EPIGRAFÍA

La epigrafía es una ciencia autónoma y a la vez auxiliar de la Historia, a través de la cual se estudian las inscripciones hechas sobre materiales duros (piedras, huesos, metal, madera, cerámica, etc.), estableciendo metodologías para interpretarlas.

El topónimo Laas y su relación con el ara de Eiras (San Amaro, Ourense)

"El ara de Eiras, testimonio de un oppidum que honraba al popular dios Bandua". Así reza el título de los párrafos que JUAN CARLOS RIVAS FERNÁNDEZ dedicó al ara de Bandua de Eiras, dentro de un artículo titulado "Nuevas aras romanas orensanas y rectificaciones interpretativas en torno a otros epígrafes galaico-romanos ya conocidos", publicado en 1973 en el Boletín Auriense. De ese artículo procede la ilustración que vemos a la izquierda, a la que se ha añadido algo de contraste. Podemos compararla con las fotografías realizadas al ara en 2007 y con la que reproduzco al final del texto del año 2007. 

Sólo vamos a centrarnos en el posible topónimo Lámbrica, que figura entre la segunda y la tercera línea, donde RIVAS FERNÁNDEZ leyó Lansbrica y que trató de vincular con el topónimo actual de la parroquia, población en la que se asienta parte del castro, San Cibrao das Las (San Amaro, Ourense).

Decir que Lansbrica, o Lansbriga, es la opción popularmente más difundida y que, transcurridos tantos años, se sigue utilizando, hasta el punto de que figura en el nombre oficial del actual Centro de Interpretación Castrexa, ubicado en el propio monte en el que se asienta el castro.

La visita realizada al ara en 2007, situada en Eiras y de la que se desconoce el lugar de su aparición, sirvió para testimoniar el abandono de la pieza, expuesta a la intemperie e, incluso, al vandalismo. Se ha enviado notificación, en su momento, de este extremo a las administraciones culturales, que graciosamente otorgaron  el silencio por respuesta. 

Fruto de esa desidia es el peligro de desaparición de una pieza epigráfica de capital importancia que, como bien decía RIVAS FERNÁNDEZ en el artículo citado, la "situación geográfica de esta ara y la similitud del nombre dirige inevitablemente nuestra mente al gran oppidum de "A Cibdá" de San Ciprián de Lás". Tiene también razón cuando afirma que el sufijo -BRICAE alude a un núcleo de población importante, con carácter defensivo y con situación estratégica. En aquel entorno no puede ser otro que el actualmente conocido como castro o citania de San Cibrao das Las, "A Cidade", a un kilómetro del lugar de aparición del ara. Estamos de acuerdo en que el ara, sea cual sea su lugar de origen, perteneció a un territorio dominado por la ciudad fortificada, citania o castro de San Cibrao das Las, cuyo radio de acción tuvo que ser superior a uno o dos kilómetros para poder entender el hecho de la supervivencia de la población, unos dos mil habitantes, con productos agrícolas y ganaderos que no podían obtenerse dentro de sus murallas.

Para entendernos, el castro sería como la ciudad de referencia, centro o capital (la "Ciudad") de un territorio salpicado de pequeños castros, que son el origen de bastantes de las actuales aldeas. En la parroquia de Eiras, por ejemplo, se conocen dos diminutos castros y, además, hay restos de una villa romana. Sería sensato pensar que el ara de Eiras pudo dedicarse a un dios de Lámbrica porque esa era la ciudad que sometía a todo el territorio, y el dedicante, posiblemente el habitante de una villa romana, se sentía vinculado a las élites del castro. En aldeas vecinas existen otras aras que llegaron a nuestros días en casas rectorales, iglesias y capillas (Trasariz, Erbededo...). En Eiras existen, en el entorno del ara, un pazo, una rectoral y una iglesia.


Pero el loable artículo de RIVAS tiene, desde mi punto de vista, dos grandes problemas que todavía no han sido superados: El primero es la lectura del ya aludido topónimo Lansbrica, y el segundo su vinculación con el nombre actual de la parroquia, San Cibrao das Las

Del primer problema ya se ha tratado en otras ocasiones, en las que he buscado, bajo mi modesto punto de vista, aportar algo de sentido a la lectura. Las dificultades surgen con el mayor deterioro del epígrafe justo en ese punto, en las letras M y B al final de la segunda línea. Creo que las fotografías hablan por si mismas y el ara está a disposición de cualquier afortunado que quiera visitarla, salvando los obstáculos, obviamente. Gran error el de las administraciones culturales (léase Xunta de Galicia) el de no facilitar a la población, la verdadera propietaria de los bienes culturales de este país, el poder admirarla y garantizarle su conservación a las generaciones futuras. Advertir que, en este momento, desconocemos si el ara está en el mismo sitio. El pazo está abandonado y se ha puesto a la venta.

Por su interés, reproduciré textualmente un párrafo del artículo de RIVAS FERNÁNDEZ, en la página 89, en el que habla precisamente de la segunda línea del epígrafe del ara, donde están las cuatro primeras letras del supuesto topónimo:


"El trazo de la primera letra sólo puede corresponder a una A, lo cual es lógico para la más usual terminación del dios Bandua. La L introduce su trazo horizontal en la siguiente letra, dando la impresión de ser el travesaño de la A, lo cual no puede ser por dos razones: no existe ese trazo en ninguna de las cuatro A del epígrafe, y de ser travesaño se presentaría excesivamente bajo. La N pudiera parecer una M, pero el último trazo es simplemente un nítido y largo enlace con la S. Para nosotros la S no ofrece dudas, es del mismo tipo que las otras del epígrafe que, aunque diversamente tratadas, son todas esbeltas y con la curva inferior más cerrada que la superior; una O de menor tamaño en su lugar nos parece improbable, y el cierre de la curva inferior, que la pudiera hacer sospechar, se debe exclusivamente al enlace anteriormente mencionado".

Este primer problema se sintetiza en que la S de la segunda línea subordinaría claramente a la B, la última letra de la línea, por lo que considero dudoso que con este tipo de letra no se respetara el tamaño similar de los caracteres. Además, el "nítido y largo enlace" de la N con la supuesta S tiene bastante de fantástico, a mi modo de ver, desconociéndose enlaces similares en este tipo de letra. Si a todo esto añadimos que, en la visita hecha por nosotros en 2007, detectamos que la letra S estaba repasada con instrumento punzante dando lugar a un surco más estrecho que el de las letras colaterales, podemos dar por FALSA la letra S, la S de LANSBRIGA, propuesta por RIVAS.

El segundo problema es el de la vinculación del nombre del castro o citania, presente en el ara, con el actual topónimo de la parroquia de Las, San Cibrao das Las. RIVAS FERNÁNDEZ cita un documento del año 1458, que se conserva en el Archivo de la Catedral de Ourense, en "donde aparece todavía una significativa N, Laans". Según afirma RIVAS FERNÁNDEZ, "tenemos por fuerza que suponer la supervivencia del nombre del oppidum en el topónimo con que aún se denomina hoy a esta parroquia".

No conozco el documento de la catedral de Ourense, pero la evolución que propone RIVAS de LANS>LAAS>LAS no parece muy plausible, más si se sustenta en un único documento. 

Podemos citar otro, de similar cronología, año 1419, 17 de diciembre: "Ano do naçemento de N.S.I.Ch. de mille e quatroçentos e dez e nove annos, domingo, des e sete dias do mes de dezenbro. En este meesmo o abade de Sant Cloyo e o prior e o convento aforaron a Rodrigo Ares, morador en na freygisia de Sant Çibrao das Laas, e a sua muller Aldonça Yanes, a aa outras vozes apus o postromeyro de cada huun deles, feytas per ordee, conuen a saber, que vos aforamos a quarta parte entregamente do casar de Pineyro, que jaz en na dita freygisia (...)

Pero aún hay más. Otro documento fechado en 1401, el 19 de febrero, dice: "Anno do nasçemento de noso Saluador Ihesu Christo de mille e quatroçentos et huun annos, des et noue dias do mes de feuereiro. Sabean... nos don Gonçaluo, abad do moesteiro de San Cloyo do Ribeiro da Auia, et Aluaro Fernandes, prior, et o conuento... damos et outorgamos a foro a vos Iohan Fernandes, morador en Louçia, frigisia de san Çibrao das Lââs, por en tenpo de vosa vida et de Aldonça Peres, vosa muller et huna vos depusllo postremeiro de vos... conven a saber esto que vos damos a foro: o noso casar de Tras lo Rio, que he na frigisia de Santa Ougea d'Eyraas, o qual en nos renunçiou Ioan Peres...

Ambos documentos pertenecen al monasterio de San Clodio de Leiro, muy cerca de las parroquias de Las y de Eiras, en cuyos términos tenía posesiones. Los documentos están parcialmente reproducidos en las página 611 y en la 543 en "El Monasterio de San Clodio do Ribeiro en la Edad Media: Estudio y documentos", cuyos autores son MANUEL LUCAS ÁLVAREZ y PEDRO LUCAS DOMÍNGUEZ.

De estos documentos, como curiosidad, podemos destacar su redacción en gallego, el idioma en el que se escribían casi todos los documentos antes de los reyes Católicos, y la nomenclatura original de la parroquia: San Çibrao das Laas", algo distinto del topónimo actual y oficial SAN CIBRAO DE LAS. 

Creo son una prueba convincente de que el topónimo Laans hay que tomarlo, al menos, con ciertas reservas. Considero que el topónimo parroquial (Las) no puede relacionarse alegremente con el calificativo de Bandua del ara de Eiras. Si a ello añadimos que el supuesto topónimo del ara leído por Rivas (Lansbrica), es incorrecto, por la inexistencia de la letra S (al menos, yo no la veo) las conclusiones parecen claras:

a) Si no hay S en el epígrafe del ara, obviamente no puede decir LANSBRIGA ni LANSBRICA. La alternativa puede ser LÁMBRICA.


b) Si en dos documentos del siglo XV figura Laas, el otro documento esgrimido por RIVAS FERNÁNDEZ, de la misma cronología, no puede servir de prueba. Entonces el topónimo del ara no puede relacionarse con el de la parroquia. 


En favor de RIVAS FERNÁNDEZ decir que, con la salvedad de lo anteriormente expuesto, considero bastante acertada su lectura, aún sabiendo que quedan bastantes detalles por investigar. De ahí la importancia y la necesidad de proteger esta curiosidad epigráfica amenazada no sólo por la meteorología sino también por la desidia de las administraciones culturales.

Muchas gracias.

A continuación se reproducen las dos fotografías, para poder establecer comparaciones. La de la izquierda es la que aparece en el artículo de RIVAS. La de la derecha es mía, realizada en 2007. Puede apreciarse en la segunda línea la letra M, que precede a una B erosionada. En las tres primeras líneas: BANDU / A? LAMB / RICAE (...) 

BIBLIOGRAFÍA

RIVAS FERNÁNDEZ, JUAN CARLOS: "Nuevas aras romanas orensanas y rectificaciones interpretativas en torno a otros epígrafes galaico-romanos ya conocidos" en Boletín Auriense. Año III, Tomo III. Museo Arqueológico Provincial. Ourense, 1973.

LUCAS ÁLVAREZ, MANUEL; LUCAS DOMÍNGUEZ, PEDRO: El monasterio de San Clodio do Ribeiro en la Edad Media: estudio y documentos. Seminario de Estudos Galegos. Ediciós do Castro. Sada. 1996.

GONZÁLEZ IGLESIAS, F.:"O patrimonio, esquecido, no San Amaro. Análise da situación do patrimonio nun concello rural na provincia de Ourense". en Ágora do Orcellón 17. Páx. 38-52. Vigo. Marzo de 2009. ISSN 1577-3205.