Foto: Arriba, una de las espadas conservadas en el Museo Numantino. Abajo, la que se subasta en internet.
Una espada idéntica a las de los yacimientos del Alto Duero puede adquirirse en eBay. Alfredo Jimeno sostiene que "tiene muchas posibilidades" de proceder de Soria.
Vía:
J. SOLÉ, Soria | El Mundo.es, 12 de octubre de 2008
Espada celtíbera, probablemente perteneciente a alguno de los yacimientos sorianos del Alto Duero, con características idénticas a algunas piezas expuestas en el Museo Numantino y datada en el siglo III antes de Cristo. Precio de salida: 2.400 euros. Esto es lo que puede encontrarse desde el pasado miércoles en la conocida casa de subastas on-line E-bay.
El vendedor, afincado en la localidad lituana de Kaunas, defiende su autenticidad y ofrece toda clase de facilidades para el pago y envío seguro de la misma.
Tras varios contactos a través del correo electrónico, y siempre refiriéndose a una tercera persona a quien compró esta antigüedad, asegura que procede de algún poblado celtíbero del centro de España, pero en ningún momento llega a precisar el lugar.
Desgraciadamente tampoco puede acreditar la ubicación exacta al carecer de un certificado oficial, que además legitima la procedencia legal de la pieza, como sí ocurre con otras piezas que se subastan en esta página web.
El arqueólogo soriano Alfredo Jimeno no duda de que se trata de un ejemplo claro de las llamadas 'espadas de antenas atrofiadas', tipología característica de la llamada Subfase IIB del Alto Duero. Esto no confirma por completo que pueda proceder de alguno de los castros sorianos, si bien como aseguró Jimeno, "tiene muchas posibilidades".
La denominada Subfase IIB del Alto Duero se refiere a un determinado periodo del siglo tercero antes de Cristo delimitado por un tipo de armamento y de elementos únicos encontrados en distintos ajuares funerarios. Las espadas de antenas totalmente atrofiadas forman parte de este tipo de armamento.
Las señas identitarias de estas armas son principalmente las dos volutas que adornan el pomo, es decir la parte opuesta a la punta. Además, otros rasgos que se repiten son la hoja pistiliforme con acanaladuras y que la guarda, la parte que protege la mano, es recta. Las dimensiones de este tipo de espada suelen oscilar entre 36 y 41 centímetros.
Jimeno afirma que esta situación es "demasiado frecuente, y debe ser competencia de las autoridades determinar la legalidad de esa venta".
Por su parte, el directo del Museo Numantino, Elías Teres, se muestra sorprendido al ver las fotografías que se mostraban en la página web, aunque advirtió el mal estado de conservación que presenta esta pieza.
No es este el único material de estas características que puede encontrarse en la red. Lo más habitual suelen ser las monedas, procedentes de colecciones privadas y que suelen acompañarse de certificados. Esto es posible porque en el caso de la numismática existen registros muy extensos que permiten datar y clasificar la pieza.
También objetos procedentes de ajuares funerarios descubiertos en el siglo XIX, como joyas o broches. El precio de estas piezas oscila dependiendo de diversos factores, encontrándose monedas que cuestan unos 500 o 600 euros, hasta restos de cerámicas que sobrepasan ampliamente los 3.000 euros.