Vía: canada.greekreporter.com | Avvoula | 21 de abril de 2012 (Traducción: G.C.C. para Terrae Antiqvae)

Puede sonar increíble, pero un científico griego-canadiense ha declarado que los antiguos griegos pudieron haber llegado a América años antes que el navegante español Colón lo hiciera.

El investigador de textos sobre el Egeo, el Dr. Minas Tsikritsis (foto a la izquierda) afirma que él ha identificado y demostrado, mediante programas informáticos, que en el texto de Plutarco "De facie in orbe lunae", en los párrafos 941A-942, se desarrolla una realidad histórica olvidada, la cual ha sido hasta ahora eludida por muchos investigadores.

En el estudio, él indica que los griegos prehistóricos sabían que "al oeste de las tres islas y al noroeste de Gran Bretaña" había un "gran continente". Hace dos años, otro académico, el profesor I. Mariolakos, identificó ese gran continente, rodeado por un gran océano, como la América del Norte de hoy en día.

El Dr. Tsikritsis afirma que, "incluso antes de la época de Cristóbal Colón, hubo una comunicación que se inició durante la época minoica y se prolongó hasta los tiempos helenísticos. El propósito de estos viajes durante la Edad del Bronce estaba relacionado con el comercio y el transporte de cobre puro desde el Lago Superior de Canadá".

Según sus conclusiones, parece que después de los primeros comerciantes minoicos, los micénicos continuaron los viajes, y, según lo informado por Plutarco, ellos enviaron a Hércules a revitalizar la presencia del elemento griego, que había sido disminuida por la mezcla continua con los lugareños. Más tarde, durante la Edad de Hierro, el interés por la región declinó, y, hasta la época helenística, permaneció sólo como una tradición ceremonial convencional. Así que, cada treinta años, algunos barcos fueron enviados a las zonas que siguieron adorando de Cronos con el fin de renovar al personal sacerdotal.

El antiguo texto de Plutarco afirma que el coordinador del diálogo, Lambrias, pide a la cartaginesa Sylla narrar una vez más una historia que él había oído de los sirvientes del templo de Cronos en Cartago. La historia fue contada originalmente por un extranjero que visitaba el templo y que venía del gran continente.

De acuerdo con Tsikritsis, quien analizó los datos con la ayuda de un programa informático especial, "la información que se menciona en el texto confirma la descripción de un viaje en el 86 d.C., desde Canadá hasta Cartago". Los resultados los resume a continuación el propio Tsikritsis:

1. La revelación del viaje determina correctamente la distancia de Gran Bretaña a la isla de Ogygia, con un barco que navega con remos durante cinco días (880 km).

2. Se menciona un gran territorio continental en el área en la cual había tres islas (Groenlandia, la isla de Baffin y Terranova) que tenía la misma distancia, desde el noroeste de Gran Bretaña (Fig. 1).

3. Se especifica que en la misma latitud encontramos la entrada del Golfo de San Lorenzo y el Mar Caspio, uno hecho del que nos damos cuenta si ampliamos una línea recta (Fig. 1).

4. Se afirma correctamente que el Golfo de San Lorenzo es un poco más grande que el Lago Maeotis, el Mar de Azov de hoy en día (Fig. 2). Se menciona que la Costa del Golfo estaba habitada por los griegos desde tiempos muy antiguos, y, tras la expedición del micénico Hércules, posiblemente durante el siglo XV a.C., el elemento griego fue revitalizado después de que llegara a un punto cercano a la extinción debido a la constante mezcla con los lugareños.

(Es obvio que Hércules no fue acompañado sólo por Iolaus, sino que fue más bien una expedición de cientos de griegos que cambiaron demográficamente la zona del Golfo de San Lorenzo, la cual ellos habitaban).

5. Se determina un periodo de 30 años después de que el viaje comenzó: cuando el planeta Cronos se elevó de conformidad con Tauro. Pruebas astronómicas confirman que en el norte la latitud era 47º durante el siglo I d.C.; ese período coincide con el final de mayo del año 86 d. C.

6. Cuando el viaje de regreso a casa comenzó, se quedaron durante tres meses en la isla de Groenlandia, en el norte (60º N), donde el sol se pone sólo una hora durante el solsticio de verano, entre el 9/6 y 9/7. Esta definición confirma que la isla de Groenlandia se debe identificar con el inframundo, donde Cronos había sido enterrado en una cueva y estaba siendo allí custodiado por Zeus.

7. La razón de estos largos viajes durante la Edad del Bronce está documentada por el cobre puro, el cual se encuentra en grandes cantidades en la región alrededor del Lago Superior y la isla Royale, ambas ubicadas en Canadá. Desde esta zona, cerca de 50.000 toneladas de cobre fueron extraídos entre el 2400 y 1200 a.C.

8. Durante la época de Plutarco, como él mismo afirma, ellos no llevaron cobre, sino copas de oro y urnas, en cuyo interior se guardaban las provisiones para el viaje.

9. Por último, se sabe que en la antigüedad los oráculos eran centros donde se guardaba las crónicas de los conocimientos geográficos, y por consiguiente ellos dieron consejos acerca de la futura colonización. Por lo tanto, es aceptable que Plutarco, que fue sacerdote en el Oráculo de Delfos después del 86 d.C., tuviera este conocimiento.

10. Parece que el viaje de regreso a casa se hizo desde el norte; partiendo desde Canadá fueron a Groenlandia (isla de Cronos), y luego llegaron a Islandia y Gran Bretaña. Una confirmación de esta ruta es la estación-isla que aún lleva el nombre de Mykines, la isla más al oeste de las Islas Feroe.

Finalmente, la investigación de Tsikritsis afirma que un viaje se hizo desde Canadá hasta Cartago en el 86 d.C., y que los minoicos y otros antiguos griegos habían llegado a América del Norte antes que Colón.

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Como vemos, estamos ante una noticia que no deja de tener algunos aspectos interesantes y curiosos, y en esa medida es por la que la traigo a colación, pero es evidente que el grado de especulación que arrastra la interpretación que se nos ofrece es notable.

Hay que recordar que ya el propio Dr. Minas Tsikritsis anunció hace un año el descubrimiento de un interesante artefacto de época minoica que funcionaba como una especie de computadora (ver post aquí) para predecir la hora solar, los eclipses y la latitud, entre otras virtudes. Una noticia que trascendió ampliamente (sobre todo en los medios griegos), pero que posteriormente nada más se supo. En este enlace se puede ver una descripción de su funcionamiento (aunque está en griego actual puede utilizarse Google traductor para hacerse una idea de lo que se dice).

Mecanismo minoico

Tal parece que el Dr. Minas Tsikritsis le gusta moverse por las zonas más enigmáticas de la historia, máxime en aquellas que se prestan a la especulación más amplia y libre (y sin aportar mayor documentación), lo que supone que haya que ver sus propuestas con el debido interés (si es que lo tienen), pero asimismo con un sumo recelo crítico.