La Guardia Civil, en el transcurso de la operación “hierática” en la que ha trabajado coordinadamente con el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y la Agencia Tributaria, han desarticulado un grupo dedicado al expolio de bienes culturales de yacimientos arqueológicos egipcios para su posterior comercialización en otros países. El valor total del expolio podría rondar los 300.000 euros, aunque aún quedan por tasar varios de esas piezas.

En la operación fueron detenidos cinco integrantes de la red en Barcelona y Tortosa (cuatro ciudadanos de origen egipcio y un anticuario español) y otros dos en Egipto por un presunto delito de contrabando de bienes culturales, blanqueo de capitales u pertenencia a grupo criminal internacional.

La Unidad del Servicio Fiscal de la Guardia Civil en el puerto de Valencia inspeccionó unos contenedores con vasijas decorativas de escaso valor, procedentes de Alejandría (Egipto) con destino a Barcelona y detectaron una serie de piezas ocultas en su interior. Tras las primeras investigaciones se identificó que el destinatario era un Egipcio residente en Barcelona. 27 Bancos fueron controlados, 2352 casas de subastas y Europol ha intervenido 2289 bienes culturales. En el marco de la operación hierática, la guardia civil se incautó de 36 bienes arqueológicos, con 3.000 años de antigüedad.

La unidad de patrimonio de la Guardia Civil determinó que existían dos grandes grupos en esta trama: uno en Egipto y otro en Barcelona. Cuatro personas se encargaban del contacto directo con Egipto. El líder se ocupaba a la gestión de los envíos por contenedor y se apoyaba en otro que era en el encargado de la logística: gestionar los almacenamientos, las aduanas, etc. Otro se encargaba de desplazarse a Egipto para gestionar el envíos que se desconoce cuántos envíos llegaron a realizarse en total. De hecho, cuando la Guardia Civil detectó los envíos preparaba un nuevo envío más para compensar las pérdidas de lo incautado. Había otros dos que actuaban como testaferros cediendo su nombre para llevar a cabo los envíos y un español encargado de ponerlos en el mercado de subastas. En Egipto las autoridades también han detenido a otras personas.

Dado el valor de los bienes culturales intervenidos, la subdirección de protección de patrimonio histórico determinó que el mejor lugar para la custodia, conservación y peritaje de las piezas era el Museo Arqueológico Nacional, donde fueron analizadas en profundidad por expertos.

El director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa destacó el trabajo realizado por más de 3700 agentes del Cuerpo que empezaron en junio de 2014 y tuvo su culminación en noviembre.

Fernández de Mesa recordó la conexión que puede existir entre este tipos de delitos y las redes del terrorismo yihadista ya que, destacó, podría suponer una fuente de inversión a estas organizaciones terroristas.El capitán responsable de la operación destacó que no es a España a quien le corresponde investigar en Egipto, pero sí se ha investigado desde aquí sobre todo al intermediario internacional. En Egipto siguen trabajando de la posible conexión entre esta red y las redes criminales.

Asimismo, De Mesa felicitó a la Europol por su ejercicio de coordinación, a los ministerios que han colaborado en dicha operación.

La pieza con más valor es la cabeza que representa a la diosa Sejmet que rondaría cerca de los 100.000 euros ella sola. Con respecto a los bienes incautados, se devolverán a Egipto, si país de origen. Se ha hecho un inventario de ellas, la posible valoración económica y los años de la misma y su valor histórico.

Fuente: La Razón, 28 de enero de 2015