Lucus Asturum, "Su ubicación tradicional en Lugo de Llanera no ha hallado hasta la fecha confirmación arqueológica completa."
Narciso Santos Yanguas, "Asturias, los astures y la administración romana durante el Alto Imperio" 2009
"Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo."
Erich Richthofen. Nuevos estudios épicos medievales. 1970
Plano de Oviedo (1870) realizado por F. Coello de Portugal (1822-1898). Ingeniero militar. El más famoso de los cartógrafos españoles del s. XIX; su crédito y calidad se basan principalmente en el Atlas de España y de sus posesiones de Ultramar.
LUCUS ASTURUM
Ptolomeo en su Geographica, (II, 6, 28-37) es el primero que menciona el enclave de Lucus Asturum. Se le considera como el principal centro administrativo romano en el territorio norte del convento de los astures, en la Asturia Trasmontana. El Anónimo de Rávena en su Cosmographia también lo menciona como encalve como Luco Asturum.
Este territorio estuvo habitado por los luggones y fue centro neurálgico y cruce de caminos entre las ciudades romanas de Lugo, Gijón, León y Astorga.
Se desconoce con seguridad el emplazamiento real de Lucus Asturum, la mayoría de los investigadores y estudiosos lo emplazan en las cercanías de Lugo de Llanera, donde ha aparecido una ara dedicada a los Lares Viales. Las diferentes excavaciones arqueológicas realizadas en el entorno de Santa María de Lugo en Llanera no han sido fructíferas. Lucus Asturum se resiste a ser encontrado y carecemos de certeza científica para señalar nuevas campañas con alguna posibilidad de éxito.
Lucus Asturum parece haber sido destruido de forma que ni sus cimientos pueden ser reconocidos en la actualidad por los investigadores.
¿Qué ejercito, y con que medios, pudo conseguir la destrucción total del principal enclave de los luggones?
LUCUS
Un "lucus", en latín, es un término que, originalmente, determinaba un claro en la espesura del bosque en el cual habitaba un dios. Este término evolucionó y posteriormente se empleó también para nombrar a los templos y ciudades que, emplazados en un bosque ya existente, se edificaban como santuario a una divinidad elegida.
La forma latina lucus acuña los límites de un concepto sagrado. Lucus es la latinización del concepto que proviene del sánscrito loka, como definición de espacios o estados identificados dentro del mundo invisible, lo sagrado, lo espiritual, la comunicación con la divinidad, los onfhalos, y los oráculos.
De loka derivan otras muchas palabras que participan de alguno de estos conceptos sánscritos. Así, por ejemplo, locus, que es lugar; lucus, que es bosque sagrado, o logia, cuya traducción como lugar de reunión, sólo es parcial, pues tiene más parentesco con loqui, hablar, y con locus, lugar; y en todo caso es una síntesis de los dos: "lugar para hablar". La palabra que en la actualidad nos puede acercar al verdadero sentido del término original es la profana "locutorio", que hoy unifica ambos significados: "lugar para hablar".
La palabra lucus es la que, en la Roma del siglo I a.C., designaba el lugar donde se producía el contacto con el dios y que, en su origen, representaba un claro en el interior del bosque que, bajo la bóveda celeste y circundado por los árboles que imaginariamente la sostienen, producía la intima conversación con dios.
El lucus, por lo tanto, es el antecedente natural de un templo, la imagen prototípica del templo construido por el hombre como lugar sagrado, a imagen del lucus en el bosque, en medio de la selva.
Lucus Asturum pertenece a un grupo muy especial de enclaves de origen romano que reciben el nombre sagrado, Lucus Augusti y Lucus Feroniae son otras dos ciudades que pueden permitirnos alcanzar alguna conclusión sobre como podía ser el enclave astur.
Además para avanzar en esta tarea podemos suponer que Lucus Asturum debería de estar muy relacionada en su génesis con los principales enclaves con los que sabemos estaba comunicada: Lucus Augusti, Legio, Astúrica Augusta y por su cronología, Bracara Augusta.
Propongo que estos enclaves compartieron con Lucus Asturum un mismo equipo técnico encargado de su proyecto urbano, y que por lo tanto todas ellas poseen soluciones y recursos similares, y que pueden ser reconocidos como elementos urbanos de los diferentes asentamientos.
Partiendo entonces de estas referencias: una fundación de carácter sagrado y relacionado con los principales enclaves del noroeste peninsular, patrocinados por Augusto, podremos plantear las siguientes hipótesis sobre las características urbanas de Lucus Asturum.
Doce argumentos para reconocer la ciudad sagrada de los Luggones.
1) El enclave está emplazado en lugar favorable, sobre un promontorio.
2) El enclave era de nueva planta y de acuerdo con el urbanismo romano.
3) La geometría determinaba el proyecto urbano del enclave.
4) Los caminos de acceso se relacionaban con las vías principales de comunicación del territorio circundante y los enclaves principales de los territorios vecinos.
5) Los caminos de acceso se relacionan con las vías urbanas interiores.
6) El enclave contaba con obras de ingeniería para el suministro de agua potable.
7) El enclave contaba con edificios de culto, al menos uno principal y destacado.
8) El enclave contaba con lugares de reunión en su interior.
9) El encalve contaba con edificios de culto en su perímetro exterior.
10) El enclave contaba con edificios de espectáculos y lugares de ejercicio en su perímetro exterior.
11) Durante el bajo imperio se levantan nuevas murallas que atienden a una nueva geometría.
12) Durante la edad media se mantienen como capitales políticas y religiosas del territorio al que pertenecen.
El lector ya habrá sacado sus propias conclusiones sobre el emplazamiento que en el territorio de la Asturia Trasmontana cumple, y con creces, las doce condiciones anteriores.
Lucus Asturum solo pudo emplazarse en el "lugar en alto" que hoy recibe el nombre de Oviedo, el llamado como "casco antiguo de Oviedo".
¿Un Oviedo anterior a San Vicente?
•-Ruinas del Oviedo primitirvo. José Mª Fernández Buelta - 1948•-Excavaciones en el Oviedo antíguo. José Mª Fernández Buelta - 1950
No es la primera vez que un documento señala la identificación Lucus Asturum con Oviedo:
"En este aspecto tiene especial interés constatar el descubrimiento de la invención de la sede episcopal de Lucus Asturum identificandola con Oviedo, ya claro en los apuntes de Juan Antonio. Éste analiza una serie de documentos falsos señalando la identificación Lucus Asturum-Oviedo como el móvil principal de don Pelayo."
(Pelayo, fue obispo de Oviedo, elegido el año 1101, depuesto en 1130. Falleció el 28 de enero de 1153.)
"Historia, fueros y actitudes políticas: Mayans y la historiografía del 18" Antonio Mestre, Antonio Mestre Antonio Mestre Sanchís
"El hipercriticismo de diversos autores ha cargado las tintas contra la labor historiográfica de Pelayo, tachándole de falsario, fabuloso e interpolador, de forma no siempre justificada. La obra que ha hecho más célebre al obispo Pelayo ha sido el Libro de los Testamentos donde el prelado ovetense recogió todos los documentos relacionados con la situación jurídica, la historia y las posesiones de su diócesis." Enciclopedia de Oviedo.
“Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo”.
Erich Richthofen. Nuevos estudios épicos medievales - Página 211
Editorial Gredos, 1970. Procedente de la Universidad de California
Propongo recorrer, uno por uno, los doce argumentos que nos permitirán reconocer el emplazamiento de Lucus Asturum, y contrastarlos con la hipótesis del lugar de Oviedo como la ciudad sagrada de los luggones.
VER CONCLUSION. VIAJE A LUCUS ASTURUM . ovetum.blogspot.com/
Vista del Canto de San Pedro (Lugo de Llanera) cortado por la vía del ferrocaril.
(Diccionario Histórico de Asturias. Ed. La Nueva España)
Hola, amigo Carlos:
Tras dejar atrás el largo puente de mayo me encuentro con este post tuyo, el cual, ciertamente, no deja de resultar sorprendente e interesante por la hipótesis que ofreces, al decir que la antigua Lucus Asturum corresponde a la ciudad de Oviedo.
No obstante, tras leer tus razonamientos y cotejar algunos textos, la cuestión no deja, desde luego, de suscitar muchas dudas para poder contemplarla con suficiente firmeza, máxime dado el estado actual, escasamente parco, que las prospecciones arqueológicas -en un sitio y otro- han aportado tanto en la dirección que apuntas como en la opuesta
Las primeras reflexiones que surgen son: si Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo, entonces ¿qué era el enclave que situamos en Lugo de Llanera? ¿Un simple poblado, más o menos extenso, que evolucionó a partir de un castro prerromano (Canto de San Pedro)? ¿Y bajo qué nombre lo conceptuamos? ¿También con el de Lucus Asturum dado que resulta muy complicado dejar de lado el topónimo de Lucus-Lugo?
Para poder salvar parcialmente tu hipótesis (y el hecho absurdo de dos Lucus Asturum tan próximos) tendríamos que contemplar que el ámbito territorial de Lucus Asturum llegaba a englobar el enclave de Oviedo (a pesar de estar a unos diez Km de distancia). Andando el tiempo, este enclave ovetense asumiría cierta importancia, diferenciándose sobremanera del enclave territorial de lo que hoy conocemos como Lugo de Llanera, y adquiriendo el nombre de Ovetao-Oveto-Ovetum-Oviedo (sobre el origen del nombre, veáse el enlace), quedando, en cualquier caso, ambos enclaves diferenciados.
Es decir: no es que Oviedo evolucionara a partir de un enclave concreto llamado como tal o específicamente Lucus Asturum, sino que sería un enclave más de ese amplio y disperso territorio administrativo llamado en la antigüedad romana Lucus Asturum (Lugo de Llanera), y que adquirió la suficiente preponderancia como para constituirse en una civitas con nombre diferenciado.
La hipótesis de que Lucus Asturum (Lugo de Llanera) englobara asimismo al enclave de Oviedo no se presenta tan descabellada habida cuenta de que tanto Carmen Fernández Ochoa (“que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve meno...“) como Narciso Santos Yanguas (“El espacio geográfico de esta civitas abarcaría, al parecer, varios cientos de kilómetros cuadrados, teniendo su límite con Gigia y Paelontium“. pag. 527 de su último libro “Asturias, los astures y la administración romana durante el Alto Imperio” ) permiten deducirlo de sus afirmaciones.
Con todo, Santos Yanguas ni siquiera se plantea estas consideraciones, a pesar de que aduzca -tal como citas- que no se sepa todavía a ciencia cierta cuál seria el emplazamiento exacto de este enclave de Lucus Asturum.
Sin embargo, todo el capítulo que dedica Santos Yanguas a Lucus Asturum no deja de traslucir que su inclinación sigue -como la de tantos otros a lo largo del tiempo- por situarla en la actual Lugo de Llanera, y sin perjuicio de que admita un amplio espacio de influencia territorial de esta civitas del pasado.
Para mí hay ciertos argumentos que indican claramente que cuando se habla en los textos antiguos de Lucus Asturum es con referencia distinta al enclave de Oviedo.
Por ejemplo, cuando dice Santos Yanguas (pág. 5269:
“Junto a ello, que se trataría de una ciudad amurallada nos viene confirmado más de siglo y medio antes en la donación de Alfonso III a la iglesia de Oviedo el 20 de enero del 905: Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos, donde el recinto amurallado de la ciudad se atribuye a Santa María como propietaria”.
En este texto de la época de Alfonso III no sólo se está haciendo referencia a un lugar distinto del de Oviedo (Lugu - Lucus Asturum), sino que incluso se cita con el mismo nombre a la iglesia parroquial que históricamente se sitúa en Lucus Asturum - Lugo de Llanera.
Pero hay más:
Luis Alfonso de Carvallo (“Antiguedades y cosas memorables del Principado de Asturias“, 1695) suponía que Lucus Asturum había sido destruida en tiempos de la invasión islámica, pues en una donación de Ordoño II a la iglesia de Oviedo, fechada en el año 921, se incluía: “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”. Es decir, este Lugo es evidente que es distinto del Ovetao u Oveto de la época.
Incluso cuando Santos Yaguas habla de la hipotética sede episcopal en Lucus Asturum, podemos recordar al respecto el también hipotético traslado de esa diócesis en Lugo de Llanera a Oviedo en tiempos de Fruela I. Esto es, aun cuando se admita que esta hipótesis del traslado es fruto de la invención o manipulación del obispo Don Pelayo (cuestión siempre debatida), el hecho sólo de hablar del traslado ya implica que estamos ante dos enclaves distintos y diferenciados, salvo que se diga que también Lucus Asturum es invención de este obispo lo cual resultaría excesivo.
En fin, amigo Carlos, dudo mucho que se pueda sostener que Lucus Asturum es Oviedo (salvo que la arqueología en un futuro proporcione datos que lo permitan). Los doce argumentos que propones los veo, más que como prueba de ese aserto, como buenos argumentos para justificar el porqué Oviedo se constituyó en un enclave notorio en la antigüedad romana y medieval de Asturias.
Amigo Guillermo. Agradezco su comentario, es una completa puesta al día del estado de la cuestión respecto a Lucus Asturum.
En esta primera contestación trataré el tema sobre la validez científica del emplazamiento de Lucus Asturum en Llanera.
Usted ya ha aportado la opinión de dos destacados investigadores que al día de hoy establecen: Carmen Fernández Ochoa:“que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“. Narciso Santos Yanguas:“El espacio geográfico de esta civitas abarcaría, al parecer, varios cientos de kilómetros cuadrados, teniendo su límite con Gigia y Paelontium“.
Concretando: se establece que Lucus Asturum son núcleos dispersos en varios cientos de km2..
Hasta hoy se cree que el príncipal elemento que soporta el emplazamiento cercano a Santa María es la lápida a los lares Viales, y próximo al cerro llamado El Canto de San Pedro, donde José Manuel González identificó un castro.
Sobre la lápida a los lares Viales, recordar que su presencia es propia de un enclave en cruce de caminos, más que de un oppidum, y que la dimensión del cerro de S. Pedro es tan pequeña que no alcanza ni a considerarse su planimetría.
Todo sumado ayuda a establecer sobre Lucus Asturum de manera científica que: "Su ubicación tradicional en Lugo de Llanera no ha hallado hasta la fecha confirmación arqueológica completa." Narciso Santos Yanguas.
Parece que, salvo interpretaciones voluntariosas, la localización de Lucus Asturum en algún lugar concreto no tiene aval científico al día de hoy.
Para ampliar un poco la desoreintación recordar que podemos establecer de tres Santa Marias de Lugo.
Una en Llanera, otra en Lugo (Galicia) y una tercera en Oviedo, siendo Oviedo Luco Asturum.
Y que por ello “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”, puede referirse a una de las tres.
¿Es Santa Maria de Oviedo la iglesia destruida en la ciudad de Lugo?
Lo que hoy si se puede afirmar es que "Ciuitatem Lugo" no se refiere a ningún lugar conocido de Llanera.
Por ello ese texto de Ordoño II no puede referirse a Santa María de Llanera.
Bien, expuesta la actual falta de concreción a la hora de situar el enclave de Lucus Asturum por medios científicos. Y observando que el problema de dispersa en cientos de km2. es necesario recordar que Lucus Asturum era un enclave amurallado y calificado como ciudad:
"Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es anterior al obispo D. Pelayo, lo confirma como consta en documentos del Monasterio de S. Vicente en los que se dice «porta civitatis» o puerta de la ciudad de Lugo, «antiquissima civitas» o «civitas in diebus sempiternis», es decir: antiquísima ciudad o ciudad eterna."
Vicente José González García. «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Asturias». El Basilisco, número 8, julio-diciembre 1979
Donación de Ordoño II a la iglesia de Oviedo, fechada en el año 921, se incluía: “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”.
Donación de Alfonso III a la iglesia de Oviedo el 20 de enero del 905: "Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos".
Y tan detallado era su emplazamiento que ya Ptolomeo lo fijó en sus coordenadas:
Lucus Asturum, 11º, 45º.
Y que determina un lugar cercano, muy cercano a Oviedo.
Las fuentes antíguas son las que nos permiten pensar que la razón que establece que Lucus Asturum son núcleos dispersos en varios cientos de km2. es inconsistente.
Lucus Asturum, esté donde esté emplazado, es un lugar concreto, con coordenadas concretas, y donde deben existir cimentaciones de los muros de sus antíguas murallas.
Lápida de Lugo de Llanera dedicada a los Lares Viales
ARAM LARIBV(S) VIALIBV(S)
Amigo Carlos:
Creo que es necesario tener en cuenta los aspectos siguientes:
1º Las iglesias bajo la advocación de Santa María que usted apunta, distintas de la de Lugo de Llanera, no permiten, a mi juicio, que induzcan a mayor confusión.
Las posibles iglesias con el nombre de Santa María en la actual provincia de Lugo deben de ser desechadas. Sólo por su amplia distancia geográfica respecto de Lucus Asturum así lo exige.
Luego tenemos en Oviedo tres posibles candidatas:
a) La iglesia de Santa María (de Oviedo), hoy desaparecida, y que se situaba dentro del ámbito en que se hallaba la de San Salvador, la de San Tirso y la de Santa Leocadia. Pero esta iglesia de Santa María es de tiempos de Alfonso II, levantada junto con el conjunto de los edificios anteriormente citados.
b) La iglesia de Santa María de la Corte, la cual comparte medianeras con el claustro y edificio del monasterio de San Vicente —hoy Museo Arqueológico de Asturias—, al que perteneció, y con la iglesia del monasterio de benedictinas de San Pelayo. Contigua a su cabecera se encuentra la catedral, según reza el enlace a la Wikipedia. Esta iglesia hunde su pasado, pues, en el templo de San Vicente y no ha lugar a ir más atrás en el tiempo.
2º Debemos admitir -siguiendo su hipótesis- que, si Lucus Asturum es Oviedo, en algún momento de su historia debió cambiar hacia este nombre (Ovetao-Oveto-Ovetum-Oviedo). Pero…
a) No hace falta ser experto en toponimia para ver que la evolución del nombre Lucus Asturum se presenta como imposible para que finalizara como Oviedo.
b) En el documento fundacional del convento de San Vicente, que describe la llegada de Máximo y Fromestano en el 761 al lugar, se dice "quod dicunt Oueto" y también “in isto loco iam dicto Oueto“.
Esto es: al menos a partir de ese año (761) el nombre que hace referencia a Oviedo ya está establecido. De donde se deduce que resulta muy contradictorio que las tales donaciones de Alfonso III y Ordoño II hagan alusión a una iglesia llamada Santa María de Lugo (ó de Lugu ó Luco). Para ese tiempo lo correcto habría sido referirse a ella como Santa Maria, a secas, o Santa María de Oueto (u Oveto, Ovetao, etc.), pero dejando de lado esa alusión a Lugo, pues no es una iglesia que se dona heredada de tiempos pasados (que pudiera mantener ese topónimo), sino que son de creación nueva en tiempos de Alfonso II.
Argumenta usted en su conclusión al respecto: “Lo que hoy sí se puede afirmar es que "Ciuitatem Lugo" no se refiere a ningún lugar conocido de Llanera”. Pero estará usted conmigo que tampoco a Oviedo, y sí más probable a Lugo de Llanera, según le expongo más arriba.
3º Le insito, además, en el último argumento que le expuse (y al cual no me ha respondido) y que vuelvo a reproducir:
a) Incluso cuando Santos Yaguas habla de la hipotética sede episcopal en Lucus Asturum, podemos recordar al respecto el también hipotético traslado de esa diócesis en Lugo de Llanera a Oviedo en tiempos de Fruela I. Esto es, aun cuando se admita que esta hipótesis del traslado es fruto de la invención o manipulación del obispo D. Pelayo (cuestión siempre debatida), el hecho sólo de hablar del traslado ya implica que estamos ante dos enclaves distintos y diferenciados, salvo que se diga que también Lucus Asturum es invención de este obispo lo cual resultaría excesivo.
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica>>) en la que primeramente había sido establecida”.
Es decir, la exención que se buscaba de la diócesis de Oviedo (respecto de la Primada de Toledo) con base a los orígenes que aquélla tenia en Lucus Asturum (subrayando su traslado, y lo de “primeramente”, por lo demás) permiten concluir que estamos hablando de dos enclaves distintos.
4º Lo que sí puedo aceptarle, como es obvio, es lo que se ha constatado hasta ahora por los arqueólogos y especialistas en el asunto:
a) La imposible localización a ciencia cierta de Lucus Asturum, y que el territorio de influencia de esta civitas, de carácter abierto, abarcaba un amplio espacio de decenas (mejor que de cientos) Kms.2 en su alrededor.
b) También le concedo que la lápida de los Lares Viales hallada en Lugo de Llanera no se presenta como un elemento suficiente para concluir que estemos ante un oppidum o núcleo fortificado. No obstante, sí indica, de un lado, que los ejes de comunicación de la zona tenían a Lucus Asturum como un referente importante; y, por otro, que no deja ser casual e igualmente notorio que, por ahora, se haya hallado en ese lugar y no en Oviedo una lápida de estas características.
c) Desechar el castro de Canto de San Pedro por su escasa entidad planimétrica puede invitar a ello, pero no hay que apurarse tanto por el momento, pues todavía no se han llevado a cabo excavaciones sistemáticas en el mismo y no sabemos lo que podrían deparar. Hasta el momento sólo consta -como apunta Santos Yanguas- como elementos defensivos dos terrazas que rodean la colina de cuatro metros de ancho “que al parecer hay que identificar con las murallas (y fosos), así como con otros elementos defensivos del poblado.”
d) Con todo, ciertamente, el no haberse encontrado restos claros de las murallas, o de sus cimientos, de este enclave de Lucus Asturm es un problema no menor que plantea muchos interrogantes. Ocurre aquí como con el enclave de Lancia (León), donde tampoco se han hallado restos de muralla en el lugar que se sitúa por ahora (Villasabariego-Mansilla de las Mulas). Es posible que, del mismo que se estima que las murallas de Lancia pudieron ser arrasadas por los Suevos en el S. VI, se pueda contemplar la posibilidad de que las murallas de Lucus Asturum fueran arrasadas también en algún momento conflictivo de su historia.
En cualquier caso, es evidente que mientras no se lleven a cabo excavaciones más exhaustivas en la zona sólo cabe especular al respecto. Y no olvidemos que Carmen Fernández Ochoa“apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“.
e) Respecto a la coordenadas que proporciona Ptolomeo, es verdad que Oviedo se encuentra muy cerca de las mismas, pero según leo en este artículo de Diviciaco, y en este otro, (publicados en Celtiberia.net), según sus operaciones, dichas coordenadas le remiten, con validez, al área de Lugo de Llanera (no al área de Oviedo, que, con diez Km. de distancia desde ese punto, excede, si no me equivoco en los cálculos, del rango de 5 minutos con los que trabajaba Ptolomeo).
En fin, amigo Carlos, ya digo, no veo que pueda asumirse o contemplarse por el momento con firmeza, dados los datos que tenemos encima de la mesa, que Lucus Asturum era la ciudad de Oviedo.
Guillermo.
No es que no quiera contestarle a todas sus cuestiones. Cosa que haré encantado.
Es que prefiero establecer un orden en los temas, ya que mi argumentación tiene una secuencia lógica, (al menos yo lo creo), y espero hacerme entender en parte a través de esa secuencia.
Creo necesario establecer una base de acuerdo, al menos parcial, para poder discutir sobre aspectos más complejos.
Por eso le preguntaba, y parece que asiente, si está usted de acuerdo con:
1) En Llanera y sus alrededores próximos no existe un yacimiento con entidad para ser reconocido como Lucus Asturum.
2) El enclave de Lucus Asturum, era según las fuentes, una ciudad amurallada.
Sentada esta base paso a argumentar otro tema interesante. Las coordenadas de Ptolomeo para Lucus Asturum.
45º 11º Lucus Asturum (45,0000º , 11,0000º)
Según Tomás:
Latitud real = 36º + (45,0000º - 36º) x 91,354 / 111,11 = 43,3997º = 43º 23,98'
Longitud real = |( (11,0000º - 8,2500º) x Cos(45,0000º) x (0,21117 x 45,0000º + 78,379) / (Cos(43,3997º) x 111,325) ) - 7,8670º| = 5,7543º = 5º 45,26'
Según el sigpac:
Lugo de Llanera: 43º 26' - 5º 49'
Lugones: 43º 24' - 5º 48'
Lugarín: 43º 24' - 5º 50'
Oviedo: 43º 21' - 5º 50'
Y según http://www.sitiosespana.com/paginas/coordenadas.htm
Oviedo 43.22 N 5.50 O
De acuerdo con los datos puros, Lugones sería el mejor candidato para ser la capital de los luggones: Lucus Asturum.
Y Oviedo sería igual candidato que Lugo de Llanera. Pero cualquiera de los tres sería lugar válido según Ptolomeo por sus pequeñas diferencias.
Sumo entonces, si a usted le parece, a los puntos 1 y 2 un tercero:
3) Según las coordenadas de Ptolomeo, Lucus Asturum puede estar emplazado en un área entre Lugo de Llanera y Oviedo (ambos incluidos) y con centro en Lugones.
Guillermo, dejaré para más adelante argumentos sobre como Lucus Asturum pasa a denominarse como Ovetum.
De momento he procurado presentar hechos comprobables.
Los 1), 2) y 3) anteriores.
Paso a presentar el 4)
4) En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
Todos estos estudios y noticias permiten asegurar que el enclave de Oviedo tuvo un pasado romano, y que en el entorno determinado dentro la imagen superior, ningún otro lugar posee tales valores arqueológicos.
La ciudad de Oviedo es el emplazamiento más fértil en elementos romanos: numismática, elementos urbanos, arquitectónicos, dentro del territorio de su entorno.
Es verdad que por si solos estos cuatro puntos no determinan que Oviedo fuera Lucus Asturum, pero ese paso debe ser dado más adelante.
De momento he querido establecer unos axiomas válidos para ambos, y así poder establecer un método axiomático-deductivo posterior.
En realidad las fórmulas que utilicé para transformar las coordenadas de Ptolomeo proceden de las tablas de Martínez Hombre y Montero Vítores, que están escaladas entre los 36º de Rodas y los 45º Lucus Asturum como referencia septentrional, escalando las diferencias desde, precisamente, el emplazamiento de la desaparecida iglesia de Sta Mª de Lugo, destruída en la guerra civil. Por eso no se pueden usar esas fórmulas, o las tablas, para argumentar sobre la poible posición de Lucus Asturum ya que partimos de la base de que estaba en Sta. María de Lugo.
La distancia con Oviedo es, desde luego, muy pequeña, aunque yo no creo que Oviedo fuese Lucus Asturum, como propone D. Carlos Sánchez-Montana, pues la documentación medieval menciona muy tempranamente y de forma diferenciada tanto la ciudad de Ovetao como la de Lugo, con su iglesia, como ha argumentado D. Guillermo Caso, con referencias a varios documentos, a los que podemos añadir otro: el Testamento de Alfonso II, de autenticidad incuestionable: El Testamento de Alfonso II (P. Floriano) R. I D . E . A donde se menciona la ciudad de Ovetdao en el año 812, pero aún debía de ser más antigua pues se alude al nacimiento en ella del rey Alfonso II.
Una de las propuestas de Sánchez Montana trae a colación la localidad de Lugones, y habría que reflexionar sobre los diversos lugares del concejo, o aledaños, con ese nombre; por ejemplo cerca de la iglesia de Santa María de Bendones está el pueblo de Lloxu-Lúgico, mencionado en la documentación medieval como Lugigo(921) y Logicum(1083), ¿tendrán algo que ver estos nombres con la mansio Lugisonis del Anónimo de Rávena (Rav.321.1) como sugería Tovar? aunque de ser así el relato del Ravennate estaría alterado en el orden de las estaciones.
Tomás. sobre las coordenadas de Ptolomeo, ni quito ni pongo. Los datos que validan a Llanera también validan a Oviedo.
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5) La ciudad de Ovetum, y fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
El principal:
Hofmann, Johann Jacob (1635-1706): Lexicon Universale, Historiam Sacram Et Profanam Omnis aevi, omniumque Gentium; Chronologiam Ad Haec Usque Tempora; Geographiam Et Veteris Et Novi Orbis; Principum Per Omnes Terras Familiarum [...] Genealogiam; Tum Mythologiam, Ritus, Caerimonias, Omnemque Veterum Antiquitatem [...]; Virorum [...] Celebrium Enarrationem [...]; Praeterea Animalium, Plantarum, Metallorum, Lapidum, Gemmarum, Nomina, Naturas, Vires Explanans. - Editio Absolutissima [...] Auctior [...]. - Leiden: Jacob. Hackius, Cornel. Boutesteyn, Petr. Vander Aa, & Jord. Luchtmans, 1698. 2° - T. 1: Literas A, B, C, continens. [6] Bl., 1072 S.; Kupfertit. - T. 2: Literas D, E, F, G, H, I, K, L, continens. [1] Bl., 900 S. - T. 3: Literas M, N, O, P, Q, continens. [1] Bl., 994 S. - T. 4: Literas R, S, T, V, X, Y, Z, continens. [1] Bl., CXXVI, 743, 116 S.- Satzspiegel 32,1 x 17,3 cm - Signatur: XN 9739. http://www.uni-mannheim.de/mateo/camenaref/hofmann.html
Donde el término OVETUM figura: OVETUM
urbs Legionis, insignis.
Asturiae Ovetensis caput, ad Astam fluv. quo reliquiae Gothorum confugêre, 16. leuc. Hispan. a Legione urb. in Circium, 6. ab ora maris Cantabrici in Meridiem, 18. ab Asturica in Boream, Episcopalis sub Archiepiscopo Castellano. Alias regni Ovetani caput, et regia sedes, cum post obitum Roderici, Gothorum Regis ultimi, Christiani a Mauris expulsi, et in Asturias compacti, Principem Pelagium elegerunt, A. C. 717. qui Ovetanum regnum instituit, quod Legionensis, A. C. 913. fermentum fuit; Tum enim Ordonnus 2. Regis Legion. titulum sumpsit. Hispanis Oviedo, hîc Concilium, A. C. 878. et 901. page 506, image: s0506a
Este autor, lejos de la corte española y de la influencia asturiana, detalla el carácter romano de Oviedo, su proyecto, y su importancia religiosa y política.
Este Ovetum, en el territorio de los luggones, es un acontecimiento, de ser real es algo no explicado todavía.
Lo curioso es que los estudios y noticias del punto 4) anterior, ofrecen un soporte arqueológico muy completo a esta descripción: Una ciudad romana capital de los astures.
No es la primera vez que alguien señala la identificación Lucus Asturum con Oviedo, pero es un planteamiento muy minoritario y anatematizado.
La existencia de opiniones a favor no deben ser tenidas en cuenta para la demostración de la validez histórica. Pero son antecedentes que enmarcan la historia de la ciudad.
"En este aspecto tiene especial interés constatar el descubrimiento de la invención de la sede episcopal de Lucus Asturum identificándola con Oviedo, ya claro en los apuntes de Juan Antonio. Éste analiza una serie de documentos falsos señalando la identificación Lucus Asturum-Oviedo como el móvil principal de don Pelayo."
"Historia, fueros y actitudes políticas: Mayans y la historiografía del 18" Antonio Mestre, Antonio Mestre Antonio Mestre Sanchís
“Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo”.
Erich Richthofen. Nuevos estudios épicos medievales - Página 211
Editorial Gredos, 1970. Procedente de la Universidad de California
Con los anteriores cinco puntos he intentado elevar la favorable posición de Oviedo, como Ovetum romano, para merecer un análisis especifico de sus características y validar este enclave como el Lucus Asturum perdido.
El pasado romano de Oviedo crece cada día que pasa en un territorio donde Ptolomeo sitúa a la ciudad amurallada de Lucus Asturum, y donde ningún otro enclave compite en la importancia de sus hallazgos.
De eso trata el fondo del artículo: seleccionar 12 características comunes a los cuatro principales enclaves romanos de N.O., y comprobar su adecuación al enclave romano de Ovetum.
Si el proceso deductivo es positivo, luego Oviedo-Ovetum sería Lucus Asturum.
Creo que a lo largo del texto se presentan argumentos basados en las enseñanzas expuestas en “Tipología De La Edificación: Estructura Del Espacio Antrópico.” (Celeste Ediciones, S.A.) 1995. de los profesores Gian Luigi Maffei y Gianfranco Caniggia, que permiten pensar que Ovetum es la ciudad descrita en el “Lexicon Universale” por Hofmann.
Sin embargo la pregunta que primero plantea esta argumentación es la ya expresada más arriba por Guillermo.
¿Como se establece el cambio en el topónimo desde Lucus Asturum a Oviedo?
Intentaré en la próxima postal desarrollar este aspecto tan importante.
6)Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
La principal desconfianza sobre la hipótesis, que determina que bajo las calles de Oviedo se encuentran las de Lucus Asturum, es la inexistencia de una continuidad en la toponimia.
Para una gran mayoría de los estudiosos Lucus Asturum y Oviedo son encalves diferentes y sus nombres demuestran esta diversidad.
Lucus originó Lugo, y Oviedo proviene de Ovetum, diferentes etimologías para emplazamientos diferentes.
Si los aspectos anteriores, que señalan a Oviedo y su casco antiguo, como el lugar de mayor índice de restos romanos del territorio de los luggones, no fuera suficiente, debemos de demostrar que el nombre de Oviedo tiene su origen en el enclave de Lucus Asturum.
Comencemos por el principio, Lucus Asturum, capital de los luggones, fue una ciudad amurallada. Si analizamos la transformación de los toponímicos de los enclaves romanos de época antigua podemos alcanzar alguna regla sencilla: Lucus Augusti como Lugo, Asturica Augusta como Astorga, Bracara Augusta como Braga, Colonia Iulia Augusta Faventia Paterna Barcino como Barcelona, o Lutetia Parisiorum como París, son varios de los ejemplos en los que podemos basar la evolución del nombre de la capital de los luggones.
Según esta regla a Lucus Asturum le podían corresponder dos topónimos posibles, o bien Lugo, a imagen del Lugo gallego, o bien Astorga, a imagen de la ciudad leonesa.
El primer nombre le corresponde por el tipo de enclave que se configuró en su génesis (lucus), el segundo por la gens a quién correspondía (astur).
El problema para la aplicación de esta sencilla regla toponímica fue que ambos nombres se encontraban asignados, Lugo y Astorga ya correspondían a ciudades importantes del N.O. Las capitales de sus respectivos conventos.
La muy extendida opinión que asigna a Lucus Asturum el emplazamiento de Lugo de Llanera se basa en esa sencilla regla lingüística. Hoy tenemos la certeza científica que en el lugar de Lugo y sus proximidades no existe evidencia alguna de la antigua ciudad de los luggones. Lugo de Llanera no corresponde a Lucus Asturum. Y posiblemente este topónimo, como el del enclave próximo de Lugones y el de Lugarín, son herederos de los pobladores dueños de este territorio, el pueblo de los luggones pertenecientes a la gens astur.
Son varios los autores que reniegan del pasado romano de Oviedo y del claro significado antiguo de su nombre.
Mi agradecimiento al brillante trabajo de Francisco Escobar García publicado en el año 1974: “El topónimo Oviedo ¿es un teónimo?” donde se establecen consideraciones muy razonadas y documentadas para poder comprender que el significado del topónimo de la capital de los asturianos es de carácter religioso. Algo que nadie se atrevería a discutir del nombre Lucus Asturum.
Desde la publicación del trabajo de Escobar García han transcurrido treinta y cinco años, y en este tiempo no ha alcanzado la difusión que se merece. Muchos de los estudiosos e investigadores de la historia de la ciudad ovetense no lo han considerado en su verdadero valor. Sus conclusiones solo han podido conseguir un mejor conocimiento del público a través de la red.
Basándome en su documentado ensayo pretendo demostrar que la forma Oviedo corresponde en su significado al mismo que el de Lucus Asturum. El enclave sagrado de los luggonnes del convento astur.
Lucus Asturum pertenece a un grupo muy especial de enclaves de origen romano que reciben el nombre sagrado de lucus. Lucus Augusti y Lucus Feroniae son otras dos ciudades que pueden permitirnos alcanzar alguna conclusión sobre como podía ser el enclave astur.
La palabra lucus, en la Roma del siglo I a.C., designaba el lugar donde se producía el contacto con el dios y que, en su origen, representaba un claro en el interior del bosque, bajo la bóveda celeste, y circundado por los árboles que imaginariamente la sostienen, favorecía la intima conversación con dios.
El lucus, por lo tanto, es el antecedente natural de un templo, la imagen prototípica del “lugar sagrado” construido por el hombre a imagen del lucus en el bosque, en medio de la naturaleza, la selva. Y Lucus Asturum era el lugar donde se levantaba el templo del principal dios de los astures, su capital religiosa.
Del urbanismo de Lucus Asturum poco nos cuentan las fuentes antiguas, pero su origen imperial puede hacernos considerar que en su interior guardaba un templo al dios Júpiter.
Escribe Vitruvio: “Los solares para los santuarios de los dioses tutelares de la ciudad y para Júpiter, Juno y Minerva elíjanse en un lugar suficientemente elevado, desde donde pueda observarse la mayor parte de la ciudad.”
Son varias las catedrales de Europa que han sido construidas sobre las cimentaciones de un templo dedicado a Júpiter. ( Santiago de Compostela, París, Tarragona).
A esta característica del urbanismo romano debemos de sumar la consideración que en la religión astur tenía el dios Júpiter, identificado como la divinidad principal del panteón indígena, Dies pater.
Escribe Escobar García: Podemos asegurar sobre la base de las diferentes fuentes antiguas consultadas que Lucus Asturum poseía un valor religioso destacado por contar entre sus muros, y en lugar principal, un templo dedicado al dios principal de los astures, y que este no podía ser otro que una representación del Júpiter romano, y que era identificado con el Dis pater indígena.
Un enclave astur nombrado como un “Lucus” debía de contar con la presencia de un templo dedicado a Júpiter.
De la fortaleza de las antiguas representaciones de Júpiter en el territorio astur aún existen lugares dedicados con presencía en la toponimia y en otros nombres asturianos:
Por otra parte, y tal como establece Escobar García, el topónimo Oviedo posee rasgos suficientes, y hasta quizás sobrados, para identificar al lugar de Oviedo con un lugar dedicado a Júpiter: CONCLUSION:
Es posible que la antigua ciudad romana de Lucus Asturum sufriera un cambio natural en su toponimia en época tardo-romana.
Que de forma simultanea a los cambios de los enclaves próximos, que derivaron el nombre de las ciudades hacía la búsqueda de nuevas formas más concisas con una clara “vulgarización” del topónimo, Lucus Asturum buscó su propio camino para su nueva identidad.
DIS PATER
La especial circunstancia de Lucus Asturum, muy próxima a las capitales de Luco y Asturica, propietarias por jerarquía del nombre que también compartía, hizo necesario identificar a la capital religiosa astur con un nuevo nombre “propio”, ya que ni Luco, ni Astúrica, podían diferenciarla de las capitales conventuales. Que nombre más “propio” que el derivado de su significado original, un lugar dedicado a IOVE, a Júpiter: Ovetum.
Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos.
Es muy probable que dentro del proceso general de “vulgarización” de los topónimos del imperio, durante el bajo imperio, cuando los enclaves sufren un proceso de independencia respectos a la metrópoli, los señores de Lucus Asturum decidieron un cambio que permitía diferenciar a su ciudad amurallada de las capitales de Lucus y Asturica.
Su valor diferencial, la ciudad sagrada dedicada a Júpiter, dios principal del panteón indígena y romano, fue la seña de identidad escogida para su nuevo nombre.
Cuenta la actual ciudad de Oviedo de innumerables evidencias para ser considerada como la capital religiosa de los luggones.
Con las anteriores consideraciones he intentado elevar la favorable posición de Oviedo como Ovetum romano, y así merecer un análisis especifico de sus características arqueológicas y urbanas, y validar este enclave como el Lucus Asturum perdido.
El pasado romano de Oviedo crece cada día que pasa en un territorio donde Ptolomeo sitúa a la ciudad amurallada de Lucus Asturum, y donde ningún otro enclave alcanza la importancia de sus hallazgos arqueológicos antiguos.
Ningún otro enclave conocido en Asturias atesora elementos que solo se justifican desde un origen romano. Oviedo ha sido construido por hombres verdaderos, no por héroes mitológicos o ángeles peregrinos.
Paradigma de lo expuesto es la Cruz de los Angeles, símbolo identitario de la ciudad de Oviedo, y del que hoy conocemos guarda un claro significado romano de fundación y de poder, y que de manera similar a la ciudad ha sido presentada durante siglos con una génesis puramente medieval. *
CRUZ DE LOS ANGELES DE OVIEDO
El significado histórico de la Cruz de los Angeles es paralelo al de los muros de Oviedo. Las joyas de origen romano que se engarzan en su estructura de madera son imagen fiel de los elementos romanos que la ciudad histórica oculta, y que se muestran de forma ocasional bajo sus calzadas medievales.
La Cruz de los Angeles sigue siendo el más valioso símbolo sobre el verdadero origen de la ciudad: capital romana oculta y olvidada por imposición del poder religioso medieval.
---------------------------------------------------------- *LAS JOYAS ROMANAS DE AUGUSTO EN LA CRUZ DE LOS ANGELES DE OVIEDO
Estudio presentado el arquitecto gallego Carlos Sánchez-Montaña y publicado en la portada del diario "La Nueva España" el 20 de enero de 2006. :“Las razones que argumenta para considerar que esta pieza perteneció al emperador Augusto las sustenta en las imágenes que contiene el sello, que responden a la simbología representativa del emperador.”VER INFORMACION
La historiadora Pilar García Cuetos, en entrevista realizada en La Nueva España el 24 de enero de 2006, y haciendo mención a la investigación inédita de Carlos Sánchez-Montaña: “Los monarcas asturianos se sienten herederos de los emperadores romanos.”VER INFORMACION
El profesor de la Universidad de Oviedo Lorenzo Arias en información publicada en La Voz de Asturias el 29 de enero de 2006 explica que “la cara principal de esta cruz de oro y piedras preciosas presenta entalles originales de la época imperial romana con representaciones mitológicas.”VER INFORMACION
Disculpe el retraso en contestarle, tal como le comenté que haría en el post “Los muros de una gran edificio….”, pero no siempre hay tiempo disponible cuando se quiere.
Bien, resumamos muy brevemente la cuestión que veníamos debatiendo:
1º Yo le había presentado, en un principio, una serie de argumentos por los cuales consideraba que no cabía aceptar su hipótesis de que Lucus Asturum era el enclave de Oviedo (véase mis dos comentarios de 04/05/09 y 06/05/09). Algunos de esos argumentos quedaron sin contestar por su parte.
2º Ud. se limitó a exponer seis razonamientos con los que estimaba se podía dar fundamentación a su hipótesis y que se resumen así (tal como figuran, igualmente, en su blog OVETUM).
A.- En Llanera y sus alrededores próximos no existe un yacimiento con entidad suficiente para ser reconocido como Lucus Asturum.
B.- El enclave de Lucus Asturum era, según las fuentes medievales, una ciudad amurallada.
C.- Según las coordenadas de Ptolomeo, Lucus Asturum puede estar emplazado en un área entre Lugo de Llanera y Oviedo (ambos incluidos), y con centro en Lugones.
D.- En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
E.- La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
F.-Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
3º Los tres primeros razonamientos o argumentos (A,B,C), prácticamente los debatimos ya, y no tengo inconveniente en admitirselos -tal como le dije en su momento-, porque, aunque se pueden hacer precisiones al respecto, en términos generales pueden aceptarse y tampoco comprometen en el sentido de asumir que Lucus Asturum era el enclave ovetense.
Punto “D”:
Ya más en desacuerdo estoy en este apartado. El número de elementos de época romana aparecidos en Oviedo no tiene un alcance tan decisivo como para decir que sobresale por ello en relación a Lugo de Llanera, y mucho menos para concluir o suponerla como la verdadera Lucus Asturum.
Le recuerdo que el entorno de Llanera también ha proporcionado apreciables vestigios romanos: no sólo tenemos la famosa lápida de los Lares Viales, sino los restos que se obtuvieron en el Canto (Castro) de San Pedro, el notable complejo alfarero de los hornos de Cayés, las cerámicas y restos de pavimento con ladrillos en forma de rombo halladas en la finca de “La Castañera”, al lado de la iglesia de Santa María (así como las termas que, según se presume, hay en su entorno), los restos de tégulas y mosaicos hallados en la finca de “La Castellana (al lado de la estación de Renfe), así como la no menos importante necrópolis de Paredes, o el conjunto de vestigios formado por estatuillas, monedas, medallas, teselas, que se han obtenido en su suelo, etc.
En cualquier caso, y como ya se ha subrayado en otras ocasiones, mientras no se lleven a cabo más excavaciones arqueológicas y se produzcan más hallazgos sustantivos en ambos lugares (Oviedo y Lugo de Llanera) difícilmente se podrá ir más allá en la interpretación del asunto en cuestión.
Punto E:
Respecto a este apartado, Ud. mismo, lo ha dicho: “La existencia de opiniones a favor no deben ser tenidas en cuenta para la demostración de la validez histórica”. Aunque luego apostille: “Pero son antecedentes que enmarcan la historia de la ciudad“.
Es decir, son sólo unas opiniones, y quizá emitidas, además, sin la suficiente información y documentación. Nada demuestran.
Luego expone Ud. lo siguiente:
"En este aspecto tiene especial interés constatar el descubrimiento de la invención de la sede episcopal de Lucus Asturum identificándola con Oviedo, ya claro en los apuntes de Juan Antonio. Éste analiza una serie de documentos falsos señalando la identificación Lucus Asturum-Oviedo como el móvil principal de don Pelayo." "Historia, fueros y actitudes políticas: Mayans y la historiografía del 18", Antonio Mestre Sanchís.
Es esta una cuestión que conviene aclarar porque la repite Ud. bastante y, tal como está redactada, induce, a mi juicio, a suma confusión, cuando dice, incluso en su blog “OVETUM” lo siguiente: “No es la primera vez que un documento señala la identificación Lucus Asturum con Oviedo”, es decir, en relación al obispo D. Pelayo.
O sea, que tal parece que Ud. interpreta que el obispo D. Pelayo identifica también ambos lugares, cuando no hay tal cosa, sino que es todo lo contrario.
Esta referencia al obispo D. Pelayo, y la clara distinción que se desprende entre Lucus Asturum y Oviedo ya se lo hice ver en mi comentario del 06/05/09, cuando le señalaba que, el hecho de que se hablara de un traslado de la sede episcopal (con independencia de que hubiera sido inventado o no) de Lucus Asturum a Oviedo, ya demostraba claramente que el obispo D. Pelayo no identifica como sinónimos ambos enclaves y, por tanto, es una prueba palpable que se refería a que son distintos.
Le recuerdo mi argumento:
"Fíjese que en la misma referencia que usted cita (Vicente José González García. «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Astu...), se abunda en ello y se puede extraer la misma consecuencia cuando el autor recuerda lo que escribió el arzobispo de Toledo, D. Rodrigo Jiménez de Rada (1170-1247):
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica) en la que primeramente había sido establecida”.
Es decir, la exención que se buscaba de la diócesis de Oviedo (respecto de la Primada de Toledo) con base a los orígenes que aquélla tenia en Lucus Asturum (subrayando lo de su traslado, y lo de “primeramente”, por lo demás) permiten concluir que estamos hablando de dos enclaves distintos.
Punto “F”:
Es este, el de la interpretación de la evolución del topónimo de Lucus Asturum, un apartado realmente sorprendente en su conclusión.
Ese análisis que Ud. realiza, tomando como base el trabajo de Francisco Escobar García publicado en el año 1974: “El topónimo Oviedo ¿es un teónimo?” , y en virtud del cual sostiene que, en un momento dado de la historia de Lucus Asturum, en el proceso de vulgarización de su nombre, sus habitantes optaron por el cambio toponímico acudiendo a la posible referencia del enclave al dios Júpiter, esto es, Júpiter-Iove-Ovetum, no deja ser, a mi juicio, realmente, una pirueta argumentativa muy forzada.
Dice usted: “Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos”.
Tal parece que actúa Ud. aquí como Procusto, adaptando el problema de la evolución toponímica de LucusAsturum al lecho de su hipótesis.
Para empezar, habría que decir que de la lectura del trabajo de Francisco Escobar no se deduce nada por el estilo de lo que Ud. apunta con respecto a la evolución toponímica de Lucus Asturum. El trabajo es en relación al posible origen toponímico de Oviedo como un teónimo, cosa que puede incluso considerarse dentro de las muchas aportaciones que se han realizado sobre el particular, pero que de ahí se derive lo que usted apunta media más de un trecho que salvar.
En este sentido, dice Ud. que el proceso evolutivo del topónimo se produce en tiempos tardorromanos, pero, claro, habría que preguntarse: ¿qué tiempos tardorromanos son esos?, ¿cuánto abarcan?, ¿cuándo se produjo, más o menos, ese cambio?
Veamos:
En el documento fundacional del convento de San Vicente, que describe la llegada de Máximo y Fromestano en el 761 al lugar, se dice "quod dicunt Oueto" y también “in isto loco iam dicto Oueto“.
Esto es: al menos en ese año (761) -y por razones obvias, quizás antes- el nombre que hace referencia a Oviedo ya está establecido.
Luego tenemos que Ptolomeo (que es del siglo II d.C.) cita a Lucus Asturum en su mapa de Hispania. Y luego tenemos también la compilación del Anónimo de Rávena (que es del siglo VII d. C., hacia el 670), el cual cita igualmente, en sus itinerarios de Hispania, a Lucus Asturum.
Es decir, que al menos hasta bien avanzado el siglo VII el topónimo de Lucus Asturum se mantiene, no sufre cambios ni hay evolución en el mismo de ningún tipo. Lucus Asturum es Lucus Asturum, y no es Oueto, ni Ovetao ni Oveto u Ovetum, o cosa que se le parezca.
En consecuencia, si se produjo la evolución toponímica de Lucus Asturum hacia el topónimo de Oueto u Ovetum, tuvo que haberse producido en sólo un siglo aproximadamente, entre el año 670 y el 761. Y quizás en menos tiempo, pues, ya digo, es de suponer que en el lugar "quod dicunt Oueto” ya se llamaría así bastante antes, no cuando recién llegaron Máximo y Fromestano. Y, por tanto, parece muy escaso el espacio temporal existente para que se hubiese producido esa compleja y curiosa evolución toponímica que Ud., Sr. Sánchez Montaña, supone como solución al problema.
El trabajo de Luis Escobar García es interesante para incardinarlo dentro de aquellos que suponen un origen del topónimo de Oviedo en relación al dios Júpiter, tal como el propio Vicente José González sostiene cuando recuerda que Plinio el Viejo alude al plomo negro “iovetano” y que “Oveto” era el centro de ese territorio “iovetano“. Pero ninguno de los dos (Escobar Garcia y Vicente José González) identifican ese “Oveto” y ese territorio “iovetano” con el enclave de Lucus Asturum.
De otra parte, cuando Ud. dice que se hizo necesario para Lucus Asturum, en el proceso de diferenciación y vulgarización toponímica, diferenciarse claramente de Lucus Augusti y de Asturica Augusta, Narciso Santos Yanguas, en su última obra “Asturias y los astures y la administración romana durante el Alto Imperio", en el capítulo dedicado a Lucus Asturum, mantiene que “… en la documentación antigua se aprecia un cuidado sumo en no confundir ambos topónimos, tal vez porque cada uno de ellos cumplía funciones específicas en el marco de la administración romana del noroeste peninsular”.
Es decir, que no parece que existiera esa necesidad a la que usted hace referencia. Además, el topónimo de Lugo de Llanera está ahí como herencia y es complicado obviarlo.
Por último, si admitimos su hipótesis del cambio toponímico (que es una hipótesis particular dentro de la hipótesis general), como ya le había apuntado (y usted no contestó), no se explica cómo en las donaciones de Alfonso III ("Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos") y Ordoño II (“Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”) se hace mención en ambos casos a Lugo o Lugu. Si Lucus Asturum era Ovetum u Oviedo, ¿a cuento de qué aparece aquí esta referencia a Lucu o Lugo? Pues sencillamente porque hacen referencia a un lugar distinto.
¿Y qué decir de la carta documental del monasterio de San Vicente de Oviedo, fechada en el siglo X, -que también cita Santos Yanguas en el libro anteriormente reseñado- la cual, al delimitar una tierra objeto de venta, cita la “porta civitatis” de la “villa Luco” (“Placuit nobis ut vinderemus vobis terra in villa Luco, de porta civitatis usque in termino Berani“)?
En fin, Sr. Sánchez-Montaña, creo que, ante todo ello, su hipótesis es endeble. Hay demasiados escollos que salvar como para tomarla con suficiente consideración. Tenga en cuenta que, en toda la exposición que le he hecho, no se niega que la ciudad de Oviedo tenga un más que posible origen romano, pero ello no invita a concluir que pueda ser Lucus Asturum. Y, al mismo tiempo, el hecho de que no se pueda afirmar arqueológicamente con certeza que Lugo de Llanera es Lucus Asturum, no autoriza a establecer una hipótesis tan poco firme como la que Ud. presenta al identificarla con el enclave de Oviedo.
Es por ello que le he dicho, sin ningún ánimo peyorativo y sin ninguna intención de molestarle, que sus argumentos me parecen escasos y poco eficientes (deficientes) en orden a demostrar que hay que tener en cuenta su hipótesis como plausible.
Una hipótesis bien construida requiere al menos tres argumentos que la respalden.
Usted me reconoce al menos tres válidos, pero mi hipótesis se basa en seis.
Seis argumentos para fijar el emplazamiento más probable para la capital religiosa de los luggones, en la Asturia transmontana, y del que en el momento actual no existe certeza arqueológica.
Lo que me permite avanzar de forma holgada.
Le recuerdo que un solo argumento carece de validez, pero la presentación de seis, frente a la endeblez de alguno, no merece el comentario con las palabras que usted utiliza.
Propongo complemento de las “debilidades” que usted señala en los tres restantes:
4) En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
El suflé que establecía el emplazamiento de Lucus Asturum en la zona de Lugo de Llanera se ha desinflado de manera definitiva por razones científicas.
Nada permite identificar ese lugar con la antigua ciudad de Lucus Asturum.
Escribe Santos Yanguas:
“Los intentos de excavación arqueológica llevados a cabo en el presumible centro de hábitat antiguo en Lugo de Llanera no han dado los resultados deseados....”
pag 513. Asturias, los astures y la administración romana durante el Alto Imperio Santos Yanguas, Narciso
Y Carmen Fernández Ochoa: “que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“.
Si solo uno de los últimos hallazgos aparecidos en Oviedo hubiera sido encontrado en los alrededores de Santa Maria de Lugo, repito solo uno, tendríamos las campanas repicando en las cátedras ovetenses
Todos los estudios y noticias que reseño en mi anterior comentario permiten asegurar que el enclave de Oviedo tuvo un pasado romano, y que en el entorno determinado dentro la imagen superior, ningún otro lugar posee tales valores arqueológicos.
La ciudad de Oviedo es el emplazamiento más fértil en elementos romanos: numismática, elementos urbanos, arquitectónicos, dentro del territorio de su entorno. Con una enorme distancia.
5) La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
Las lecturas de textos pueden ser subvertidas según las intenciones de sus lectores.
Los textos del obispo Pelayo han estado sujetos a múltiples controversias.
Me confirmo en lo dicho:
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal de Lugo”
Trasladar.
(De traslado).
1. tr. Llevar a alguien o algo de un lugar a otro. U. t. c. prnl.
2. tr. Hacer pasar a alguien de un puesto o cargo a otro de la misma categoría.
3. tr. Hacer que un acto se celebre en día o tiempo diferente del previsto.
4. tr. Pasar algo o traducirlo de una lengua a otra.
5. tr. Copiar o reproducir un escrito.
NO NECESARIAMENTE SE CAMBIA DE LUGAR EN UN TRASLADO, EL LUGAR PUEDE SER EL MISMO PERO CAMBIA LA LENGUA.
Pelayo identificó a Lucus Asturum con Oviedo y por ello fue tachado como mentiroso por la historiográfica posterior.
“Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es invención pelagiana.”
“Oviedo niega la dependencia, aboga por la exención y busca los orígenes de ella, y son aceptados por Roma, en la ciudad de Lucus Asturum que siempre dependió de la Santa Sede y nunca del Primado de Toledo.”
EL OBISPO DON PELAYO, CLAVE PARA EL ESTUDIO DE LA HISTORIA DE ASTURIAS
VICENTE J. GONZÁLEZ GARCÍA
"Sin insistir en el distinto carácter que esta técnica tenía para los autores del medievo, hay que reconocer que muchos de los datos ofrecidos en la compilación pelagiana no pueden ser tildados de falsos, salvo la invención de la existencia de una sede, en tiempos de los vándalos, en Lucus Asturum, lo cual es evidentemente inverosímil"
PELAYO DE OVIEDO, SIGNO DE CONTEIADICCION
EMILIANO FERNAlSnDEZ VALLINA
Mi hipótesis no es nueva, ese el el quinto argumento, antes que yo otros lo han enunciado.
Repito, quinto argumento de seis presentados.
6) Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
Solo una pregunta frente a tanto enmarañamiento que utiliza para argumentar en mi contra:
¿Que divinidad indígena ocuparía el lugar más importante en el panteón de Lucus Asturum?
La respuesta es clara para mí:
Podemos asegurar sobre la base de las diferentes fuentes antiguas consultadas que Lucus Asturum poseía un valor religioso destacado por contar entre sus muros, y en lugar principal, un templo dedicado al dios principal de los astures, y que este no podía ser otro que una representación del Júpiter romano, y que era identificado con el Dis pater indígena.
Un enclave astur nombrado como un “Lucus” debía de contar con la presencia de un templo dedicado a Júpiter.
Por otra parte, y tal como establece Escobar García, el topónimo Oviedo posee rasgos suficientes, y hasta quizás sobrados, para identificar al lugar de Oviedo con un lugar dedicado a Júpiter:
Que nombre más “propio” que el derivado de su significado original, un lugar dedicado a IOVE, a Júpiter: Ovetum.
Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos.
Es muy probable que dentro del proceso general de “vulgarización” de los topónimos del imperio, durante el bajo imperio, cuando los enclaves sufren un proceso de independencia respectos a la metrópoli, los señores de Lucus Asturum decidieron un cambio que permitía diferenciar a su ciudad amurallada de las capitales de Lucus y Asturica.
Su valor diferencial, la ciudad sagrada dedicada a Júpiter, dios principal del panteón indígena y romano, fue la seña de identidad escogida para su nuevo nombre.
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Bueno, Sr. Sánchez-Montaña, veo que usted se limita a reafirmarse en sus argumentos, sin aportar nada nuevo y sin contestar a las objeciones que le he hecho a su hipótesis (sobre todo, la relativa al cambio toponímico de Lucus Asturum por Ovetum-Oviedo). Así, difícilmente podemos avanzar.
No obstante, le diré que me sorprende que siga usted confundiéndose con la cuestión del hipotético y polémico traslado del obispado de Lucus Asturum a Oviedo en tiempos del obispo D. Pelayo, aduciendo, ahora, que el verbo trasladar tiene varias significaciones, y que en el caso que nos ocupa, según Ud., "NO NECESARIAMENTE SE CAMBIA DE LUGAR EN UN TRASLADO, EL LUGAR PUEDE SER EL MISMO PERO CAMBIA LA LENGUA". Es decir, supongo que está Ud. aquí aplicando la cuarta acepción de las cinco que pone del significado de "trasladar".
O sea, que Ud. entiende que no hay tal traslado, sino lo que hay es una especie de "traducción", que lo que se traslada es un cambio de nombre, esto es, que Fruela "traslada" el nombre del obispado Lucus Asturum al nombre de Oviedo como tal.
Desde luego, si esto es así, si no le he interpretado mal, debo decirle que su forma de argumentar esta cuestión es sumamente curiosa por no decir sorprendente.
Primero,porque, cuando Ud. dice afirmarse en que “Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal de Lugo”, es evidente que resulta muy forzado no sólo ya irse hasta la cuarta acepción del significado del verbo "trasladar", sino aplicar esa acepción a dicha frase.
Y segundo, porque dicha acepción, y la interpretación que de la misma Ud. hace, salta por los aires cuando omite la preposición "desde" en la frase aludida, la cual, tal como figura en el trabajo de Vicente José González García, «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Asturias». El Basilisco, número 8, julio-diciembre 1979, figura enteramente de este modo: “Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica) en la que primeramente había sido establecida”.
Esa preposición "desde" indica distancia, de un lugar a otro lugar. En este caso, de Lugo a Oviedo, por lo cual son enclaves distintos. Pero, además, léalo Ud. bien, se dice "en la que primeramente habia sido establecida". Más claro, agua (con independencia de que sea invención o no del obispo D. Pelayo el establecimiento de esa sede episcopal en Lucus Asturum).
En fin, no sé ya cómo decírselo: el obispo D. Pelayo no identificó nunca Lucus Asturum con Oviedo, tal como usted afirma. Todo el punto 4º del trabajo de Vicente José González está desarrollado en esta línea. La primera frase de este punto 4º que usted reiteradamente cita, "Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es invención pelagiana", es la opinión del profesor Javier Fernández Conde contra la que argumenta precisamente Vicente José González.
Por lo demás, ya veo que el resto de argumentos (nombres de la iglesias donadas por Alfonso III y Ordoño II, etc.) que le doy los encuentra, a pesar de la claridad expositiva que he procurado darles, enmarañados, y opta por no contestarlos.
Sin embargo, déjeme reiterarle que, el argumento de que todavía en el siglo VII el Anónimo de Rávena se refiera a Lucus Asturum como enclave, sigue siendo una seria objeción a su hipótesis del posible cambio toponímico. Como mínimo indica que hasta ese siglo no hubo necesidad de cambiar el nombre de Lucus Asturum por el de Oviedo.
Salvo que Ud. crea conveniente contestar de nuevo, por mi parte dejo aquí ya este interesante debate. Los argumentos (y las ausencias de algunos de ellos) están sobradamente expuestos por ambos. Si en un futuro surgen datos nuevos (a favor o en contra de su hipótesis) no dudo que con sumo gusto los analizaremos.
Sr. Caso
Veo que sigue con su intención de dirigir el debate a su única manera.
Escribiré sobre el tema siempre que me parezca oportuno.
Le repito que mi hipótesis se basa en seis argumentos que la construyen.
Argumento 5) La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
Usted puede asegurar transcripciones de las palabras de Pelayo realizadas por otros.
Son varios los que indican que Pelayo se caracterizó por defender una continuidad histórica entre Lucus Asturum y Oviedo.
No repetiré los argumentos ya expuestos.
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica>>) en la que primeramente había sido establecida”.
Esta frase en latín original puede ser transcrita para que diga una cosa y su contraria
Cual es la magnifica ciudad a la que se refiere. No existe conocimiento de otra que no sea la que se levantaba en el lugar de Oviedo.
La reseña de Rávena en el siglo VII de la ciudad de Lucus Asturum nos permite imaginar como este enclave presenta sus murallas en pié cuando Fruela I traslada la capital a Oviedo en el VIII.
Ya que ambos emplazamientos son la antigua capital, el mismo lugar edificado de origen romano, tal como describe:
Hofmann, Johann Jacob (1635-1706): Lexicon Universale,
OVETUM urbs Legionis, insignis.
Asturiae Ovetensis caput, ad Astam fluv. quo reliquiae Gothorum confugêre, 16. leuc. Hispan. a Legione urb. in Circium, 6. ab ora maris Cantabrici in Meridiem, 18. ab Asturica in Boream, Episcopalis sub Archiepiscopo Castellano. Alias regni Ovetani caput, et regia sedes, cum post obitum Roderici, Gothorum Regis ultimi, Christiani a Mauris expulsi, et in Asturias compacti, Principem Pelagium elegerunt, A. C. 717. qui Ovetanum regnum instituit, quod Legionensis, A. C. 913. fermentum fuit; Tum enim Ordonnus 2. Regis Legion. titulum sumpsit. Hispanis Oviedo, hîc Concilium, A. C. 878. et 901.
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No quiero valorar la clásica historiografía asturiana sobre la hipótesis de la fundación de Oviedo por los “famosos” monjes y sus posteriores enjuagues.
Solo señalar que este episodio mítico y falso es de similar manufactura al de la construcción de la Cruz de los Angeles por dos peregrinos “alados”.
Paradigma de lo expuesto es la Cruz de los Angeles, símbolo identitario de la ciudad de Oviedo, y del que hoy conocemos guarda un claro significado romano de fundación y de poder, y que de manera similar a la ciudad ha sido presentada durante siglos con una génesis puramente medieval.
El significado histórico de la Cruz de los Angeles es paralelo al de los muros de Oviedo. Las joyas de origen romano que se engarzan en su estructura de madera son imagen fiel de los elementos romanos que la ciudad histórica oculta, y que se muestran de forma ocasional bajo sus calzadas medievales.
La Cruz de los Angeles sigue siendo el más valioso símbolo sobre el verdadero origen de la ciudad: capital romana oculta y olvidada por imposición del poder religioso medieval y que conserva en su topónimo actual todo el valor de su antiguo nombre romano. Lucus Asturum.
Guillermo Caso de los Cobos
(Diccionario Histórico de Asturias. Ed. La Nueva España)
Hola, amigo Carlos:
Tras dejar atrás el largo puente de mayo me encuentro con este post tuyo, el cual, ciertamente, no deja de resultar sorprendente e interesante por la hipótesis que ofreces, al decir que la antigua Lucus Asturum corresponde a la ciudad de Oviedo.
No obstante, tras leer tus razonamientos y cotejar algunos textos, la cuestión no deja, desde luego, de suscitar muchas dudas para poder contemplarla con suficiente firmeza, máxime dado el estado actual, escasamente parco, que las prospecciones arqueológicas -en un sitio y otro- han aportado tanto en la dirección que apuntas como en la opuesta
Las primeras reflexiones que surgen son: si Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo, entonces ¿qué era el enclave que situamos en Lugo de Llanera? ¿Un simple poblado, más o menos extenso, que evolucionó a partir de un castro prerromano (Canto de San Pedro)? ¿Y bajo qué nombre lo conceptuamos? ¿También con el de Lucus Asturum dado que resulta muy complicado dejar de lado el topónimo de Lucus-Lugo?
Para poder salvar parcialmente tu hipótesis (y el hecho absurdo de dos Lucus Asturum tan próximos) tendríamos que contemplar que el ámbito territorial de Lucus Asturum llegaba a englobar el enclave de Oviedo (a pesar de estar a unos diez Km de distancia). Andando el tiempo, este enclave ovetense asumiría cierta importancia, diferenciándose sobremanera del enclave territorial de lo que hoy conocemos como Lugo de Llanera, y adquiriendo el nombre de Ovetao-Oveto-Ovetum-Oviedo (sobre el origen del nombre, veáse el enlace), quedando, en cualquier caso, ambos enclaves diferenciados.
Es decir: no es que Oviedo evolucionara a partir de un enclave concreto llamado como tal o específicamente Lucus Asturum, sino que sería un enclave más de ese amplio y disperso territorio administrativo llamado en la antigüedad romana Lucus Asturum (Lugo de Llanera), y que adquirió la suficiente preponderancia como para constituirse en una civitas con nombre diferenciado.
La hipótesis de que Lucus Asturum (Lugo de Llanera) englobara asimismo al enclave de Oviedo no se presenta tan descabellada habida cuenta de que tanto Carmen Fernández Ochoa (“que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve meno...“) como Narciso Santos Yanguas (“El espacio geográfico de esta civitas abarcaría, al parecer, varios cientos de kilómetros cuadrados, teniendo su límite con Gigia y Paelontium“. pag. 527 de su último libro “Asturias, los astures y la administración romana durante el Alto Imperio” ) permiten deducirlo de sus afirmaciones.
Con todo, Santos Yanguas ni siquiera se plantea estas consideraciones, a pesar de que aduzca -tal como citas- que no se sepa todavía a ciencia cierta cuál seria el emplazamiento exacto de este enclave de Lucus Asturum.
Sin embargo, todo el capítulo que dedica Santos Yanguas a Lucus Asturum no deja de traslucir que su inclinación sigue -como la de tantos otros a lo largo del tiempo- por situarla en la actual Lugo de Llanera, y sin perjuicio de que admita un amplio espacio de influencia territorial de esta civitas del pasado.
Para mí hay ciertos argumentos que indican claramente que cuando se habla en los textos antiguos de Lucus Asturum es con referencia distinta al enclave de Oviedo.
Por ejemplo, cuando dice Santos Yanguas (pág. 5269:
“Junto a ello, que se trataría de una ciudad amurallada nos viene confirmado más de siglo y medio antes en la donación de Alfonso III a la iglesia de Oviedo el 20 de enero del 905: Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos, donde el recinto amurallado de la ciudad se atribuye a Santa María como propietaria”.
En este texto de la época de Alfonso III no sólo se está haciendo referencia a un lugar distinto del de Oviedo (Lugu - Lucus Asturum), sino que incluso se cita con el mismo nombre a la iglesia parroquial que históricamente se sitúa en Lucus Asturum - Lugo de Llanera.
Pero hay más:
Luis Alfonso de Carvallo (“Antiguedades y cosas memorables del Principado de Asturias“, 1695) suponía que Lucus Asturum había sido destruida en tiempos de la invasión islámica, pues en una donación de Ordoño II a la iglesia de Oviedo, fechada en el año 921, se incluía: “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”. Es decir, este Lugo es evidente que es distinto del Ovetao u Oveto de la época.
Incluso cuando Santos Yaguas habla de la hipotética sede episcopal en Lucus Asturum, podemos recordar al respecto el también hipotético traslado de esa diócesis en Lugo de Llanera a Oviedo en tiempos de Fruela I. Esto es, aun cuando se admita que esta hipótesis del traslado es fruto de la invención o manipulación del obispo Don Pelayo (cuestión siempre debatida), el hecho sólo de hablar del traslado ya implica que estamos ante dos enclaves distintos y diferenciados, salvo que se diga que también Lucus Asturum es invención de este obispo lo cual resultaría excesivo.
En fin, amigo Carlos, dudo mucho que se pueda sostener que Lucus Asturum es Oviedo (salvo que la arqueología en un futuro proporcione datos que lo permitan). Los doce argumentos que propones los veo, más que como prueba de ese aserto, como buenos argumentos para justificar el porqué Oviedo se constituyó en un enclave notorio en la antigüedad romana y medieval de Asturias.
Un cordial saludo
4 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
En esta primera contestación trataré el tema sobre la validez científica del emplazamiento de Lucus Asturum en Llanera.
Usted ya ha aportado la opinión de dos destacados investigadores que al día de hoy establecen:
Carmen Fernández Ochoa: “que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“.
Narciso Santos Yanguas: “El espacio geográfico de esta civitas abarcaría, al parecer, varios cientos de kilómetros cuadrados, teniendo su límite con Gigia y Paelontium“.
Concretando: se establece que Lucus Asturum son núcleos dispersos en varios cientos de km2..
Hasta hoy se cree que el príncipal elemento que soporta el emplazamiento cercano a Santa María es la lápida a los lares Viales, y próximo al cerro llamado El Canto de San Pedro, donde José Manuel González identificó un castro.
Sobre la lápida a los lares Viales, recordar que su presencia es propia de un enclave en cruce de caminos, más que de un oppidum, y que la dimensión del cerro de S. Pedro es tan pequeña que no alcanza ni a considerarse su planimetría.
Todo sumado ayuda a establecer sobre Lucus Asturum de manera científica que: "Su ubicación tradicional en Lugo de Llanera no ha hallado hasta la fecha confirmación arqueológica completa." Narciso Santos Yanguas.
Parece que, salvo interpretaciones voluntariosas, la localización de Lucus Asturum en algún lugar concreto no tiene aval científico al día de hoy.
Para ampliar un poco la desoreintación recordar que podemos establecer de tres Santa Marias de Lugo.
Una en Llanera, otra en Lugo (Galicia) y una tercera en Oviedo, siendo Oviedo Luco Asturum.
Y que por ello “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”, puede referirse a una de las tres.
¿Es Santa Maria de Oviedo la iglesia destruida en la ciudad de Lugo?
Lo que hoy si se puede afirmar es que "Ciuitatem Lugo" no se refiere a ningún lugar conocido de Llanera.
Por ello ese texto de Ordoño II no puede referirse a Santa María de Llanera.
continuaré...
saludos
5 May 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Amigo Carlos:
Como veo que tiene la intención de continuar con el análisis de la cuestión, esperaré al mismo antes de hacerle mis aportaciones.
Un saludo
5 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
"Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es anterior al obispo D. Pelayo, lo confirma como consta en documentos del Monasterio de S. Vicente en los que se dice «porta civitatis» o puerta de la ciudad de Lugo, «antiquissima civitas» o «civitas in diebus sempiternis», es decir: antiquísima ciudad o ciudad eterna."
Vicente José González García. «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Asturias». El Basilisco, número 8, julio-diciembre 1979
Donación de Ordoño II a la iglesia de Oviedo, fechada en el año 921, se incluía: “Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”.
Donación de Alfonso III a la iglesia de Oviedo el 20 de enero del 905: "Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos".
Y tan detallado era su emplazamiento que ya Ptolomeo lo fijó en sus coordenadas:
Lucus Asturum, 11º, 45º.
Y que determina un lugar cercano, muy cercano a Oviedo.
Las fuentes antíguas son las que nos permiten pensar que la razón que establece que Lucus Asturum son núcleos dispersos en varios cientos de km2. es inconsistente.
Lucus Asturum, esté donde esté emplazado, es un lugar concreto, con coordenadas concretas, y donde deben existir cimentaciones de los muros de sus antíguas murallas.
Guillermo ¿acepta hasta aquí?
5 May 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Lápida de Lugo de Llanera dedicada a los Lares Viales
ARAM
LARIBV(S)
VIALIBV(S)
Amigo Carlos:
Creo que es necesario tener en cuenta los aspectos siguientes:
1º Las iglesias bajo la advocación de Santa María que usted apunta, distintas de la de Lugo de Llanera, no permiten, a mi juicio, que induzcan a mayor confusión.
Las posibles iglesias con el nombre de Santa María en la actual provincia de Lugo deben de ser desechadas. Sólo por su amplia distancia geográfica respecto de Lucus Asturum así lo exige.
Luego tenemos en Oviedo tres posibles candidatas:
a) La iglesia de Santa María (de Oviedo), hoy desaparecida, y que se situaba dentro del ámbito en que se hallaba la de San Salvador, la de San Tirso y la de Santa Leocadia. Pero esta iglesia de Santa María es de tiempos de Alfonso II, levantada junto con el conjunto de los edificios anteriormente citados.
b) La iglesia de Santa María de la Corte, la cual comparte medianeras con el claustro y edificio del monasterio de San Vicente —hoy Museo Arqueológico de Asturias—, al que perteneció, y con la iglesia del monasterio de benedictinas de San Pelayo. Contigua a su cabecera se encuentra la catedral, según reza el enlace a la Wikipedia.
Esta iglesia hunde su pasado, pues, en el templo de San Vicente y no ha lugar a ir más atrás en el tiempo.
c) La iglesia de Santa María de Bendones, la cual se considera también de tiempos de Alfonso II.
2º Debemos admitir -siguiendo su hipótesis- que, si Lucus Asturum es Oviedo, en algún momento de su historia debió cambiar hacia este nombre (Ovetao-Oveto-Ovetum-Oviedo). Pero…
a) No hace falta ser experto en toponimia para ver que la evolución del nombre Lucus Asturum se presenta como imposible para que finalizara como Oviedo.
b) En el documento fundacional del convento de San Vicente, que describe la llegada de Máximo y Fromestano en el 761 al lugar, se dice "quod dicunt Oueto" y también “in isto loco iam dicto Oueto“.
Esto es: al menos a partir de ese año (761) el nombre que hace referencia a Oviedo ya está establecido. De donde se deduce que resulta muy contradictorio que las tales donaciones de Alfonso III y Ordoño II hagan alusión a una iglesia llamada Santa María de Lugo (ó de Lugu ó Luco). Para ese tiempo lo correcto habría sido referirse a ella como Santa Maria, a secas, o Santa María de Oueto (u Oveto, Ovetao, etc.), pero dejando de lado esa alusión a Lugo, pues no es una iglesia que se dona heredada de tiempos pasados (que pudiera mantener ese topónimo), sino que son de creación nueva en tiempos de Alfonso II.
Argumenta usted en su conclusión al respecto: “Lo que hoy sí se puede afirmar es que "Ciuitatem Lugo" no se refiere a ningún lugar conocido de Llanera”. Pero estará usted conmigo que tampoco a Oviedo, y sí más probable a Lugo de Llanera, según le expongo más arriba.
3º Le insito, además, en el último argumento que le expuse (y al cual no me ha respondido) y que vuelvo a reproducir:
a) Incluso cuando Santos Yaguas habla de la hipotética sede episcopal en Lucus Asturum, podemos recordar al respecto el también hipotético traslado de esa diócesis en Lugo de Llanera a Oviedo en tiempos de Fruela I. Esto es, aun cuando se admita que esta hipótesis del traslado es fruto de la invención o manipulación del obispo D. Pelayo (cuestión siempre debatida), el hecho sólo de hablar del traslado ya implica que estamos ante dos enclaves distintos y diferenciados, salvo que se diga que también Lucus Asturum es invención de este obispo lo cual resultaría excesivo.
b) Fíjese que en la misma referencia que usted cita (Vicente José González García. «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de As...), se abunda en ello y se puede extraer la misma consecuencia cuando el autor recuerda lo que escribió el arzobispo de Toledo, D. Rodrigo Jiménez de Rada (1170-1247):
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica>>) en la que primeramente había sido establecida”.
Es decir, la exención que se buscaba de la diócesis de Oviedo (respecto de la Primada de Toledo) con base a los orígenes que aquélla tenia en Lucus Asturum (subrayando su traslado, y lo de “primeramente”, por lo demás) permiten concluir que estamos hablando de dos enclaves distintos.
4º Lo que sí puedo aceptarle, como es obvio, es lo que se ha constatado hasta ahora por los arqueólogos y especialistas en el asunto:
a) La imposible localización a ciencia cierta de Lucus Asturum, y que el territorio de influencia de esta civitas, de carácter abierto, abarcaba un amplio espacio de decenas (mejor que de cientos) Kms.2 en su alrededor.
b) También le concedo que la lápida de los Lares Viales hallada en Lugo de Llanera no se presenta como un elemento suficiente para concluir que estemos ante un oppidum o núcleo fortificado. No obstante, sí indica, de un lado, que los ejes de comunicación de la zona tenían a Lucus Asturum como un referente importante; y, por otro, que no deja ser casual e igualmente notorio que, por ahora, se haya hallado en ese lugar y no en Oviedo una lápida de estas características.
c) Desechar el castro de Canto de San Pedro por su escasa entidad planimétrica puede invitar a ello, pero no hay que apurarse tanto por el momento, pues todavía no se han llevado a cabo excavaciones sistemáticas en el mismo y no sabemos lo que podrían deparar. Hasta el momento sólo consta -como apunta Santos Yanguas- como elementos defensivos dos terrazas que rodean la colina de cuatro metros de ancho “que al parecer hay que identificar con las murallas (y fosos), así como con otros elementos defensivos del poblado.”
d) Con todo, ciertamente, el no haberse encontrado restos claros de las murallas, o de sus cimientos, de este enclave de Lucus Asturm es un problema no menor que plantea muchos interrogantes. Ocurre aquí como con el enclave de Lancia (León), donde tampoco se han hallado restos de muralla en el lugar que se sitúa por ahora (Villasabariego-Mansilla de las Mulas). Es posible que, del mismo que se estima que las murallas de Lancia pudieron ser arrasadas por los Suevos en el S. VI, se pueda contemplar la posibilidad de que las murallas de Lucus Asturum fueran arrasadas también en algún momento conflictivo de su historia.
En cualquier caso, es evidente que mientras no se lleven a cabo excavaciones más exhaustivas en la zona sólo cabe especular al respecto. Y no olvidemos que Carmen Fernández Ochoa “apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“.
e) Respecto a la coordenadas que proporciona Ptolomeo, es verdad que Oviedo se encuentra muy cerca de las mismas, pero según leo en este artículo de Diviciaco, y en este otro, (publicados en Celtiberia.net), según sus operaciones, dichas coordenadas le remiten, con validez, al área de Lugo de Llanera (no al área de Oviedo, que, con diez Km. de distancia desde ese punto, excede, si no me equivoco en los cálculos, del rango de 5 minutos con los que trabajaba Ptolomeo).
En fin, amigo Carlos, ya digo, no veo que pueda asumirse o contemplarse por el momento con firmeza, dados los datos que tenemos encima de la mesa, que Lucus Asturum era la ciudad de Oviedo.
Un saludo cordial
6 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
No es que no quiera contestarle a todas sus cuestiones. Cosa que haré encantado.
Es que prefiero establecer un orden en los temas, ya que mi argumentación tiene una secuencia lógica, (al menos yo lo creo), y espero hacerme entender en parte a través de esa secuencia.
Creo necesario establecer una base de acuerdo, al menos parcial, para poder discutir sobre aspectos más complejos.
Por eso le preguntaba, y parece que asiente, si está usted de acuerdo con:
1) En Llanera y sus alrededores próximos no existe un yacimiento con entidad para ser reconocido como Lucus Asturum.
2) El enclave de Lucus Asturum, era según las fuentes, una ciudad amurallada.
Sentada esta base paso a argumentar otro tema interesante. Las coordenadas de Ptolomeo para Lucus Asturum.
45º 11º Lucus Asturum (45,0000º , 11,0000º)
Según Tomás:
Latitud real = 36º + (45,0000º - 36º) x 91,354 / 111,11 = 43,3997º = 43º 23,98'
Longitud real = |( (11,0000º - 8,2500º) x Cos(45,0000º) x (0,21117 x 45,0000º + 78,379) / (Cos(43,3997º) x 111,325) ) - 7,8670º| = 5,7543º = 5º 45,26'
Según el sigpac:
Lugo de Llanera: 43º 26' - 5º 49'
Lugones: 43º 24' - 5º 48'
Lugarín: 43º 24' - 5º 50'
Oviedo: 43º 21' - 5º 50'
Y según http://www.sitiosespana.com/paginas/coordenadas.htm
Oviedo 43.22 N 5.50 O
De acuerdo con los datos puros, Lugones sería el mejor candidato para ser la capital de los luggones: Lucus Asturum.
Y Oviedo sería igual candidato que Lugo de Llanera. Pero cualquiera de los tres sería lugar válido según Ptolomeo por sus pequeñas diferencias.
Sumo entonces, si a usted le parece, a los puntos 1 y 2 un tercero:
3) Según las coordenadas de Ptolomeo, Lucus Asturum puede estar emplazado en un área entre Lugo de Llanera y Oviedo (ambos incluidos) y con centro en Lugones.
continuaré...
saludos
6 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
De momento he procurado presentar hechos comprobables.
Los 1), 2) y 3) anteriores.
Paso a presentar el 4)
4) En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
Ver:
•-Ruinas del Oviedo primitirvo. José Mª Fernández Buelta - 1948
•-Excavaciones en el Oviedo antíguo. José Mª Fernández Buelta - 1950
•-"Aparece una calzada medieval, del siglo XII, en un solar en obra... La Nueva España
•-"El área de la romanización de Oviedo no es sustancialmente
disti... La Nueva España
•-¿Y si la Foncalada fuera romana?. La Nueva España
•-Foncalada de agua y sangre. La Nueva España
•-Una teoría para reforzar el origen romano de Oviedo frente a su f... La Nueva España
•-Cultura analizará ahora la Foncalada para comprobar la magnitud d...La Nueva España.
•-Los arqueólogos que excavaron Foncalada corroboran que su estilo ... La Nueva España
•-Romana, muy romana.La Nueva España
•-El hallazgo de dos valiosas piezas amplía la huella romana en Oviedo La Voz de Asturias
-•-«Si Fruela funda la iglesia del Salvador en Oviedo es porque hab...La Nueva España
•-El mapa romano de Oviedo.La Voz de Asturias
•-La fuente de la Rúa y el 'Oviedo Romano' El Comercio
•-«Es un vuelco a la historia». La Nueva España
•-Vicente José González defiende un origen romano vinculado a la mi... La Nueva España
•-Hallan una fuente romana en Oviedo que adelanta su fundación en c... El Mundo
•-El primer Oviedo, al descubierto ABC
•-«Una pieza del puzle no es suficiente para decir que Oviedo era u... La Nueva España
•-Una moneda de 'Calagurris' confirma el origen romano de la ciudad... La Rioja
Vicente José González García. •-«El obispo Don Pelayo, clave para e...
Todos estos estudios y noticias permiten asegurar que el enclave de Oviedo tuvo un pasado romano, y que en el entorno determinado dentro la imagen superior, ningún otro lugar posee tales valores arqueológicos.
La ciudad de Oviedo es el emplazamiento más fértil en elementos romanos: numismática, elementos urbanos, arquitectónicos, dentro del territorio de su entorno.
Es verdad que por si solos estos cuatro puntos no determinan que Oviedo fuera Lucus Asturum, pero ese paso debe ser dado más adelante.
De momento he querido establecer unos axiomas válidos para ambos, y así poder establecer un método axiomático-deductivo posterior.
saludos.
8 May 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Sigamos como usted apunta. Esperaré a ver la ampliación argumental de su hipótesis.
Un saludo.
8 May 2009
Tomás
La distancia con Oviedo es, desde luego, muy pequeña, aunque yo no creo que Oviedo fuese Lucus Asturum, como propone D. Carlos Sánchez-Montana, pues la documentación medieval menciona muy tempranamente y de forma diferenciada tanto la ciudad de Ovetao como la de Lugo, con su iglesia, como ha argumentado D. Guillermo Caso, con referencias a varios documentos, a los que podemos añadir otro: el Testamento de Alfonso II, de autenticidad incuestionable: El Testamento de Alfonso II (P. Floriano) R. I D . E . A donde se menciona la ciudad de Ovetdao en el año 812, pero aún debía de ser más antigua pues se alude al nacimiento en ella del rey Alfonso II.
Una de las propuestas de Sánchez Montana trae a colación la localidad de Lugones, y habría que reflexionar sobre los diversos lugares del concejo, o aledaños, con ese nombre; por ejemplo cerca de la iglesia de Santa María de Bendones está el pueblo de Lloxu-Lúgico, mencionado en la documentación medieval como Lugigo(921) y Logicum(1083), ¿tendrán algo que ver estos nombres con la mansio Lugisonis del Anónimo de Rávena (Rav.321.1) como sugería Tovar? aunque de ser así el relato del Ravennate estaría alterado en el orden de las estaciones.
Saludos
8 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
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5) La ciudad de Ovetum, y fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
El principal:
Hofmann, Johann Jacob (1635-1706): Lexicon Universale, Historiam Sacram Et Profanam Omnis aevi, omniumque Gentium; Chronologiam Ad Haec Usque Tempora; Geographiam Et Veteris Et Novi Orbis; Principum Per Omnes Terras Familiarum [...] Genealogiam; Tum Mythologiam, Ritus, Caerimonias, Omnemque Veterum Antiquitatem [...]; Virorum [...] Celebrium Enarrationem [...]; Praeterea Animalium, Plantarum, Metallorum, Lapidum, Gemmarum, Nomina, Naturas, Vires Explanans. - Editio Absolutissima [...] Auctior [...]. - Leiden: Jacob. Hackius, Cornel. Boutesteyn, Petr. Vander Aa, & Jord. Luchtmans, 1698. 2° - T. 1: Literas A, B, C, continens. [6] Bl., 1072 S.; Kupfertit. - T. 2: Literas D, E, F, G, H, I, K, L, continens. [1] Bl., 900 S. - T. 3: Literas M, N, O, P, Q, continens. [1] Bl., 994 S. - T. 4: Literas R, S, T, V, X, Y, Z, continens. [1] Bl., CXXVI, 743, 116 S.- Satzspiegel 32,1 x 17,3 cm - Signatur: XN 9739.
http://www.uni-mannheim.de/mateo/camenaref/hofmann.html
Donde el término OVETUM figura:
OVETUM
urbs Legionis, insignis.
Asturiae Ovetensis caput, ad Astam fluv. quo reliquiae Gothorum confugêre, 16. leuc. Hispan. a Legione urb. in Circium, 6. ab ora maris Cantabrici in Meridiem, 18. ab Asturica in Boream, Episcopalis sub Archiepiscopo Castellano. Alias regni Ovetani caput, et regia sedes, cum post obitum Roderici, Gothorum Regis ultimi, Christiani a Mauris expulsi, et in Asturias compacti, Principem Pelagium elegerunt, A. C. 717. qui Ovetanum regnum instituit, quod Legionensis, A. C. 913. fermentum fuit; Tum enim Ordonnus 2. Regis Legion. titulum sumpsit. Hispanis Oviedo, hîc Concilium, A. C. 878. et 901.
page 506, image: s0506a
Este autor, lejos de la corte española y de la influencia asturiana, detalla el carácter romano de Oviedo, su proyecto, y su importancia religiosa y política.
Este Ovetum, en el territorio de los luggones, es un acontecimiento, de ser real es algo no explicado todavía.
Lo curioso es que los estudios y noticias del punto 4) anterior, ofrecen un soporte arqueológico muy completo a esta descripción: Una ciudad romana capital de los astures.
9 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
La existencia de opiniones a favor no deben ser tenidas en cuenta para la demostración de la validez histórica. Pero son antecedentes que enmarcan la historia de la ciudad.
"En este aspecto tiene especial interés constatar el descubrimiento de la invención de la sede episcopal de Lucus Asturum identificándola con Oviedo, ya claro en los apuntes de Juan Antonio. Éste analiza una serie de documentos falsos señalando la identificación Lucus Asturum-Oviedo como el móvil principal de don Pelayo."
"Historia, fueros y actitudes políticas: Mayans y la historiografía del 18" Antonio Mestre, Antonio Mestre Antonio Mestre Sanchís
“Lucus Asturum era la antigua denominación de Oviedo”.
Erich Richthofen. Nuevos estudios épicos medievales - Página 211
Editorial Gredos, 1970. Procedente de la Universidad de California
Con los anteriores cinco puntos he intentado elevar la favorable posición de Oviedo, como Ovetum romano, para merecer un análisis especifico de sus características y validar este enclave como el Lucus Asturum perdido.
El pasado romano de Oviedo crece cada día que pasa en un territorio donde Ptolomeo sitúa a la ciudad amurallada de Lucus Asturum, y donde ningún otro enclave compite en la importancia de sus hallazgos.
De eso trata el fondo del artículo: seleccionar 12 características comunes a los cuatro principales enclaves romanos de N.O., y comprobar su adecuación al enclave romano de Ovetum.
Si el proceso deductivo es positivo, luego Oviedo-Ovetum sería Lucus Asturum.
Creo que a lo largo del texto se presentan argumentos basados en las enseñanzas expuestas en “Tipología De La Edificación: Estructura Del Espacio Antrópico.” (Celeste Ediciones, S.A.) 1995. de los profesores Gian Luigi Maffei y Gianfranco Caniggia, que permiten pensar que Ovetum es la ciudad descrita en el “Lexicon Universale” por Hofmann.
Sin embargo la pregunta que primero plantea esta argumentación es la ya expresada más arriba por Guillermo.
¿Como se establece el cambio en el topónimo desde Lucus Asturum a Oviedo?
Intentaré en la próxima postal desarrollar este aspecto tan importante.
Saludos
9 May 2009
Carlos Sánchez-Montaña
6)Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
La principal desconfianza sobre la hipótesis, que determina que bajo las calles de Oviedo se encuentran las de Lucus Asturum, es la inexistencia de una continuidad en la toponimia.
Para una gran mayoría de los estudiosos Lucus Asturum y Oviedo son encalves diferentes y sus nombres demuestran esta diversidad.
Lucus originó Lugo, y Oviedo proviene de Ovetum, diferentes etimologías para emplazamientos diferentes.
Si los aspectos anteriores, que señalan a Oviedo y su casco antiguo, como el lugar de mayor índice de restos romanos del territorio de los luggones, no fuera suficiente, debemos de demostrar que el nombre de Oviedo tiene su origen en el enclave de Lucus Asturum.
Comencemos por el principio, Lucus Asturum, capital de los luggones, fue una ciudad amurallada. Si analizamos la transformación de los toponímicos de los enclaves romanos de época antigua podemos alcanzar alguna regla sencilla: Lucus Augusti como Lugo, Asturica Augusta como Astorga, Bracara Augusta como Braga, Colonia Iulia Augusta Faventia Paterna Barcino como Barcelona, o Lutetia Parisiorum como París, son varios de los ejemplos en los que podemos basar la evolución del nombre de la capital de los luggones.
Según esta regla a Lucus Asturum le podían corresponder dos topónimos posibles, o bien Lugo, a imagen del Lugo gallego, o bien Astorga, a imagen de la ciudad leonesa.
El primer nombre le corresponde por el tipo de enclave que se configuró en su génesis (lucus), el segundo por la gens a quién correspondía (astur).
El problema para la aplicación de esta sencilla regla toponímica fue que ambos nombres se encontraban asignados, Lugo y Astorga ya correspondían a ciudades importantes del N.O. Las capitales de sus respectivos conventos.
La muy extendida opinión que asigna a Lucus Asturum el emplazamiento de Lugo de Llanera se basa en esa sencilla regla lingüística. Hoy tenemos la certeza científica que en el lugar de Lugo y sus proximidades no existe evidencia alguna de la antigua ciudad de los luggones. Lugo de Llanera no corresponde a Lucus Asturum. Y posiblemente este topónimo, como el del enclave próximo de Lugones y el de Lugarín, son herederos de los pobladores dueños de este territorio, el pueblo de los luggones pertenecientes a la gens astur.
Son varios los autores que reniegan del pasado romano de Oviedo y del claro significado antiguo de su nombre.
Mi agradecimiento al brillante trabajo de Francisco Escobar García publicado en el año 1974: “El topónimo Oviedo ¿es un teónimo?” donde se establecen consideraciones muy razonadas y documentadas para poder comprender que el significado del topónimo de la capital de los asturianos es de carácter religioso. Algo que nadie se atrevería a discutir del nombre Lucus Asturum.
Desde la publicación del trabajo de Escobar García han transcurrido treinta y cinco años, y en este tiempo no ha alcanzado la difusión que se merece. Muchos de los estudiosos e investigadores de la historia de la ciudad ovetense no lo han considerado en su verdadero valor. Sus conclusiones solo han podido conseguir un mejor conocimiento del público a través de la red.
Basándome en su documentado ensayo pretendo demostrar que la forma Oviedo corresponde en su significado al mismo que el de Lucus Asturum. El enclave sagrado de los luggonnes del convento astur.
Lucus Asturum pertenece a un grupo muy especial de enclaves de origen romano que reciben el nombre sagrado de lucus. Lucus Augusti y Lucus Feroniae son otras dos ciudades que pueden permitirnos alcanzar alguna conclusión sobre como podía ser el enclave astur.
La palabra lucus, en la Roma del siglo I a.C., designaba el lugar donde se producía el contacto con el dios y que, en su origen, representaba un claro en el interior del bosque, bajo la bóveda celeste, y circundado por los árboles que imaginariamente la sostienen, favorecía la intima conversación con dios.
El lucus, por lo tanto, es el antecedente natural de un templo, la imagen prototípica del “lugar sagrado” construido por el hombre a imagen del lucus en el bosque, en medio de la naturaleza, la selva. Y Lucus Asturum era el lugar donde se levantaba el templo del principal dios de los astures, su capital religiosa.
Del urbanismo de Lucus Asturum poco nos cuentan las fuentes antiguas, pero su origen imperial puede hacernos considerar que en su interior guardaba un templo al dios Júpiter.
Escribe Vitruvio: “Los solares para los santuarios de los dioses tutelares de la ciudad y para Júpiter, Juno y Minerva elíjanse en un lugar suficientemente elevado, desde donde pueda observarse la mayor parte de la ciudad.”
Son varias las catedrales de Europa que han sido construidas sobre las cimentaciones de un templo dedicado a Júpiter. ( Santiago de Compostela, París, Tarragona).
A esta característica del urbanismo romano debemos de sumar la consideración que en la religión astur tenía el dios Júpiter, identificado como la divinidad principal del panteón indígena, Dies pater.
Escribe Escobar García:
Podemos asegurar sobre la base de las diferentes fuentes antiguas consultadas que Lucus Asturum poseía un valor religioso destacado por contar entre sus muros, y en lugar principal, un templo dedicado al dios principal de los astures, y que este no podía ser otro que una representación del Júpiter romano, y que era identificado con el Dis pater indígena.
Un enclave astur nombrado como un “Lucus” debía de contar con la presencia de un templo dedicado a Júpiter.
De la fortaleza de las antiguas representaciones de Júpiter en el territorio astur aún existen lugares dedicados con presencía en la toponimia y en otros nombres asturianos:
Por otra parte, y tal como establece Escobar García, el topónimo Oviedo posee rasgos suficientes, y hasta quizás sobrados, para identificar al lugar de Oviedo con un lugar dedicado a Júpiter:
CONCLUSION:
Es posible que la antigua ciudad romana de Lucus Asturum sufriera un cambio natural en su toponimia en época tardo-romana.
Que de forma simultanea a los cambios de los enclaves próximos, que derivaron el nombre de las ciudades hacía la búsqueda de nuevas formas más concisas con una clara “vulgarización” del topónimo, Lucus Asturum buscó su propio camino para su nueva identidad.
Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos.
Es muy probable que dentro del proceso general de “vulgarización” de los topónimos del imperio, durante el bajo imperio, cuando los enclaves sufren un proceso de independencia respectos a la metrópoli, los señores de Lucus Asturum decidieron un cambio que permitía diferenciar a su ciudad amurallada de las capitales de Lucus y Asturica.
Su valor diferencial, la ciudad sagrada dedicada a Júpiter, dios principal del panteón indígena y romano, fue la seña de identidad escogida para su nuevo nombre.
Cuenta la actual ciudad de Oviedo de innumerables evidencias para ser considerada como la capital religiosa de los luggones.
Con las anteriores consideraciones he intentado elevar la favorable posición de Oviedo como Ovetum romano, y así merecer un análisis especifico de sus características arqueológicas y urbanas, y validar este enclave como el Lucus Asturum perdido.
El pasado romano de Oviedo crece cada día que pasa en un territorio donde Ptolomeo sitúa a la ciudad amurallada de Lucus Asturum, y donde ningún otro enclave alcanza la importancia de sus hallazgos arqueológicos antiguos.
Ningún otro enclave conocido en Asturias atesora elementos que solo se justifican desde un origen romano. Oviedo ha sido construido por hombres verdaderos, no por héroes mitológicos o ángeles peregrinos.
Paradigma de lo expuesto es la Cruz de los Angeles, símbolo identitario de la ciudad de Oviedo, y del que hoy conocemos guarda un claro significado romano de fundación y de poder, y que de manera similar a la ciudad ha sido presentada durante siglos con una génesis puramente medieval. *
Fotografía ©Victorino Gutiérrez Martínez
*LAS JOYAS ROMANAS DE AUGUSTO EN LA CRUZ DE LOS ANGELES DE OVIEDO
Estudio presentado el arquitecto gallego Carlos Sánchez-Montaña y publicado en la portada del diario "La Nueva España" el 20 de enero de 2006. :“Las razones que argumenta para considerar que esta pieza perteneció al emperador Augusto las sustenta en las imágenes que contiene el sello, que responden a la simbología representativa del emperador.” VER INFORMACION
La historiadora Pilar García Cuetos, en entrevista realizada en La Nueva España el 24 de enero de 2006, y haciendo mención a la investigación inédita de Carlos Sánchez-Montaña: “Los monarcas asturianos se sienten herederos de los emperadores romanos.” VER INFORMACION
El profesor de la Universidad de Oviedo Lorenzo Arias en información publicada en La Voz de Asturias el 29 de enero de 2006 explica que “la cara principal de esta cruz de oro y piedras preciosas presenta entalles originales de la época imperial romana con representaciones mitológicas.” VER INFORMACION
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17 May 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Leo con interés tus aportaciones. Antes de responder, seguiré esperando al resto de tus comentarios, tal como habíamos quedado.
Un saludo
18 May 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Estimado amigo, Sr. Sánchez-Montaña:
Disculpe el retraso en contestarle, tal como le comenté que haría en el post “Los muros de una gran edificio….”, pero no siempre hay tiempo disponible cuando se quiere.
Bien, resumamos muy brevemente la cuestión que veníamos debatiendo:
1º Yo le había presentado, en un principio, una serie de argumentos por los cuales consideraba que no cabía aceptar su hipótesis de que Lucus Asturum era el enclave de Oviedo (véase mis dos comentarios de 04/05/09 y 06/05/09). Algunos de esos argumentos quedaron sin contestar por su parte.
2º Ud. se limitó a exponer seis razonamientos con los que estimaba se podía dar fundamentación a su hipótesis y que se resumen así (tal como figuran, igualmente, en su blog OVETUM).
A.- En Llanera y sus alrededores próximos no existe un yacimiento con entidad suficiente para ser reconocido como Lucus Asturum.
B.- El enclave de Lucus Asturum era, según las fuentes medievales, una ciudad amurallada.
C.- Según las coordenadas de Ptolomeo, Lucus Asturum puede estar emplazado en un área entre Lugo de Llanera y Oviedo (ambos incluidos), y con centro en Lugones.
D.- En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
E.- La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
F.- Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
3º Los tres primeros razonamientos o argumentos (A,B,C), prácticamente los debatimos ya, y no tengo inconveniente en admitirselos -tal como le dije en su momento-, porque, aunque se pueden hacer precisiones al respecto, en términos generales pueden aceptarse y tampoco comprometen en el sentido de asumir que Lucus Asturum era el enclave ovetense.
Punto “D”:
Ya más en desacuerdo estoy en este apartado. El número de elementos de época romana aparecidos en Oviedo no tiene un alcance tan decisivo como para decir que sobresale por ello en relación a Lugo de Llanera, y mucho menos para concluir o suponerla como la verdadera Lucus Asturum.
Le recuerdo que el entorno de Llanera también ha proporcionado apreciables vestigios romanos: no sólo tenemos la famosa lápida de los Lares Viales, sino los restos que se obtuvieron en el Canto (Castro) de San Pedro, el notable complejo alfarero de los hornos de Cayés, las cerámicas y restos de pavimento con ladrillos en forma de rombo halladas en la finca de “La Castañera”, al lado de la iglesia de Santa María (así como las termas que, según se presume, hay en su entorno), los restos de tégulas y mosaicos hallados en la finca de “La Castellana (al lado de la estación de Renfe), así como la no menos importante necrópolis de Paredes, o el conjunto de vestigios formado por estatuillas, monedas, medallas, teselas, que se han obtenido en su suelo, etc.
En cualquier caso, y como ya se ha subrayado en otras ocasiones, mientras no se lleven a cabo más excavaciones arqueológicas y se produzcan más hallazgos sustantivos en ambos lugares (Oviedo y Lugo de Llanera) difícilmente se podrá ir más allá en la interpretación del asunto en cuestión.
Punto E:
Respecto a este apartado, Ud. mismo, lo ha dicho: “La existencia de opiniones a favor no deben ser tenidas en cuenta para la demostración de la validez histórica”. Aunque luego apostille: “Pero son antecedentes que enmarcan la historia de la ciudad“.
Es decir, son sólo unas opiniones, y quizá emitidas, además, sin la suficiente información y documentación. Nada demuestran.
Luego expone Ud. lo siguiente:
"En este aspecto tiene especial interés constatar el descubrimiento de la invención de la sede episcopal de Lucus Asturum identificándola con Oviedo, ya claro en los apuntes de Juan Antonio. Éste analiza una serie de documentos falsos señalando la identificación Lucus Asturum-Oviedo como el móvil principal de don Pelayo."
"Historia, fueros y actitudes políticas: Mayans y la historiografía del 18", Antonio Mestre Sanchís.
Es esta una cuestión que conviene aclarar porque la repite Ud. bastante y, tal como está redactada, induce, a mi juicio, a suma confusión, cuando dice, incluso en su blog “OVETUM” lo siguiente: “No es la primera vez que un documento señala la identificación Lucus Asturum con Oviedo”, es decir, en relación al obispo D. Pelayo.
O sea, que tal parece que Ud. interpreta que el obispo D. Pelayo identifica también ambos lugares, cuando no hay tal cosa, sino que es todo lo contrario.
Esta referencia al obispo D. Pelayo, y la clara distinción que se desprende entre Lucus Asturum y Oviedo ya se lo hice ver en mi comentario del 06/05/09, cuando le señalaba que, el hecho de que se hablara de un traslado de la sede episcopal (con independencia de que hubiera sido inventado o no) de Lucus Asturum a Oviedo, ya demostraba claramente que el obispo D. Pelayo no identifica como sinónimos ambos enclaves y, por tanto, es una prueba palpable que se refería a que son distintos.
Le recuerdo mi argumento:
"Fíjese que en la misma referencia que usted cita (Vicente José González García. «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Astu...), se abunda en ello y se puede extraer la misma consecuencia cuando el autor recuerda lo que escribió el arzobispo de Toledo, D. Rodrigo Jiménez de Rada (1170-1247):
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica) en la que primeramente había sido establecida”.
Es decir, la exención que se buscaba de la diócesis de Oviedo (respecto de la Primada de Toledo) con base a los orígenes que aquélla tenia en Lucus Asturum (subrayando lo de su traslado, y lo de “primeramente”, por lo demás) permiten concluir que estamos hablando de dos enclaves distintos.
Punto “F”:
Es este, el de la interpretación de la evolución del topónimo de Lucus Asturum, un apartado realmente sorprendente en su conclusión.
Ese análisis que Ud. realiza, tomando como base el trabajo de Francisco Escobar García publicado en el año 1974: “El topónimo Oviedo ¿es un teónimo?” , y en virtud del cual sostiene que, en un momento dado de la historia de Lucus Asturum, en el proceso de vulgarización de su nombre, sus habitantes optaron por el cambio toponímico acudiendo a la posible referencia del enclave al dios Júpiter, esto es, Júpiter-Iove-Ovetum, no deja ser, a mi juicio, realmente, una pirueta argumentativa muy forzada.
Dice usted: “Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos”.
Tal parece que actúa Ud. aquí como Procusto, adaptando el problema de la evolución toponímica de Lucus Asturum al lecho de su hipótesis.
Para empezar, habría que decir que de la lectura del trabajo de Francisco Escobar no se deduce nada por el estilo de lo que Ud. apunta con respecto a la evolución toponímica de Lucus Asturum. El trabajo es en relación al posible origen toponímico de Oviedo como un teónimo, cosa que puede incluso considerarse dentro de las muchas aportaciones que se han realizado sobre el particular, pero que de ahí se derive lo que usted apunta media más de un trecho que salvar.
En este sentido, dice Ud. que el proceso evolutivo del topónimo se produce en tiempos tardorromanos, pero, claro, habría que preguntarse: ¿qué tiempos tardorromanos son esos?, ¿cuánto abarcan?, ¿cuándo se produjo, más o menos, ese cambio?
Veamos:
En el documento fundacional del convento de San Vicente, que describe la llegada de Máximo y Fromestano en el 761 al lugar, se dice "quod dicunt Oueto" y también “in isto loco iam dicto Oueto“.
Esto es: al menos en ese año (761) -y por razones obvias, quizás antes- el nombre que hace referencia a Oviedo ya está establecido.
Luego tenemos que Ptolomeo (que es del siglo II d.C.) cita a Lucus Asturum en su mapa de Hispania. Y luego tenemos también la compilación del Anónimo de Rávena (que es del siglo VII d. C., hacia el 670), el cual cita igualmente, en sus itinerarios de Hispania, a Lucus Asturum.
Es decir, que al menos hasta bien avanzado el siglo VII el topónimo de Lucus Asturum se mantiene, no sufre cambios ni hay evolución en el mismo de ningún tipo. Lucus Asturum es Lucus Asturum, y no es Oueto, ni Ovetao ni Oveto u Ovetum, o cosa que se le parezca.
En consecuencia, si se produjo la evolución toponímica de Lucus Asturum hacia el topónimo de Oueto u Ovetum, tuvo que haberse producido en sólo un siglo aproximadamente, entre el año 670 y el 761. Y quizás en menos tiempo, pues, ya digo, es de suponer que en el lugar "quod dicunt Oueto” ya se llamaría así bastante antes, no cuando recién llegaron Máximo y Fromestano. Y, por tanto, parece muy escaso el espacio temporal existente para que se hubiese producido esa compleja y curiosa evolución toponímica que Ud., Sr. Sánchez Montaña, supone como solución al problema.
El trabajo de Luis Escobar García es interesante para incardinarlo dentro de aquellos que suponen un origen del topónimo de Oviedo en relación al dios Júpiter, tal como el propio Vicente José González sostiene cuando recuerda que Plinio el Viejo alude al plomo negro “iovetano” y que “Oveto” era el centro de ese territorio “iovetano“. Pero ninguno de los dos (Escobar Garcia y Vicente José González) identifican ese “Oveto” y ese territorio “iovetano” con el enclave de Lucus Asturum.
De otra parte, cuando Ud. dice que se hizo necesario para Lucus Asturum, en el proceso de diferenciación y vulgarización toponímica, diferenciarse claramente de Lucus Augusti y de Asturica Augusta, Narciso Santos Yanguas, en su última obra “Asturias y los astures y la administración romana durante el Alto Imperio", en el capítulo dedicado a Lucus Asturum, mantiene que “… en la documentación antigua se aprecia un cuidado sumo en no confundir ambos topónimos, tal vez porque cada uno de ellos cumplía funciones específicas en el marco de la administración romana del noroeste peninsular”.
Es decir, que no parece que existiera esa necesidad a la que usted hace referencia. Además, el topónimo de Lugo de Llanera está ahí como herencia y es complicado obviarlo.
Por último, si admitimos su hipótesis del cambio toponímico (que es una hipótesis particular dentro de la hipótesis general), como ya le había apuntado (y usted no contestó), no se explica cómo en las donaciones de Alfonso III ("Ecclesiam Sancte Marie de Lugu cum suos muros antiquos") y Ordoño II (“Ciuitatem Lugo destructam cum eclesial Sancte Marie”) se hace mención en ambos casos a Lugo o Lugu. Si Lucus Asturum era Ovetum u Oviedo, ¿a cuento de qué aparece aquí esta referencia a Lucu o Lugo? Pues sencillamente porque hacen referencia a un lugar distinto.
¿Y qué decir de la carta documental del monasterio de San Vicente de Oviedo, fechada en el siglo X, -que también cita Santos Yanguas en el libro anteriormente reseñado- la cual, al delimitar una tierra objeto de venta, cita la “porta civitatis” de la “villa Luco” (“Placuit nobis ut vinderemus vobis terra in villa Luco, de porta civitatis usque in termino Berani“)?
En fin, Sr. Sánchez-Montaña, creo que, ante todo ello, su hipótesis es endeble. Hay demasiados escollos que salvar como para tomarla con suficiente consideración. Tenga en cuenta que, en toda la exposición que le he hecho, no se niega que la ciudad de Oviedo tenga un más que posible origen romano, pero ello no invita a concluir que pueda ser Lucus Asturum. Y, al mismo tiempo, el hecho de que no se pueda afirmar arqueológicamente con certeza que Lugo de Llanera es Lucus Asturum, no autoriza a establecer una hipótesis tan poco firme como la que Ud. presenta al identificarla con el enclave de Oviedo.
Es por ello que le he dicho, sin ningún ánimo peyorativo y sin ninguna intención de molestarle, que sus argumentos me parecen escasos y poco eficientes (deficientes) en orden a demostrar que hay que tener en cuenta su hipótesis como plausible.
Como siempre, reciba un cordial saludo.
5 Oct 2009
Carlos Sánchez-Montaña
Una hipótesis bien construida requiere al menos tres argumentos que la respalden.
Usted me reconoce al menos tres válidos, pero mi hipótesis se basa en seis.
Seis argumentos para fijar el emplazamiento más probable para la capital religiosa de los luggones, en la Asturia transmontana, y del que en el momento actual no existe certeza arqueológica.
Lo que me permite avanzar de forma holgada.
Le recuerdo que un solo argumento carece de validez, pero la presentación de seis, frente a la endeblez de alguno, no merece el comentario con las palabras que usted utiliza.
Propongo complemento de las “debilidades” que usted señala en los tres restantes:
4) En el entorno próximo a Lugones, centro coincidente con las coordenadas de Ptolomeo, el emplazamiento que hasta la fecha ha presentado mayor número de elementos antiguos y romanos es Oviedo.
El suflé que establecía el emplazamiento de Lucus Asturum en la zona de Lugo de Llanera se ha desinflado de manera definitiva por razones científicas.
Nada permite identificar ese lugar con la antigua ciudad de Lucus Asturum.
Escribe Santos Yanguas:
“Los intentos de excavación arqueológica llevados a cabo en el presumible centro de hábitat antiguo en Lugo de Llanera no han dado los resultados deseados....”
pag 513. Asturias, los astures y la administración romana durante el Alto Imperio Santos Yanguas, Narciso
Y Carmen Fernández Ochoa: “que apuesta por una serie de núcleos dispersos en la zona y ve menos posible un único asentamiento fortificado“.
Si solo uno de los últimos hallazgos aparecidos en Oviedo hubiera sido encontrado en los alrededores de Santa Maria de Lugo, repito solo uno, tendríamos las campanas repicando en las cátedras ovetenses
Todos los estudios y noticias que reseño en mi anterior comentario permiten asegurar que el enclave de Oviedo tuvo un pasado romano, y que en el entorno determinado dentro la imagen superior, ningún otro lugar posee tales valores arqueológicos.
La ciudad de Oviedo es el emplazamiento más fértil en elementos romanos: numismática, elementos urbanos, arquitectónicos, dentro del territorio de su entorno. Con una enorme distancia.
5) La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
Las lecturas de textos pueden ser subvertidas según las intenciones de sus lectores.
Los textos del obispo Pelayo han estado sujetos a múltiples controversias.
Me confirmo en lo dicho:
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal de Lugo”
Trasladar.
(De traslado).
1. tr. Llevar a alguien o algo de un lugar a otro. U. t. c. prnl.
2. tr. Hacer pasar a alguien de un puesto o cargo a otro de la misma categoría.
3. tr. Hacer que un acto se celebre en día o tiempo diferente del previsto.
4. tr. Pasar algo o traducirlo de una lengua a otra.
5. tr. Copiar o reproducir un escrito.
NO NECESARIAMENTE SE CAMBIA DE LUGAR EN UN TRASLADO, EL LUGAR PUEDE SER EL MISMO PERO CAMBIA LA LENGUA.
Pelayo identificó a Lucus Asturum con Oviedo y por ello fue tachado como mentiroso por la historiográfica posterior.
“Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es invención pelagiana.”
“Oviedo niega la dependencia, aboga por la exención y busca los orígenes de ella, y son aceptados por Roma, en la ciudad de Lucus Asturum que siempre dependió de la Santa Sede y nunca del Primado de Toledo.”
EL OBISPO DON PELAYO, CLAVE PARA EL ESTUDIO DE LA HISTORIA DE ASTURIAS
VICENTE J. GONZÁLEZ GARCÍA
"Sin insistir en el distinto carácter que esta técnica tenía para los autores del medievo, hay que reconocer que muchos de los datos ofrecidos en la compilación pelagiana no pueden ser tildados de falsos, salvo la invención de la existencia de una sede, en tiempos de los vándalos, en Lucus Asturum, lo cual es evidentemente inverosímil"
PELAYO DE OVIEDO, SIGNO DE CONTEIADICCION
EMILIANO FERNAlSnDEZ VALLINA
Mi hipótesis no es nueva, ese el el quinto argumento, antes que yo otros lo han enunciado.
Repito, quinto argumento de seis presentados.
6) Lucus Asturum y Oviedo tienen mismo significado toponímico.
Solo una pregunta frente a tanto enmarañamiento que utiliza para argumentar en mi contra:
¿Que divinidad indígena ocuparía el lugar más importante en el panteón de Lucus Asturum?
La respuesta es clara para mí:
Podemos asegurar sobre la base de las diferentes fuentes antiguas consultadas que Lucus Asturum poseía un valor religioso destacado por contar entre sus muros, y en lugar principal, un templo dedicado al dios principal de los astures, y que este no podía ser otro que una representación del Júpiter romano, y que era identificado con el Dis pater indígena.
Un enclave astur nombrado como un “Lucus” debía de contar con la presencia de un templo dedicado a Júpiter.
Por otra parte, y tal como establece Escobar García, el topónimo Oviedo posee rasgos suficientes, y hasta quizás sobrados, para identificar al lugar de Oviedo con un lugar dedicado a Júpiter:
Que nombre más “propio” que el derivado de su significado original, un lugar dedicado a IOVE, a Júpiter: Ovetum.
Es Oviedo un teónimo que sustituye el valor sagrado del topónimo original. Júpiter, que encabezaba el panteón de la ciudad de Lucus Asturum identificará al enclave astur desde los tiempos tardo-romanos.
Es muy probable que dentro del proceso general de “vulgarización” de los topónimos del imperio, durante el bajo imperio, cuando los enclaves sufren un proceso de independencia respectos a la metrópoli, los señores de Lucus Asturum decidieron un cambio que permitía diferenciar a su ciudad amurallada de las capitales de Lucus y Asturica.
Su valor diferencial, la ciudad sagrada dedicada a Júpiter, dios principal del panteón indígena y romano, fue la seña de identidad escogida para su nuevo nombre.
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LA BUSQUEDA DE LUCUS ASTURUM
© Carlos Sánchez-Montaña
Seis argumentos para fijar el emplazamiento más probable para la capital religiosa de los luggones, en la Asturia transmontana, y del que en el momento actual no existe certeza arqueológica.
11 Oct 2009
Guillermo Caso de los Cobos
Bueno, Sr. Sánchez-Montaña, veo que usted se limita a reafirmarse en sus argumentos, sin aportar nada nuevo y sin contestar a las objeciones que le he hecho a su hipótesis (sobre todo, la relativa al cambio toponímico de Lucus Asturum por Ovetum-Oviedo). Así, difícilmente podemos avanzar.
No obstante, le diré que me sorprende que siga usted confundiéndose con la cuestión del hipotético y polémico traslado del obispado de Lucus Asturum a Oviedo en tiempos del obispo D. Pelayo, aduciendo, ahora, que el verbo trasladar tiene varias significaciones, y que en el caso que nos ocupa, según Ud., "NO NECESARIAMENTE SE CAMBIA DE LUGAR EN UN TRASLADO, EL LUGAR PUEDE SER EL MISMO PERO CAMBIA LA LENGUA". Es decir, supongo que está Ud. aquí aplicando la cuarta acepción de las cinco que pone del significado de "trasladar".
O sea, que Ud. entiende que no hay tal traslado, sino lo que hay es una especie de "traducción", que lo que se traslada es un cambio de nombre, esto es, que Fruela "traslada" el nombre del obispado Lucus Asturum al nombre de Oviedo como tal.
Desde luego, si esto es así, si no le he interpretado mal, debo decirle que su forma de argumentar esta cuestión es sumamente curiosa por no decir sorprendente.
Primero, porque, cuando Ud. dice afirmarse en que “Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal de Lugo”, es evidente que resulta muy forzado no sólo ya irse hasta la cuarta acepción del significado del verbo "trasladar", sino aplicar esa acepción a dicha frase.
Y segundo, porque dicha acepción, y la interpretación que de la misma Ud. hace, salta por los aires cuando omite la preposición "desde" en la frase aludida, la cual, tal como figura en el trabajo de Vicente José González García, «El obispo Don Pelayo, clave para el estudio de la historia de Asturias». El Basilisco, número 8, julio-diciembre 1979, figura enteramente de este modo:
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica) en la que primeramente había sido establecida”.
Esa preposición "desde" indica distancia, de un lugar a otro lugar. En este caso, de Lugo a Oviedo, por lo cual son enclaves distintos. Pero, además, léalo Ud. bien, se dice "en la que primeramente habia sido establecida". Más claro, agua (con independencia de que sea invención o no del obispo D. Pelayo el establecimiento de esa sede episcopal en Lucus Asturum).
En fin, no sé ya cómo decírselo: el obispo D. Pelayo no identificó nunca Lucus Asturum con Oviedo, tal como usted afirma. Todo el punto 4º del trabajo de Vicente José González está desarrollado en esta línea. La primera frase de este punto 4º que usted reiteradamente cita, "Lucus Asturum como ciudad y sede episcopal es invención pelagiana", es la opinión del profesor Javier Fernández Conde contra la que argumenta precisamente Vicente José González.
Por lo demás, ya veo que el resto de argumentos (nombres de la iglesias donadas por Alfonso III y Ordoño II, etc.) que le doy los encuentra, a pesar de la claridad expositiva que he procurado darles, enmarañados, y opta por no contestarlos.
Sin embargo, déjeme reiterarle que, el argumento de que todavía en el siglo VII el Anónimo de Rávena se refiera a Lucus Asturum como enclave, sigue siendo una seria objeción a su hipótesis del posible cambio toponímico. Como mínimo indica que hasta ese siglo no hubo necesidad de cambiar el nombre de Lucus Asturum por el de Oviedo.
Salvo que Ud. crea conveniente contestar de nuevo, por mi parte dejo aquí ya este interesante debate. Los argumentos (y las ausencias de algunos de ellos) están sobradamente expuestos por ambos. Si en un futuro surgen datos nuevos (a favor o en contra de su hipótesis) no dudo que con sumo gusto los analizaremos.
Un cordial saludo
13 Oct 2009
Carlos Sánchez-Montaña
Veo que sigue con su intención de dirigir el debate a su única manera.
Escribiré sobre el tema siempre que me parezca oportuno.
Le repito que mi hipótesis se basa en seis argumentos que la construyen.
Argumento 5) La ciudad de Ovetum, fuera del ámbito Asturiano, es reconocida como ciudad de fundación romana por algunos autores.
Usted puede asegurar transcripciones de las palabras de Pelayo realizadas por otros.
Son varios los que indican que Pelayo se caracterizó por defender una continuidad histórica entre Lucus Asturum y Oviedo.
No repetiré los argumentos ya expuestos.
“Fruela trasladó a Oviedo la Sede Episcopal desde Lugo, ciudad magnífica (urbs magnifica>>) en la que primeramente había sido establecida”.
Esta frase en latín original puede ser transcrita para que diga una cosa y su contraria
Cual es la magnifica ciudad a la que se refiere. No existe conocimiento de otra que no sea la que se levantaba en el lugar de Oviedo.
La reseña de Rávena en el siglo VII de la ciudad de Lucus Asturum nos permite imaginar como este enclave presenta sus murallas en pié cuando Fruela I traslada la capital a Oviedo en el VIII.
Ya que ambos emplazamientos son la antigua capital, el mismo lugar edificado de origen romano, tal como describe:
Hofmann, Johann Jacob (1635-1706): Lexicon Universale,
OVETUM urbs Legionis, insignis.
Asturiae Ovetensis caput, ad Astam fluv. quo reliquiae Gothorum confugêre, 16. leuc. Hispan. a Legione urb. in Circium, 6. ab ora maris Cantabrici in Meridiem, 18. ab Asturica in Boream, Episcopalis sub Archiepiscopo Castellano. Alias regni Ovetani caput, et regia sedes, cum post obitum Roderici, Gothorum Regis ultimi, Christiani a Mauris expulsi, et in Asturias compacti, Principem Pelagium elegerunt, A. C. 717. qui Ovetanum regnum instituit, quod Legionensis, A. C. 913. fermentum fuit; Tum enim Ordonnus 2. Regis Legion. titulum sumpsit. Hispanis Oviedo, hîc Concilium, A. C. 878. et 901.
page 506, image: s0506a
No quiero valorar la clásica historiografía asturiana sobre la hipótesis de la fundación de Oviedo por los “famosos” monjes y sus posteriores enjuagues.
Solo señalar que este episodio mítico y falso es de similar manufactura al de la construcción de la Cruz de los Angeles por dos peregrinos “alados”.
Paradigma de lo expuesto es la Cruz de los Angeles, símbolo identitario de la ciudad de Oviedo, y del que hoy conocemos guarda un claro significado romano de fundación y de poder, y que de manera similar a la ciudad ha sido presentada durante siglos con una génesis puramente medieval.
El significado histórico de la Cruz de los Angeles es paralelo al de los muros de Oviedo. Las joyas de origen romano que se engarzan en su estructura de madera son imagen fiel de los elementos romanos que la ciudad histórica oculta, y que se muestran de forma ocasional bajo sus calzadas medievales.
La Cruz de los Angeles sigue siendo el más valioso símbolo sobre el verdadero origen de la ciudad: capital romana oculta y olvidada por imposición del poder religioso medieval y que conserva en su topónimo actual todo el valor de su antiguo nombre romano. Lucus Asturum.
13 Oct 2009