Detalle de la excavación de Puerta Castillo, en el interior de la Casona de Víctor de los Ríos. Debajo, restos de la coraza romana que se ha extraído.

Vía: Diario de León | Verónica Viñas | 16 de marzo de 2012

La Casona de Víctor de los Ríos sigue desvelando secretos. En la nueva excavación que está llevando a cabo el Ayuntamiento de León en el interior del edificio de Puerta Castillo, donde previsiblemente se creará un aula arqueológica dedicada al pasado romano de la ciudad, se han desenterrado ya fragmentos de una coraza (lorica segmentata) de un soldado de la Legio VII. En concreto, han aparecido flejes de hierro con pequeños remaches de bronce, que servirían para articular o abrochar la armadura.

El hallazgo se suma a los descubrimientos de abril del año pasado en este mismo inmueble, cuyo subsuelo escondía una lucerna (lámpara de aceite) y restos de tres corazas romanas. Las piezas se encuentran desde entonces en el Museo de León.

«Dichas armaduras quedaron abandonadas o arrinconadas y la destrucción del edificio donde se encontraban —posiblemente un almacén— ha permitido su conservación hasta hoy en día. El estado de los restos es muy delicado, por lo cual el departamento de restauración del Museo de León está colaborando en su extracción y posterior restauración», según Jesús Courel, jefe del Servicio Territorial de Cultura de la Junta.

El solar prodigioso. También las corazas que se descubrieron el año pasado estaban en mal estado. Sin embargo, cada resto romano que se recupera del subsuelo aporta datos que, en su conjunto, permiten ir recomponiendo la historia de los fundadores de la ciudad. La Casona de Puerta Castillo, que podría albergar en el futuro las lápidas funerarias que se extrajeron hace tres años de la muralla, está enclavada en un solar que ha resultado una auténtica ‘mina’ arqueológica.

En la finca que existe en la parte posterior del inmueble, una parcela de 800 metros cuadrados, aparecieron a finales de los noventa las primeras pruebas de la existencia de la Legio VI. El hallazgo de restos de barracones militares probaron en 1998 las tesis expuestas en los años 60 por García Bellido de que la ciudad de León la fundó un acantonamiento romano anterior a la Legio VII. En aquella excavación salió a la luz parte de la coraza de un legionario, que hoy puede contemplarse en una vitrina del Museo de León (izquierda).

En más de 300 excavaciones de la ciudad han aparecido muchos fragmentos de lucernas de cerámica, pero la que se localizó en abril en Puerta Castillo es la primera de bronce que aparece. De hecho, la única lucerna de bronce que hay en el Museo de León, con una máscara teatral rematando el asa, procede del yacimiento de Lancia, según el testimonio del propietario que la donó al museo en el siglo XIX.

El arqueólogo municipal, Victorino García Marcos, asegura que apenas se han encontrado restos de la Legio VI en las 300 excavaciones que se han llevado a cabo en el casco antiguo de la ciudad en los últimos años. El principal motivo es que el primer campamento de la Legio VI era de madera. La aparición de ‘contados’ materiales, como objetos y cerámicas, han arrojado algunos datos, pero poco se sabe sobre el trazado del campamento de la Legio VI.

Fue la Comisión Territorial de Patrimonio quien, el pasado mes de marzo, aconsejó nuevas excavaciones en la Casona en la que recientemente fue desalojado el CCAN, para proseguir los hallazgos de abril del año pasado. La excavación, que lleva a cabo la empresa Decolesa, así como los trabajos de arqueología, encargados a Talactor S.L., tendrán una duración aproximada de un mes. En el inmueble, que lleva ‘en obras’ 14 años, el Ayuntamiento ha invertido más de cuatro millones de euros.