Imperio Romano

El Imperio romano fue una etapa de la civilización romana en la Antigüedad clásica, posterior a la República romana y caracterizada por una forma de gobierno autocrática. El nacimiento del Imperio viene precedido por la expansión de su capital, Roma, que extendió su control en torno al mar Mediterráneo. Bajo la etapa imperial los dominios de Roma siguieron aumentando hasta llegar a su máxima extensión durante el reinado de Trajano, momento en que abarcaba desde el océano Atlántico al oeste hasta las orillas del mar Caspio, el mar Rojo y el golfo Pérsico al este, y desde el desierto del Sahara al sur hasta las tierras boscosas a orillas de los ríos Rin y Danubio y la frontera con Caledonia al norte. Su superficie máxima estimada sería de unos 6,5 millones de km².

El término es la traducción de la expresión latina Imperium Romanum, que significa literalmente «El Dominio de Roma». Polibio fue uno de los primeros hombres en documentar la expansión de Roma aún como República. Durante los casi tres siglos anteriores al gobierno del primer emperador, César Augusto, Roma había adquirido mediante numerosos conflictos bélicos grandes extensiones de territorio que fueron divididos en provincias gobernadas directamente por propretores y procónsules, elegidos anualmente por sorteo entre los senadores que habían sido pretores o cónsules el año anterior.

Roma celebra los 1.900 años de las Termas de Trajano

Foto: Reconstrucción de las Termas de Trajano.

Vía: http://www.ansa.it/ansalatina/notizie/rubriche/italia/2009092718523..." target="_blank">Ansalatina.com, 27 de septiembre de 2009

Roma celebra los 1.900 años de la inauguración de las Termas de Trajano, abriéndolas parcialmente al público después de décadas de reconstrucciones que las habían ocultado.

Las ruinas de las Termas, que aún impresionan por su magnificencia y amplitud, ocupan un espacio de 60 mil metros cuadrados. Las Termas de Trajano fueron construidas sobre lo que fuera la Casa de Oro (Domus Aurea) de Nerón, cuya memoria el nuevo emperador quería borrar para siempre de la mente de los romanos. El arquitecto Apolodoro de Damasco, a quien se deben los mercados de Trajano, la basílica Ulpia y el puente sobre el Danubio de un kilómetro, aún existente, fue también el artífice de las Termas de Trajano, las primeras en estilo monumental, luego imitadas por las de Caracalla y Domiciano.

Fueron inauguradas el 22 de junio del año 109 de la era cristiana y fueron las primeras que se construyeron sobre un eje nordeste/sudoeste (diferente al norte/sur de los edificios precedentes), lo que le daba una mayor exposición a la luz y al calor del sol.

En esta superficie se yerguen todavía orgullosas y casi intactas dos de las cuatro exedras, un hemiciclo y las cisternas (denominadas las siete salas porque al descubrirlas durante el siglo XVI/XVI se pensó que eran salones inmensos y no los depósitos de agua que servían para la manutención de las termas).

Foto: Restos de la Termas de Trajano

En ese lugar se ha creado un parque arqueológico a poca distancia del Coliseo, que es poco frecuentado por los turistas.

Cerradas al público desde hace años, las termas de Trajano pueden ser visitadas ahora por pequeños grupos siempre que reserven su entrada con anticipación, llamando al número telefónico 060608, agregando el prefijo 0039 si se llama fuera de Italia. Marco Ulpio Trajano, que sucedió al emperador Nerva, reinó desde el año 98 hasta su muerte en 117. Como administrador, Trajano se destacó por su programa de construcción de edificios públicos, que reformaron la ciudad de Roma, entre ellos el foro de Trajano, el mercado y la Columna homónimos.

Trajano celebró sus mayores triunfos como comandante militar.