Foto: Alicia Canto, durante la conferencia impartida el pasado jueves en el Museo Romano. | J.M. ROMERO

ALICIA CANTO DE GREGORIO PROFESORA DE PREHISTORIA Y ARQUEOLOGÍA

La investigadora realza la figura de los dos gobernantes como patrocinadores de las láminas de Manuel de Villena.

Vía: JUAN SORIANO | Hoy.es, 11 de mayo de 2008

Carlos IV y Godoy siempre han tenido mala fama. Pero también hicieron muchas buenas acciones. Alicia Canto de Gregorio, profesora de Historia de la Universidad Autónoma de Madrid, ofreció el pasado jueves en el Museo Nacional de Arte Romano una conferencia que desveló la importancia de estos personajes en la arqueología emeritense.

- ¿Fueron Carlos IV y Godoy los grandes impulsores del patrimonio de Mérida?

- Creo que sin duda. Sólo existe un precedente en época de Fernando VI, que es el marqués de Valdeflores, quien vino a Mérida e hizo una serie de dibujos y alguna pequeña excavación en la zona del Teatro, pero forma parte de un viaje mayor en el marco del estudio de las antigüedades y continuó su recorrido por Extremadura. En cambio, la misión de Mérida es algo expresamente decidido y financiado por Carlos IV y Godoy, posiblemente con alguna influencia a favor del conde de Floridablanca y el conde de Campomanes, que por distintos motivos estaban interesados en las cuestiones de arqueología. Viene expresamente un presbítero, arqueólogo, antiguo marino y gran dibujante, que tenía recientemente la nacionalidad española, Manuel de Villena Moziño, quien está en Mérida cuatro años. Hizo excavaciones en diferentes lugares, en el Teatro, el Foro Provincial, y sobre todo en el Arco el Arco de Trajano, entonces llamado de Santiago, donde se da cuenta de que tiene mucha parte enterrada. Libera la zona para hacer el perfil concreto y descubre el enlosado inferior. El propio Carlos IV, cuando va hacia Sevilla por Extremadura, para en Badajoz en casa de Godoy y después para en Mérida a ver todas aquellas antigüedades que le habían sido presentadas a través de los dibujos de Villena.

- ¿En esta empresa tuvo que ver el hecho de que Godoy fuera extremeño?

- Creo que desde luego, sin duda. De hecho, no hay constancia de muchas visitas anteriores de reyes a esta zona. Pero también había influido el conde de Campomanes, que había hecho bastante por Extremadura con la creación de una Audiencia específica extremeña y se había interesado por las antigüedades y las había dejado recogidas como presidente de la Mesta. Pero creo que el que Godoy fuera extremeño influyó muchísimo en la predisposición de Carlos IV para ordenar esta misión.

- ¿Está hoy reconocida como se merece la labor de Carlos IV y Godoy sobre el fomento de la arqueología emeritense?

- En el año 2001, cuando terminé esta investigación y tuve la oportunidad de contar con el Museo Romano y con la Asociación de Amigos del Museo, sobre todo de Carmen Gasset, para exponer las láminas de Villena, no pude encontrar bibliografía, ni siquiera entre los historiadores de Moderna y Contemporánea, que hablara de las cuestiones de antigüedades, arqueología y cultura clásica de Carlos IV y Godoy. Por lo tanto, es una labor de reivindicación, porque ha empezado hace seis o siete años. Pero en la bibliografía reciente va calando. Ahora la gente ya es consciente del maltrato histórico que han sufrido por la propaganda de Napoleón y de Fernando VII tanto Carlos IV como Godoy, que no fueron como se les presentó sin que se pudieran defender. Hay mucho que agradecerles, trabajos e iniciativas muy modernas, que empezaron y que luego quedaron paradas en seco con la llegada de Fernando VII.

- ¿Se sabe qué impresión se llevó el rey?

- Supongo que estupenda. Nadie que vea las antigüedades de Mérida se va defraudado.