Una de las arqueólogas muestra al presidente de la Diputación la vasija semienterrada en el interior de la cueva.

Fuente: lamarinaplaza.com | 10 de septiembre de 2015

Una enorme vasija de unos 5.000 años de antigüedad. Es el hallazgo que ha dado a conocer este jueves el Museo Arqueológico Provincial de Alicante (MARQ). El recipiente, “de grandes dimensiones”, ha sido localizado por su equipo arqueológico en la Cova del Randero, en Pedreguer, y “en perfecto estado de conservación”, según informa la Diputación de Alicante, titular del museo.

Para examinar in situ el formidable hallazgo, el presidente provincial, César Sánchez, ha visitado la cueva acompañado por el alcalde de Pedreguer, Sergi Ferrús, el diputado de Cultura, César Augusto Asencio, y el concejal de Cultura del ayuntamiento, Blai Server. El descubrimiento es “excepcional”, según los términos que emplean los arqueólogos, por varios motivos, que confluyen en que “se considera fundamental para la obtención de datos sobre el cuarto milenio a. C. en la fachada mediterránea”.

Por un lado, destaca por sus dimensiones (70 centímetros de altura y 50 de diámetro en la boca) y por haber aparecido “intacto”. También, porque parece probar que la cueva estaba habitada en aquella lejana época. El vaso hallado estaba enterrado en una fosa que se hizo exprofeso y la cercanía de un agujero de poste hace pensar en un área de habitación humana.

La investigación, orientada a la delimitación funcional de los diferentes espacios que integran la cueva, ha descubierto varias estancias: un ámbito principal o sala de entrada donde se protegía al ganado, una galería central que por los restos hallados podría haber estado dedicada a la cría de animales y un espacio más recóndito, o sala interior, reservado a los humanos.

Las autoridades examinan algunas de las piezas encontradas en la cueva.

Según los análisis del manto estalagmítico, el equipo arqueológico ha determinado que esta última estancia en la que convivían las personas permaneció inaccesible durante la Edad de Bronce. El verano pasado consiguieron abrir el acceso y comprobar la ordenación, el buen estado de la estratigrafía y la adecuación del registro material con la temporalidad neolítica.

El presidente del gobierno provincial, ha destacado que, durante la campaña de este año, que llega a su novena edición y que concluirá mañana 11 de septiembre, los técnicos han descubierto este vaso que sitúa a la Cova del Randero como uno de los principales yacimientos para el conocimiento de la vida cotidiana en el IV milenio a.C.

En el proyecto de investigación, además del MARQ, está implicado el Ayuntamiento de Pedreguer que proporciona alojamiento y apoyo al equipo de voluntarios formados en distintas universidades españolas y europeas. El presidente de la Diputación ha matizado que estos hallazgos impulsan la continuación de los trabajos en este yacimiento que se ha convertido en una referencia para el conocimiento del Neolítico en las tierras de la orilla occidental del Mediterráneo.

Sánchez también resalta “la importancia de este excepcional hallazgo y ha animado a seguir trabajando en esta línea para poner en valor nuestro patrimonio histórico y conocer las civilizaciones que han pasado por aquí”.

El primer recipiente de ese tamaño en una cueva

Los trabajos, dirigidos a tres bandas por el director de Exposiciones del MARQ, Jorge Soler, y las también arqueólogas del museo, Consuelo Roca de Togores y Olga Gómez, están centrados ahora en extraer con todas las garantías de conservación e investigación este recipiente que es el primero de ese tamaño que se ha descubierto entero en el interior de una cueva.