Imperio Romano

El Imperio romano fue una etapa de la civilización romana en la Antigüedad clásica, posterior a la República romana y caracterizada por una forma de gobierno autocrática. El nacimiento del Imperio viene precedido por la expansión de su capital, Roma, que extendió su control en torno al mar Mediterráneo. Bajo la etapa imperial los dominios de Roma siguieron aumentando hasta llegar a su máxima extensión durante el reinado de Trajano, momento en que abarcaba desde el océano Atlántico al oeste hasta las orillas del mar Caspio, el mar Rojo y el golfo Pérsico al este, y desde el desierto del Sahara al sur hasta las tierras boscosas a orillas de los ríos Rin y Danubio y la frontera con Caledonia al norte. Su superficie máxima estimada sería de unos 6,5 millones de km².

El término es la traducción de la expresión latina Imperium Romanum, que significa literalmente «El Dominio de Roma». Polibio fue uno de los primeros hombres en documentar la expansión de Roma aún como República. Durante los casi tres siglos anteriores al gobierno del primer emperador, César Augusto, Roma había adquirido mediante numerosos conflictos bélicos grandes extensiones de territorio que fueron divididos en provincias gobernadas directamente por propretores y procónsules, elegidos anualmente por sorteo entre los senadores que habían sido pretores o cónsules el año anterior.

Interesante vídeo que explica la técnica de construcción de las calzadas romanas

Uno de los elementos que hicieron posible la civilización romana fueron sus avanzadas vías de comunicación, una red de 100.000 kilómetros de calzadas.

Esas vías llegaron a comunicar todo el Imperio romano desde la antigua Hispania hasta Asia Menor, y desde Britania hasta el norte de África. Sin duda, fue uno de los elementos más revolucionarios e innovadores de la antigüedad. La construcción de estas calzadas era tan buena y estaba tan bien diseñada que aún hoy se conservan algunas de ellas, a pesar de todo el tiempo transcurrido.

Hace unas semanas Isaac Moreno Gallo publicó un vídeo muy bien elaborado en el que explica brevemente, en sólo dos minutos y medio, cómo era la técnica de construcción de estas calzadas. Una técnica que incluía una forma de evitar el encharcamiento de las vías por la lluvia y medidas, recientemente descubiertas, para evitar que la naturaleza invadiese la calzada.