un sistema de viales que permita al visitante acceder a las termas sin provocar deterioro.