Esferas de Mesopotamia, un código prehistórico anterior a la escritura

Las bolas de barro varían de tamaño, de una pelota de golf a una de baloncesto, y son recipientes en cuyo interior se guardan diversos tótems o figuras geométricas. En el exterior de las bolas existen dos sellos o marcas, una que rodea la esfera como una línea ecuatorial y otra en los polos. La primera identifica al comprador, la segunda, al vendedor,y en el interior la figura revelaría la cantidad y el tipo de bien adquirido.

Fuente: Julio MARTÍN ALARCÓN | La Aventura de la Historia, 14 de octubre de 2013

Fotos Credit: Anna Ressman/Courtesy Oriental Institute of the University of Chicago.

Estos son algunos de los fascinantes hallazgos de Christopher Woods, profesor del Instituto Oriental de la Universidad de Chicago, que tras estudiar las misteriosas esferas, ha presentado las primeras conclusiones de sus hallazgos en el Real Museo de Ontario en Toronto, Canada, tal y como ha informado Livescience. Woods y su equipo creen que podría tratarse del primer sistema de registro de datos de la humanidad que se conoce. Sólo existen 150 esferas de barro intactas con símbolos en su interior que se han estudiado, sin romper, con escáneres TAC -Tomografía Axial Coputerizada- y renderización en  3D.

Con ellos han podido analizar las 20 esferas halladas en el yacimiento de Choga Mish, en Irán oriental, en la década de los 60, esferas que se fabricaron aproximadamente hace 5.500 años en la época en la que comenzaron a florecer las ciudades en Mesopotamia, considerada la cuna de la civilización.

Los investigadores han considerado desde hace tiempo que estas bolas de barro fueron creadas para algún tipo de intercambio comercial, sobre todo a partir del análisis de una bola posterior, de unos 3.500 años de antigüedad denominada Nuzi, hallada en lo que fue la antigua Mesopotamia, que contenía en su interior 49 guijarros y que venía acompañado de un texto en caracteres cuneiformes que citaba 49 ovejas y cabras.

Esta esfera sería el vínculo entre el antiguo sistema de registro antes de la escritura y su paulatina sustitución por la misma, en una suerte de periodo de transición en el que todavía se utilizaban las esferas, pero se comenzaba a consignar su contenido con texto. Ahora bien, establecer cómo funcionaban estos objetos en la Prehistoria, antes de que la escritura fuera inventada, sigue siendo un misterio,  de ser ciertas sus suposiciones, los investigadores tratarán de averiguar ahora cómo podían registrar los hombres de la Prehistoria el número y el tipo de materia sin la escritura.

Según la tesis de  Woods, los objetos geométricos depositados en el interior de las esferas -pirámides, ovoides, esferas, conos..-  no representarían  palabras, sino más bien números relacionados con un tipo de bien concreto. Por ejemplo, un figura ovoide podría representar un número, 10, que además identificará un tipo de bien.

Respecto a los sellos grabados en el exterior de las bolas de barro, los investigdores han identificado dos tipos, uno que sigue la línea del ecuador de la esfera con figuras complejas mitológicas, como un grupo de hombres luchando contra unas serpientes, mientras que las que siguen los polos son más simples -figuras geométricas y se repiten más habitualmente.

Este detalle lleva a la conclusión al equipo de expertos de que podría tratarse de la forma de identificar al vendedor y al comprador, respectivamente. Frente a muchos compradores habría pocos distribuidores o vendedores, lo que explicaría que estos estuvieran representados en el sello vertical y sus figuras se repitieran más a menudo, mientras que el otro sello respondería al comprador, lo que explicaría la mayor complejidad del dibujo representado y su gran variedad.

Cuando una transacción se completaba se fabricaba uno de estos objetos que serviría como “recibo” o prueba de dicha transacción. De ser ciertas sus suposiciones, el reto consistiría ahora en descifrar el código utilizado para dichos registros de compras y ventas, es decir identificar cada figura con un sistema métrico o numérico y un bien relacionado.

La clave para poder hacerlo está en las posibilidades que les brinda la nueva tecnología como los escáneres TAC -Tomografía Axial Computerizada- y los modelos 3D, ya que de esta forma pueden estudiarlos sin necesidad de romper las esferas o envoltorios, lo que representa una ventaja para estudiar los objetos y la forma en la que fueron guardados, sin el riesgo de dañar ninguna de sus partes.

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Comentario por Alicia M. Canto el octubre 15, 2013 a las 8:27am

Es chocante que algo que se sabe hace tantos años pueda ser presentado como un descubrimiento actual. Estas "bolas de barro", que solemos llamamos bullae, por su nombre latino, se explican habitualmente como la fase inicial del cuneiforme sumerio en su fase pictográfica, y con un uso básicamente contable.

Ello fue a partir de la aceptación del descubrimiento/propuesta, a fines de los años 70, del investigador Stephen J. Lieberman (Univ. de Pennsylvania, USA) expresado, por ejemplo, en su famoso artículo “Of Clay Pebbles, Hollow Clay Balls, and Writing: A Sumerian View”, American Journal of Archaeology 84/3, jul. 1980, pp. 339-358. Hace de ello nada menos que 33 años:

Abstract:

Small regularly shaped clay objects and hollow clay bullae have come to recent attention as possible precursors to the invention of writing in the ancient Near East. The interpretation of these objects as accounting devices has found primary textual support in cuneiform documents excavated in ancient Nuzi which are considerably later than the objects. This article provides documentation for the use of such objects in earlier times, in Sumer, where writing is thought to have originated. The relevance of the manipulation of such calculi to the prehistory of the cuneiform system of numbers is explored. A differentiation in usage between curviform and cuneiform numerals beginning in pre-Sargonic times and continuing into the Ur III period is seen as a reflection of actual use of the clay calculi in accounting, and bureaucratic practice is inferred from the representational distinction. Sumero-Akkadian lexicons which apparently list clay calculi among other bookkeeping devices are interpreted as showing that the Sumerian word for "clay calculus" was /imna/, "clay stone"... etc.

En aquel momento, años 80, estas bolas selladas se estudiaban o bien abriéndolas, o bien a través de rayos X, que era el mejor método por entonces disponible.

Tras los complementos de estudio de otros autores, la convincente propuesta pasó a obras de síntesis, como ésta de 1992: Denise Schmandt-Besserat, Before Writing, Vol. I: From Counting to Cuneiform, University of Texas Press, 1992. Enlacé en él las páginas donde se habla de tales "clay balls" o bolas de arcilla (junto a otros métodos de contabilidad de la misma o parecida época: conos, discos, tetraedros...), o de Lieberman y el proceso mismo de la hipótesis (págs. X y passim).

Hasta ahora se piensa que se trata de un inteligente sistema de sellado de los objetos o productos almacenados o remitidos. Una especie de sobre y "lacre" de garantía y antifraude, pues hay que reescribirlo o romperlo para poder modificar el contenido.

Supongo que la novedad estará en las nuevas técnicas de aproximación y estudio de tales objetos, como el TAC, y en alguna teoría particular sobre el uso. Pero no me parece cierto lo que se afirma en la noticia original: "Ahora bien, establecer cómo funcionaban estos objetos en la Prehistoria, antes de que la escritura fuera inventada, sigue siendo un misterio, de ser ciertas sus suposiciones, los investigadores tratarán de averiguar ahora cómo podían registrar los hombres de la Prehistoria el número y el tipo de materia sin la escritura".

Aunque se haga preceder por dos de las palabras mágicas para llamar la atención en los titulares de prensa de nuestro tiempo: "código" y "perdido"... que en efecto traduce el titular en inglés en LiveScience: "Clues to Lost Prehistoric Code Discovered in Mesopotamia". Y aparezca en ella el tercer "mantra" indispensable: "misterio"...

Comentario por María // el octubre 16, 2013 a las 11:57am

Gracias por la aclaración ,Alicia;yo oí hablar de estas "bullae" esta primavera,en las conferencias sobre el mundo sumerio del caixa forum y al ver esta noticia pensé en ellas,pero no me atreví a comentar nada porque si era novedad y metía la pata.Qué manía  con los grandes titulares . Lo que sí está bien es que se pueda conocer el contenido sin necesidad de romper la pieza,aunque no sé si se podrá perder otro tipo de información que no pueda recojer el escaner

Saludos

Comentario por Mª YSABEL el octubre 17, 2013 a las 10:13am

       Por aquí os pongo un estudio astrológico, en donde, buscando nuestros primeros indicadores soli-lunares, me encontré con las bullaes... 

             http://astrologosdelmundo.ning.com/profiles/blogs/cronos-resumen-de...

       Lo que sí se nota, es la estupenda calidad de las fotos..., en comparación con el material que ha habido hasta ahora. ¡Saludos!

 

Comentario por Luis Castaño Sánchez el agosto 17, 2014 a las 6:15am

Muy interesante ese estudio, Mª Ysabel. Gracias por poner el enlace. Saludos.

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