Fuente: elcorreodeburgos.com | 17 de julio de 2016

Resulta imposible, a la vez que improbable predecir el futuro, aunque en determinadas ocasiones la realidad puede decirnos qué podremos encontrar en los años venideros. Eso es lo que sucede en Atapuerca (Burgos). La sierra de los secretos ahonda esta campaña en desvelar parte de esos capítulos de su futuro y lo hace mirando con celo a un yacimiento que entienden “será clave”. Cueva Fantasma sale a la palestra después de que en la anterior campaña de excavaciones ya se hablase de este lugar como uno de los más importantes del futuro de la cuna de la humanidad europea.

Como su nombre, Cueva Fantasma es todo un enigma. Si bien en la campaña anterior los trabajos se centraron en en iniciar una prospección en una zona con una antigüedad de unos 300.000 años, en esta se han sentado las bases de cara al inicio de las primeras prospecciones en el año 2017. Tras obtener los resultados positivos de la perforación, los responsables de Atapuerca son conscientes de que que esta cavidad contiene fósiles a mucha profundidad y que la cronología puede superar el millón de años llegando a ser muy similar a la de Sima del Elefante ya que ambos yacimientos son prácticamente “hermanos”.

Así lo cree José María Bermúdez de Castro  (izquierda), uno de los codirectores de los yacimientos de Atapuerca, que vaticina un futuro prometedor para un yacimiento que aún está en pañales y al que habrán de sacarle “ellos o los que les sigan” todo el jugo posible. En declaraciones a Ical, el responsable de Gran Dolina explicó que en la actualidad se trata de un yacimiento que se encuentra al aire libre en base a una cantera abierta que ha permitido hacer una primera exploración.

De cara a los próximos meses, será necesario solicitar un permiso a la Junta de Castilla y León para acondicionar el yacimiento en aras a comenzar el trabajo en el mismo, por lo que se prevé iniciar los trabajos “con suerte” el próximo año. Por el momento, se sabe que Cueva Mayor cuenta con diez o doce metros con sedimentos en el interior de la cueva, por lo que uno de los primeros pasos será el el de examinar los mismos para determinar su antigüedad en base a estudios paleomagnéticos.

La hermana de Sima del Elefante

Los que conocen bien los entresijos de Atapuerca están más que convencidos de que Cueva de Fantasma pronto será conocida entre los especialistas. Su semejanza con la Sima del Elefante, el yacimiento en el que se han hallado restos humanos de cronologías africanas (las más antiguas de Europa), así lo atestiguan. Se podría decir incluso, que es la hermana pequeña del conocido yacimiento porque las topografías dicen que “ambas son muy similares con sondeos positivos”, aclaró Bermúdez.

“Sabemos que hay yacimiento y que se trata de un buen yacimiento”, aseveró el paleontólogo, que avisa de que la siguiente fase pasa por un sondeo arqueológico en el que se prepare la estructura con un borde de cemento para que el sitio quede bien sujetado y el anclaje de un sistema de poleas que permita sacar todos los sedimentos a estudio. “Esto es lo más complicado, pero hay que hacerlo”, añadió.

“Hay que tener en cuenta que Atapuerca es como un queso de Gruyère, con cavidades vacías y otras rellenas de sedimentos, y en este pensamos que hay mucho futuro por lo que vemos en superficie y lo que nos dijo el primer sondeo”, remarcó.

Eduald Carbonell, co-director de las excavaciones de Atapuerca en la cueva del Fantasma, tras la primera limpieza del terreno. Los sedimentos sobre los que está sentado representan la parte más alta del yacimiento, que dejó casi colmatada la cavidad. Una primera aproximación realizada con los hallazgos en superficie permiten suponer que estos sedimentos tienen una antigüedad de unos 300.000 años.

A la sombra de la Gran Dolina

Pese a que podemos cifrar el número de yacimientos en ocho, la sierra de Atapuerca tiene un número indeterminado de yacimientos del Pleistoceno y Holoceno, que cubren el último millón y medio de años. Como si de un libro se tratase, ofrecen la información del mapa evolutivo de todo el continente. Una quimera impensable hace apenas medio siglo.

Uno de esos “nuevos” yacimientos tiene nombre misterioso y se encuentra a la sombra de la prolífica Gran Dolina. “Conocemos el yacimiento desde hace muchos años, pero no tenemos ni tiempo ni medios para atenderlos todos. Hay que ir poco a poco...”, explicó el ex director del CENIEH, que sitúa la cueva en apenas 30 metros de Dolina.

“Ahora estamos intentado conocer todos los alrededores de los yacimientos que se están excavando para tenerlos controlados y saber lo que hay. Hay que dejar planteado este proyecto”, sentenció.

Niveles africanos

Para abrir boca, Bermúdez de Castro avanza que la parte superior de Cueva Fantasma tiene la misma antigüedad que la Sima de los Huesos con unos 400.000 años, por lo que estiman que “más hacia abajo podremos hallar niveles de la antigüedad de Sima del Elefante, que desgraciadamente no está dando todo lo que queremos pese al esfuerzo.. pero es que las excavaciones son así. A veces un yacimiento da mucho y otro cuesta más”, añadió.

Los expertos estiman que los restos más antiguos que pueden aparecer en Cueva Fantasma superan el millón y medio de años y puedan llegar a 1,8 millones equivalentes a los niveles africanos. Algo que ayudaría, “y mucho”, al estudio de esa especie hallada en Sima del Elefante, aún por determinar, y que, pese a los esfuerzos que se realizan cada campaña solo han sacado a la luz “unos pocos restos fósiles”. “Sería el espaldarazo a un fin de ciclo perfecto”, finalizó.