Imagen facilitada por la Universidad del País Vasco del canto encontrado en la cueva vizcaína de Axlor.

Fuente: El Mundo.es | EFE | 1 de diciembre de 2013

Un pequeño canto hallado en los 70 en la cueva de Axlor, Vizcaya  (derecha) con una sencilla equis grabada por un neandertal ha contribuido ahora, más de 40 años después de su descubrimiento, a avivar con fuerza el debate sobre la capacidad artística de esta especie, gracias a un estudio de la UPV-EHU.

El trabajo, elaborado por el profesor titular del departamento de Geografía, Prehistoria y  Arqueología de la Universidad del País Vasco, Marcos García-Díez (izquierda), el catedrático Ignacio Barandiaran  (derecha) y la profesora Blanca Ochoa (abajo), defiende que el "comportamiento gráfico" no es una característica asociada únicamente al Homo sapiens, como se pensaba hasta ahora sino que también es propio de otras especies humanas anteriores, especialmente del neandertal.

El artículo, que ha sido publicado en la prestigiosa revista científica estadounidense 'Journal of Antropological Research', incide asimismo en el actual debate científico sobre si nuestros "primos" neandertales podrían ser los autores de algunas formas simbólicas muy sencillas, con edades situadas en torno a los 41.000 años de antigüedad, pintadas en varias cuevas europeas.

Según explica uno de los autores del estudio, Marcos García-Díez, este debate es de gran relevancia porque da idea de la complejidad de la mente neandertal y porque el comportamiento artístico forma parte del simbolismo, vinculado a su vez al origen de la música, el lenguaje y los enterramientos, entre otros aspectos culturales que consideramos "modernos" y que "tradicionalmente" han sido atribuidos en exclusiva al Homo sapiens.

Un "paradigma" que, en opinión de García-Díez, "está empezando a verse fracturado" en los últimos años por el estudio de piezas como la piedra de Axlor, un canto de arenisca de unos seis centímetros de diámetro, recuperado por el antropólogo José Miguel de Barandiaran en una cueva de Dima (Vizcaya) y revisado ahora por el grupo de Prehistoria de la UPV-EHU.

La piedra, de factura neandertal y de forma esférica en sus orígenes, fue hallada en un nivel de hace al menos 48.000 años. Su autor le dio un golpe para crear una superficie plana y grabar en ella, a base de pequeños golpes, dos líneas que se cruzan.

Fotografía facilitada por la Universidad del País Vasco. EFE.

"Esto -explica García-Díez- es lo que dentro del mundo del neandertal se conoce como comportamiento gráfico. No es arte figurativo en ningún momento. No representa una figura humana o animal sino que son siempre composiciones de líneas", aclara el investigador, quien cree que el grafismo neandertal podría responder a "cuestiones de reorganización social" e "identidad colectiva".

El catedrático de Prehistoria de la Universidad de Valencia, Valentín Villaverde (derecha), comparte esta tesis sobre la capacidad de los neandertales para el "grafismo", algo que ve "perfectamente posible", pues el canto de Axlor es sólo "una entre otras piezas halladas en contextos cronológicos similares" que tienen también "sistemas de cruces y líneas paralelas".

Villaverde considera que, con este tipo de evidencias, "hoy en día tiene que asumirse que la capacidad de expresión simbólica en todas sus manifestaciones posibles, como los enterramientos y el lenguaje también forma parte de los neandertales".

Un paso más allá va el profesor de Antropología de la Universidad de Nuevo México (EEUU), Lawrence Guy Straus (izquierda), al considerar que "los primeros pasos del arte fueron dados por los neandertales y los Homo sapiens más antiguos, e incluso antes por el Homo heidelbergensis".

Guy Straus constata que "marcar objetos" como piedras o huesos con puntos, rayas o círculos "fue un comportamiento esporádico entre humanos tempranos, anteriores a hace 40.000. Algo que no se generalizó, porque no había mucha gente con quienes compartir o a quienes enseñar en una situación de demografía muy baja", concreta.

El miembro del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) Joseba Ríos (derecha) es más crítico con evidencias como el canto de Axlor, en el que reconoce "una serie de huellas de manipulación intencional que sin embargo él no entiende que deban ser interpretadas necesariamente como una representación simbólica".

"Es cierto que el comportamiento simbólico en los neandertales está acreditado, porque hay evidencias bastante sólidas de que practicaban enterramientos y hay yacimientos en los que incluso se han encontrado objetos de adorno", explica Ríos, quien no obstante aclara que "la manifestación física de esas capacidades simbólicas es siempre muy elusiva" en esta especie, lo que le hace ser "escéptico" respecto a ellas.

Asimismo, el profesor de la UPV, Álvaro Arrizabalaga (izquierda), recuerda que "en Europa hay una media docena de objetos curiosos y llamativos" asociados a neandertales y a grupos incluso anteriores, entre los que, a su juicio, el canto de Axlor sería uno más".

"Se trata de piezas que probablemente requieren una reflexión pero que todavía no marcan una tendencia irreversible" sobre el comportamiento gráfico neandertal. "Aún falta por lo menos otra media docena de objetos peculiares en contextos indiscutibles y en circunstancias incontestables para empezar a hablar de esto con un poquito de seguridad", insiste.

"Yo voy a ser el primero que, en cuanto tenga una prueba incontestable de que los neandertales hacían este tipo de cosas, me voy a subir muy contento a ese tren. Pero ahora mismo creo sinceramente que todavía estamos a distancia de que llegue ese momento", concluye Arrizabalaga.