Los terrenos de Can Fradera, donde se encuentran los yacimientos protegidos con lonas, ayer. Foto: ÁLVARO MONGE
Un grupo de arqueólogos de la Generalitat ha descubierto restos de la época romana en los terrenos de Can Fradera, donde se construirá la futura estación Badalona Centre de la línea 2 de metro. El hallazgo se produjo cuando los profesionales realizaban las catas arqueológicas previstas en el proyecto de ampliación de la línea de metro. La futura estación estaba prevista para finales del año que viene, pero el nuevo yacimiento puede afectar este plazo.
Vía:
DAVID PLACER, BADALONA/El Periódico.com, 24 de abril de 2008
El Departament d'Obres Públiques de la Generalitat ha garantizado que los trabajos del túnel de la L-2, en su fase final, no serán afectados por estas catas, puesto que el yacimiento se ubica en los terrenos de la futura estación y no interfiere en el trazado del túnel.
La Generalitat ha nombrado a un grupo de 24 arqueólogos que evaluarán los restos para determinar su valor y el tipo de tratamiento que deberían tener. No obstante, se sospecha que no se trata de vestigios importantes, ya que el lugar se encuentra fuera del antiguo enclave romano donde se desarrollaron las obras civiles más destacadas de la época.
Hasta ahora, los equipos encargados de las catas han detectado dos yacimientos de unos 10 metros de largo cada uno, que han sido protegidos con lonas para impedir su deterioro por factores ambientales.
PLAZA AFECTADA
Aunque los restos no afectarán la construcción del túnel, sí tendrá consecuencias en el ritmo de las obras en Can Fradera, donde está prevista, además de la estación del metro, una plaza con zona verde, un párking y un edificio singular. Los ingenieros han detenido temporalmente los trabajos en la zona del yacimiento en espera de la evaluación de los arqueólogos, que prevén determinar el valor de la obra la próxima semana.
Los vecinos y comerciantes de la zona temen que el hallazgo pueda repercutir en el ritmo de las obras, que aún tienen cortado un tramo de la calle de Francesc Macià, una de las vías comerciales más importantes de la ciudad.
DOS AÑOS DE CIERRE
La ampliación de la L-2 ha sufrido varios retrasos durante los últimos meses. Los técnicos explicaron que en el terreno hallaron piedras y rocas que no esperaban y que complicaron la perforación. Los comerciantes han llegado a pedir al ayuntamiento compensaciones económicas por las pérdidas que han sufrido desde el cierre de la calle, en enero del 2006.
Algunos locales también denunciaron la aparición de grietas en algunas fachadas de la calle y hubo que apuntalar una casa por riesgo de desplome.
La futura estación de Badalona Centre unirá en un futuro la L-2 con la prolongación de la L-1.