Imagen aérea de las Termas de Allon antes de que el solar fuera cubierto hace unos años.

Vía: Información.es| 23 de septiembre de 2011

Bares y tiendas en la calle principal. Podría ser cualquier ciudad actual pero se trata de Allon, la ciudad romana sobre la que hoy se asienta La Vila. Así se desprende de una investigación elaborada por la Concejalía de Patrimonio Histórico, a través de la Sección Municipal de Arqueología, Etnografía y Museos.

La fachada este de las termas de Allon estaba formada por una serie de tiendas que daban a la calle principal de la ciudad, el Kardo Maximus. A raíz de esta investigación, el concejal de Cultura y Patrimonio Histórico, Pepe Lloret, explicó que "los arqueólogos han descubierto cómo era la calle principal de la ciudad, el Kardo Maximus, que tenía aceras, estaba flanqueada de tiendas y bares y se necesitó arreglar frecuentemente su pavimento por los desperfectos causados por los carros cargados de mercancías".

Los responsables de la investigación arqueológica, realizada para preparar la restauración de las Termas de Allon aportan información sobre el Kardo Maximus; ha salido a la luz que la calle principal tiene exactamente la orientación que se esperaba, una línea perfecta norte-sur, como es preceptivo en las ciudades romanas, señalaron fuentes municipales.

Consiste en una calle de cinco metros de ancho de la que conservaba el rudus, o capa de nivelación de gravas, sobre el cual estaba el pavimento (summa crusta, actual asfalto), sobre el que circulaban carros y personas. Otros datos relevantes del Kardo Maximus es que en el lado este estaba flanqueado por un murete de delimitación y en el oeste se conserva una acera romana, más alta y estrecha que las actuales; desde la calle se accedía a una zona de servicio de acceso restringido de las termas, mediante una puerta de doble batiente de la que se conservan los sillares laterales con los goznes (agujeros) para que giraran las dos hojas de la puerta, así como otro sillar en el centro para enganchar las fallebas (barras de hierro verticales para cerrar), agregó Lloret.

Tumbas a lo largo de la calle

La calzada romana, que se repavimentó en época del emperador Tito Flavio Domiciano (hacia 85 d. C.), al mismo tiempo que se construían las termas, estaba superpuesta a otra anterior del siglo I a. C. A los lados de esa calle más antigua se encontraron tumbas, lo que demuestra que antes de que el emperador Vespasiano concediera a Allon la categoría de municipium latinum (con lo que la convertía en una de las diez ciudades privilegiadas de la Comunidad Valenciana), por esta zona todavía no se había expandido el núcleo urbano. Esta conclusión es científicamente "muy importante" porque los iberos y los romanos nunca enterraban dentro de las murallas de las ciudades (lo prohibía la Ley de las XII Tablas): por tanto, ahora se demuestra que tras recibir el título de municipium la ciudad decidió expandirse fuera del viejo recinto amurallado.

La restauración y musealización de estas termas imperiales, uno de los monumentos romanos más importantes de la Comunidad, para convertirlas en un recurso cultural y turístico contemplará la conservación y restauración de este Kardo Maximus, las aceras y la entrada de servicio de las termas. Después de 2000 años, la calle Canalejas ha respetado el trazado del Kardo Maximus de Allon.

Posts de Terrae Antiqvae relacionados:

* Ritos y creencias romanas: la torre funeraria Sant Josep de La Vi...

* Un grupo de arqueólogos halla en Villajoyosa la antigua ciudad ro...